19- Nos estamos conociendo.

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Al día siguiente me levanté como siempre. Luego me conecté a la terapia.
Diego: —Hola, Qué tal?
Carla: —Bueno, ayer fue un día bastante heavy por así decirlo.
Le conté todo lo que había pasado con Eric; me daba un poco de corte decirle lo del beso, pero le tenía que contar todo.
Diego: —Acabas de dar un paso muy grande para ti, no sólo por haberle dicho sobre esto.
Carla: —Ha sido un alivio que lo haya aceptado sin problemas. Porque sé que lo hice mal, que debía de habérselo contado antes...
Diego: —Eso ya da igual, porque lo hecho hecho está y por suerte salió bien.
Carla: —Si... Aunque ahora me da miedo lo que vaya a pasar, es todo muy incierto y no sé qué esperar. Él dijo que le gustaba, pero no se desde que punto.
Diego: —Bueno, poco a poco. Habla con él y no tomes ninguna decisión precipitada o de la que estés insegura. Seguro que si lo hablas él lo va a entender, y si no, aunque no creo que sea el caso, pues ya sabes a donde hay que mandarle.
Carla: —Es que ni siquiera sé lo que quiero ni lo que quiere él. Y no quiero que se acaben jodiendo las cosas entre él y yo, porque hay muy buen royo entre los dos independientemente de lo ayer.
Diego: —Pues ya sabes algo, sabes que por lo menos la amistad la quieres mantener. Ahora te deberías preguntar si te verías saliendo con él y si quieres salir con él. Aunque no hay que precipitarse en pensando que eso vaya a pasar, porque no lo sabes, y no creo que te venga muy bien llevarte un chasco de esas condiciones. Así que yo lo hablaría con él.
Carla: —Si, será lo mejor.
Diego: —Tómatelo con calma y háblalo con él con toda la naturalidad del mundo, él ya es adulto y seguro lo entiende.
Carla: —Intentaré hablarlo hoy con él a solas antes de que nos veamos todo el grupo.
Diego: —Vale, pues mañana me dices. Adiós.
Carla: —Hasta mañana.
Me tumbé un rato en la cama a pensar en lo que me había dicho Diego. Yo sí que me veía saliendo con Eric, pero no se si estoy preparada para algo así, siempre me había dado miedo. Además, luego cuando me tenga que ir a mi casa que va a pasar si es que empezamos a salir.
Después de un rato pensando fui a hablar con Martí.
Carla: —Hola.
Martí: —¿Qué tal?
Carla: —Bueno, dando vueltas a todo el asunto.
Martí: —¿Y eso?
Carla: —Pues nada, en plan ya hubo un primer paso, ahora no sé qué esperarme, que no me corre prisa nada pero no sé.
Martí: —No sé, yo que tú antes de nada más le conocería más, os conocéis de hace poco...
Carla: —Si... -suspiré— Cuando vais a grabar con la élite?
Martí: —Por la tarde, vienes no?
Carla: —Si si. Voy a escribir ahora Eric a ver si puede quedar, que prefiero hablar lo que ayer no hablamos antes de verle con todo el grupo.
Martí: —Vale, me dices si te tengo que acompañar a algún lado.
Carla: —Gracias.
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Carla: Buenos días❤
Eric: Buenos días😊
Eric: Que tal?
Carla: Bien, tú?
Eric: Recién levantado.
Eric: Hoy por la tarde vienes?
Carla: Si.
Carla: Sobre eso, no se si puedes quedar por la mañana...
Carla: Es que me gustaría hablar contigo.
Eric: Si, yo también quería hablar.
Eric: Si te parece en hora y media o así estoy donde Martí.
Carla: Valee.
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Carla: —Viene Eric dentro de un rato.
Martí: —Vale.
La verdad estaba nerviosa porque no sabía cómo empezar a hablar sobre el tema y siempre suelo hacer las cosas muy incómodas. Me tumbé un rato en la cama y me puse a ver el móvil. Después de un rato sonó el timbre.
Martí: —Carla, está Eric.
Carla: —Voy
Me levanté de la cama y justo se abrió la puerta.
Eric: —¿Puedo pasar?
Carla: —Si.
Eric entró y nos dimos sólo un abrazo. De repente me puse nerviosa y me entró mucho calor.
Eric: —¿Te pasa algo? Te acabas de poner muy roja.
Carla: —No, pero no sé porque estoy nerviosa.
Eric: —Uy, ¿te pongo nerviosa? —se rio.
Carla: —Un poco, pero tampoco te flipes.
Eric: —No no, si tú también me pones nervioso.
Le di un puñetazo flojito en un brazo y me reí.
Nos sentamos en la cama. Apoyé mi cabeza en su hombro.
Carla: —Esto... creo que deberíamos a hablar de todo lo de ayer y eso... —dije mientras le miraba. — Me gustaría que las cosas vayan con calma, no se si estoy lista para algo más, si es lo que quieres claro.
Eric: —A mi me da igual, bueno, creo que me gustaría tener algo más contigo... —me miró. — Pero yo también creo que lo mejor es ir poco a poco, no quiero que se agobiarte y que se acabe fastidiando.
Carla: —Gracias por entenderlo. —lo besé.
Eric me dio otro beso.
Eric: —Pues para cualquiera que pregunte: nos estamos conociendo. ¿Te parece?
Carla: —Vale.
Nos quedamos un rato viendo una peli tumbados en la cama. Llamó alguien a la puerta.
Martí: —¿Se puede?
Carla: —Si.
Martí: Abrió la puerta— Uy, vaya parejita.
Carla: —Todavía no afirmes nada.
Martí: —¿Cómo?
Eric: —Hemos decido que de momento no somos nada.
Martí: —A vale, si yo lo decía de broma. —nos miró— bueno, venía a decir que si os apetece ir con la élite a comer.
Miré a Eric.
Eric: —Uf, a mi me da un poco de pereza. —me miró.
Carla: —A mí me da igual.
Eric: —Na, yo no voy que si no me tengo que preparar corriendo y no me da tiempo.
Carla: —Pues yo no sé. —miré a Martí.
Martí: —Si queréis os podéis quedar aquí los dos, y ya luego venís para grabar.
Carla: —Vale. —miré a Eric— ¿te parece?
Eric: —Si luego no te importa acompañarme a mi casa...
Carla: —Hecho.
Martí: —Bueno, yo me voy en media hora.
Eric y yo seguimos viendo la película.
Martí abrió la puerta de mi cuarto.
Martí: —Bueno, me voy, no hagáis nada...
Carla: —Que estarás pensando... —me puse roja.
Eric: —Te has puesto rojísima.
Martí: —Ya te digo —se rio.
Carla: —Ay de verdad, vaya dos. —me tapé la cara con un cojín.
Martí: —Ahora si que me voy, adiós.
Se oyó un portazo. Noté que Eric se acercaba a mí, me quitó el cojín y se quedó mirándome.
Eric: —¿Se puede saber por qué te has puesto tan roja?
Carla: —Por el comentario que ha hecho, el de no hagáis nada... —suspiré— Ya me conoce, ni siquiera sé por qué lo ha insinuado.
Eric: —¿Te puedo preguntar algo?
Carla: —Adelante.
Eric: —¿Has tenido alguna vez algo con alguien?
Carla: —No, ni un beso, ni una relación ni relaciones sexuales, por si te referías a eso. —le miré—Siempre me ha dado miedo, y también he preferido esperar a alguien que merezca la pena.
Eric: —Sinceramente, espero ser yo esa persona.
Carla: —Puede ser.
Se acercó más a mí y me besó.
Eric: —Quiero que sepas que mientras nos estemos conociendo no creo que vaya a tener nada con otra chica...
Carla: —Tú haz lo que sientas, si quieres estar con alguien más, ya que nosotros no somos nada, adelante. Claro que me importará, pero no puedo esperar que la gente se tome las cosas mi ritmo.
Eric: —Sólo me interesas tú.
Carla: —Que bien te ha quedado eso. —empecé a reírme.
Eric: me dio un cojinazo— Así no se puede... —me besó otra vez.
Apoyé mi cabeza sobre su pecho y seguimos viendo la tele. Esta vez él me acariciaba el pelo. Después nos levantamos e hicimos algo de comer. Luego fuimos hasta casa de Eric para que se cambiase de ropa. Entramos y no había nadie.
Eric: —Ven a mi cuarto, si quieres, que me voy a cambiar.
Me tumbé en su cama, mientras, Eric miraba en su armario.
Carla: —¿Qué vais a grabar hoy?
Eric: —Retos de fútbol.
Carla: —Entones te pondrás la camiseta del Barça, ¿no?
Eric: —Cómo lo sabes.
Se quitó la camiseta y los pantalones. Lo miré y sin pensarlo solté lo primero que se me paso por la cabeza.
Carla: —Del Barça tenías que ser. No se cómo me puedes gustar. —bromeé.
Eric: —Te gusta la gente con buen gusto. —se lanzó encima de mí.
Yo estaba tumbada en la cama y Eric estaba encima de mí sólo con ropa interior, nos fundimos en un beso. Sólo nos besamos, aunque no se por cuánto tiempo, hasta que alguien nos interrumpió.
Mamabuyer: —Perdón, pensé que no había nadie en casa.
Eric de levantó de encima de mí y se vistió. Yo me senté en la cama. Creo que los dos nos habíamos puesto muy rojos.
Mamabuyer: —Pensé que teníais que grabar con la élite.
Eric: —Si, en un rato.
Mamabuyer: —A vale, vaya, bueno, siento haberos interrumpido. Sólo venía a dejar unas cosas y como estaba la puerta abierta pensé que no había nadie.
Mamabuyer: —Perdón, pensé que no había nadie en casa.
Eric de levantó de encima de mi y se vistió. Yo me senté en la cama. Creo que los dos nos habíamos puesto muy rojos.
Mamabuyer: —Pensé que teníais que grabar con la élite.
Eric: —Si, en un rato.
Mamabuyer: —A vale, vaya, bueno, siento haberos interrumpido. Sólo venía a dejar unas cosas y como estaba la puerta abierta pensé que no había nadie.
Eric: —Yo pensé que os ibais toda la tarde fuera, pero bueno. A ver sólo nos estábamos besando y yo estaba sin ropa porque me estaba cambiando.
Mamabuyer: —Si a mí no me tienes que dar explicaciones... Ya eres mayorcito. Bueno os dejo solos.
Se fue y cerró la puerta.
Eric: —No me esperaba esto.
Carla: —Ni yo. También... anda que no había momentos.
Nos empezamos a reír. Eric se acabó de preparar. En lo que Eric iba al baño yo salí d e la habitación y justo me encontré con su madre.
Mamabuyer: —¿Qué tal Carla?
Carla: —Bien. ¿Vosotros?
Mamabuyer: —Bien. Siento haber entrado antes en el cuarto como no oí nada pensé que no había nadie.
Carla: —Da igual, nos has dado un susto, pero bueno.
Mamabuyer: —Eric no me había dicho nada de que estabais juntos.
Justo entró Eric en el salón.
Eric: —Es que no estamos juntos.
Mamabuyer: —Vale, yo no me quiero meter que conste.
Carla: —No si da igual, bueno a mí por lo menos. —Me giré hacia Eric.
Eric: —Bueno, ya nos vamos. Adiós.
Carla: —Adiós.
Mamabuyer: —Pasadlo bien.
Carla: —Gracias.
Salimos a la calle.
Eric: —Tenemos que ir al centro comercial, que todavía están allí.
Carla: —¿Todavía? Pero si llevan desde por la mañana.
Eric: —Van con calma.
Estuvimos hablando todo el camino. Mientras caminábamos, nos fuimos juntando poco a poco, y al final Eric me cogió de la mano. Yo apoyé mi cabeza sobre su hombro por unos instantes.





(Siento haber tardado tanto en publicar, espero que os esté gustando y muchas gracias por el apoyo)

Todo es posible [Eric Ruiz Y Yo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora