Para conquistar a Tweek (CREEK)

Competencia.

Para gusto de Tweek, el día siguiente fue igual de tranquilo. Nuevamente, había llegado sin problemas hasta su casillero y se sentía inmensamente feliz de la que parecía ser su nueva vida tranquila. Sin embargo, ese día se dio cuenta de que se había olvidado de alguien justo cuando lo vio: al lado suyo descubrió a otro chico rubio, que permanecía frente a su casillero con expresión plácida.

-¿Kenny? -soltó sin querer.

-¡Tweek!

-¿Cómo supiste que era yo?

Kenny bufó, expresando lo absurda que le parecía la pregunta.

-¿Quién más podrías ser? No has cambiado nada -dijo tocándole el cabello-, y sigues temblando como siempre - se fijó en el termo que traía-. Ya deberías dejar eso; te hace daño.

Tweek escondió el termo con café detrás de él, temiendo que Kenny, que cada vez se acercaba más, se lo quitara.

-Hay mejores cosas que el café, ¿sabes? -sonrió con picardía-. Yo, por ejemplo, también puedo dejarte nervioso.

-¡V-Voy a mi clase! -gritó antes de irse con caminar acelerado, y Kenny se quedó ahí, complacido por el resultado de su broma.

Craig observó la escena, malhumorado, y estaba por ir a interrumpir cuando Tweek salió prácticamente corriendo y él se quedó viendo la sonrisa juguetona de Kenny, molesto. Sin embargo, pronto se dio cuenta pronto de que eso no era lo peor.

-No es justo -escuchó que se quejaba un chico a unos casilleros de distancia-. Aparece un chico lindo y Kenny lo acapara de inmediato. Abusa de que es bien parecido.

-Lo sé -contestó el otro-. Si no fuera el activo ya le hubiera dado hace mucho.

Craig escuchó eso con cierta extrañeza. No podía creer que alguien tuviera ese tipo de pensamientos por Kenny, pese a que él mismo ya había recibido coqueteos del desvergonzado chico.

-Sí, supongo que no está mal tampoco. Pero a mí me había gustado Tweek. Todos sabemos que es gay y que es pasivo; se le nota por donde lo veas. Y qué culo, ¿te has fijado?

-Sí, no ha cambiado mucho, pero su culo se ha puesto rico. Todo él lo está.

Para entonces, Craig ya tenía el entrecejo apretado.

-Y su personalidad no está nada mal tampoco: es tímido y muy nervioso. Rara vez se ven chicos tan lindos. Solo imagina los sonidos lindos que debe hacer cuando se lo cogen.

El otro muchacho rió, pero la risa fue tajantemente cortada por el fuerte azotón que Craig le dio a su casillero.

Ya había escuchado suficiente basura por un día. Se marchó de mal humor con las miradas perplejas sobre él.

Lo que más le molestaba es que se había descubierto, poco después, estando de acuerdo con ellos, y eso lo hacía sentir estúpido, no por pensar como ese par de idiotas, sino por haberse tardado tanto en darse cuenta de lo lindo que era Tweek. Después de todo, Tweek había sido suyo, pero ahora, que Kenny y otros idiotas lo querían para ellos, no tenía el derecho de reclamarlo.

Y es que no solo lo había tenido físicamente para él. No solo había sido capaz de tomarlo de la mano y acercarse a él en cualquier momento, sino que el chico le había entregado completamente su corazón. Eso también se había vuelto evidente para él: había una diferencia abismal entre el viejo comportamiento cariñoso de Tweek y el modo en que ni siquiera volteaba a verlo en el presente. Con eso en mente, no podía hacer otra cosa además de sentirse estúpido y miserable.

Se pasó con ese tipo de pensamientos prácticamente todo el día, completamente desconectado del mundo por la molestia que le generaban, hasta que, de nuevo, vio a Tweek a lo lejos. A diferencia suya, que tenía hora libre, Tweek estaba en educación física.