TEEN WOLF |SHIPS| 3

mini shots 3

L I A M

El nuevo Sheriff, Stiles Hale, está sentado en su despacho terminando el papeleo pendiente cuando la puerta de su despacho se abre y su marido y compañero entra, viéndose demasiado bien en su traje de policía.

—Hola, Agente Gruñidos, ¿qué necesitas? —Pregunta Stiles, riéndose cuando Derek rueda los ojos y le entrega su móvil abierto en una conversación de chat grupal. —Si, Sourwolf, escribes y la manada recibe un mensaje. Que genial es la tecnología.

—No, idiota. Lee lo que ha puesto Erica y mira la imagen que ha pasado Isaac. —Dice Derek cruzándose de brazos, Stiles se desconcentra un poco mirando como el uniforme se tensa en los bíceps antes de mirar el chat grupal. —Me sorprende que no seas el primero en haber leído los mensajes.

—Mi móvil está cargando y en silencio, sino no podría concentrarme en terminar el... ¿Qué demonios? —Exclama Stiles ampliando la foto porque no, es imposible. —¿Por qué mi cachorro se ve mucho más pequeño que de normal?

—Porque nuestro cachorro ahora tiene tres años. —Dice Derek, gruñendo la palabra "nuestro" mientras recoge la chaqueta y el móvil de Stiles para tirar de él hacia la puerta. —Han estado jugando con tus cosas de magia y chispa.

Stiles sigue mirando la imagen, dejándose llevar por Derek, quien lo sube al coche y lo lleva hacia la mansión Hale. Derek está un poco nervioso y confundido conforme pasan los minutos porque su compañero está en silencio. Y Stiles solo se queda en silencio cuando duerme -a veces-, cuando trama una muerte o cuando está viendo un anime, una serie o una película que ama.

—¿Estás bien, bebé? —Pregunta Derek, y entonces se da cuenta de que Stiles sigue mirando la imagen de Liam. —¿Sti?

—Derek, es tan adorable. —Solloza Stiles, y Derek rueda los ojos. Stiles siempre llora de lo adorable que es su cachorro, ¿por qué no se lo imaginó antes? —Es que mira como se ven sus mejillitas y, oh, dios. Qué cosita linda.

Derek vuelve a rodar los ojos y deja a Stiles llorando en silencio mientras conduce. Al llegar, saca a Stiles del coche y le quita el móvil antes de que se rompa porque le ha entrado agua dentro. Antes de que Stiles pueda quejarse, ambos se encuentran frente a un pequeño niño rubio de tres años, con las mejillas rojas y llorando en los brazos de Erica hasta que los ve.

—¡Sti! ¡Derek! —Grita el niño, llorando más fuerte mientras lucha contra los brazos de Erica, sus ojitos tornándose dorados cuando no logra controlar a su lobo interior.

Stiles se apresura a tomar a Liam en brazos y arrullarlo para que deje de llorar, cosa que funciona enseguida como la pequeña cosa mimada que es independientemente de si tiene veinte o tres años.

—¡Derek, mi cachorro es más pequeño y adorable! —Exclama Stiles antes de abrazarlo un poco más solo porque puede, dejando besitos sobre el cabello de Liam. —Mira, mira que cosita tan preciosa es. ¿Quién es el cachorro más adorable del mundo?

—¡Liam! —Exclama Liam riéndose, encantado de la atención que el nuevo Sheriff de Beacon Hills le está dando. —Liam es el mejor. Issy no, Issy es asco.

Isaac hace un ruido entre cabreado y exasperado, como si Liam no hubiese parado de decir cosas así todo el tiempo. Stiles resopla y acaricia los rizos de su otro cachorro antes de volver a prestar atención al cachorro más pequeño.

—Catwoman, cuéntame qué habéis hecho. —Dice Stiles mientras finge morder los deditos de Liam mientras este se ríe a carcajadas. —Aunque creo recordar que os dije que no podíais entrar en mi despacho, pues hay polvos que pueden ser mortales para lobos cotillas.

—¡No fuimos ninguno de nosotros! —Exclama Erica enfadada, por una vez, ellos no han hecho nada. —Estábamos aquí viendo una película cuando escuchamos un ruido en tu despacho, Liam fue el primero en ir, y cuando llegamos estaba así.

—¿Algún aroma conocido? —Pregunta Derek haciendo caras tontas al cachorro. Erica, Isaac, Boyd y Jackson ruedan los ojos al mismo tiempo porque su Alpha es un gran blando cuando se refiere a cachorros.

—Si, y tenemos al ladrón en el sótano. —Dice Jackson viéndose orgulloso por haber sido el más rápido en atraparlo. Además, espera a que Stiles lo halague por ser el más rápido, cosa que el humano hace, y Jackson hincha su pecho con orgullo.

Stiles baja las escaleras al sótano detrás de Derek, con Liam en sus brazos, contándole lo mal que Isaac hace los sándwiches. Al llegar, no se sorprende de ver a Theo sentado en el suelo y mirando fijamente a Liam.

—Así que, ¿qué intentaste robar de mis cosas? —Pregunta Stiles, mirando como Theo sonríe al niño en sus brazos. —¿Puedes dejar de mirar a mi cachorro y responder?

—No quería robar nada, suelo entrar por ahí porque mi aroma se desvanece con una planta que tienes y puedo subir al cuarto de Liam, donde suelo dormir. —Dice Theo, pues no pensaba que iba a decirle a los Alphas de Beacon Hills que sale con su cachorro más pequeño, bueno, ahora mucho más pequeño. —Por eso Liam fue el primero en ir, pero resbaló y un bote cayó sobre él.

Stiles mira a Liam, que está mordisqueando su placa con sus colmillitos, más babeándola que rompiéndola, y luego vuelve a mirar a Theo.

—Derek, está saliendo con nuestro cachorro. —Dice Stiles, pensando en cómo puede agarrar su pistola sin soltar a Liam. Derek, por su parte, rueda los ojos y gruñe hastiado. —¿Derek?

—Ya lo sabía, puede que confunda la nariz de los demás cachorros, pero no la mía. Solo estaba esperando a ver cuándo Liam confiaba en nosotros y nos lo decía. Pero al parecer ha sido de forma totalmente distinta.

—¿Lo sabías? —Preguntan Theo y Stiles al mismo tiempo, Theo sorprendido y Stiles dolido. Derek se encoge de hombros y luego mira solo a su esposo.

—Habrías querido que el primero en contártelo fuese Liam, y lo sabes. —Dice Derek, haciendo que Stiles asienta antes de mirar a Liam, quien gruñe a la placa como si fuese su presa, ignorando todo lo que pasa.

—Bien. Theo, te queda ahí hasta que Liam vuelva a tener su edad, luego, hablamos de las normas de esta casa sobre corromper a los cachorros de Stiles. —Dice el humano, besando la mejilla regordeta de Liam antes de subir las escaleras, no queriendo soltar jamás a su cachorro, que crezca y que salga con el idiota que ha salido de la probeta de un laboratorio.