El desconcierto de Nathaniel

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Nathaniel estaba envuelto en una oscuridad, sabía que estaba apuntó de despertar; sin embargo, por alguna razón no podía abrir sus ojos

Intentó mover su cuello y un dolor agudo impidió que siguiera con la idea, todo su cuerpo era tan doloroso que parecía estar quemándose principalmente un lugar en su parte baja y en la columna donde una puntada y el dolor a fuego ataca segundo a segundo impidiéndole hacer cualquier movimiento

La desesperación lo obligó a abrir sus ojos, solo después de mucho intento consiguió resistir a no volver a cerrarlos y pudo ver el claro brillo del día que envolvía toda la habitación

Su cuello todavía no se recupera tan fácilmente del congelamiento agudo y no puede voltear libremente la cabeza. Tirado en la cama con la respiración pesada vio el hermoso techo y justo cuando iba a preguntar donde estaba, unas imágenes le llegaron a su cerebro con una velocidad asustador y cuando terminó, la humillación, dolor e incredulidad invadió a Nathaniel

William se atrevió a abusar de él, una información que se repetía y se repetía miles de veces hasta que logró enrojecer esos ojos verdes que se volvieron aún más claros con las lágrimas retenidas. Es un hombre orgulloso y su mente comenzó a golpearlo con resentimiento, fue tan humillante, es tan humillante que otro hombre lo haya derribado así y lo haya tomado como una mujer

"No, no, no ¡Eso no pasó!"

Nathaniel olvidó todo el dolor y comenzó a golpear su cabeza deseando borrar esas imágenes de su amigo encima de él, maltratando y humillando tan descaradamente

Instante después arrojó el edredón que lo cubría e intentó levantarse de la cama y por ende cayó de lleno impactándose con el frío piso

Ahí Nathaniel se dio cuenta de que estaba completamente desnudo y no pudo soportar observar su cuerpo. Se obligó a levantarse y fue a la bañera donde vomitó absolutamente todo hasta su estómago doler. El odio y repugnancia que sentía de sí mismo y de William fue demasiado para soportar y gritó. No supo que hacer, pero solo quería esconderse en una cueva oscura donde nadie pueda verlo

No recordó por cuanto tiempo se duchó, su mente fue su peor enemigo con las imágenes que no paraban de realizarse

Salió con el cabello mojado y la piel roja e irritada por limpiarla con vehemencia, sintió que todavía no era suficiente y usó sus uñas queriendo quitar su piel y borrar todas esas marcas en su piel. Colocó su ropa del día anterior con las manos temblorosas, su camisa blanca arrugada se abotonó sin cuidado y cuando terminó de abotonar lo que sería el último, el pitido de la puerta abriéndose llegó a sus oídos

"Nath, ya estas despierto, pensé que todavía estarías dormido y quería hacerte algo delicioso para comer" dijo como si nada de malo estuviera en su conciencia, ignoró la imagen perdida de Nathaniel y fue a la cocina

"Debes estar hambriento. Nathaniel, yo haré todo lo que te gusta comer" mientras agarra el sartén y coloca las verduras para limpiar, Nathaniel también llegó a la cocina. William apretó su mano en un puño y cerró sus ojos al no saber cómo enfrentar a su amigo -- ¿quieres que te haga algo especial? Te cocinaré lo que me pidas

Nathaniel lo mira con todo el odio que jamás pensó sentir en su vida, ese hombre sabe que lo ha hecho mal y solo lo está ignorando

William dobló la manga de su camisa hasta el codo y abrió el grifo para lavar sus manos empezando a trabajar

"Maldito bastardo, no sé que palabras decir para expresar lo hijo de puta que eres. ¡Ni siquiera muestras arrepiento!" Corrió hacia el hombre que estaba parado de espaldas hacia él, tiró de su brazo y el impacto en el rostro llegó con un sonido claro

Fue mala idea casarme en Las Vegas Donde viven las historias. Descúbrelo ahora