Realmente me inquietaba mucho el no poder salir de ahí. A duras penas conseguí levantarme del rincón de mi soledad y intentar buscar alguna otra vía de escape. Miré a todos lados pero lo único que conseguí ver era una mesa, mi cama y una silla. Estaba decidido a salir de ahí, cogí la silla y con todas mis fuerzas la estampe contra el cristal oscuro, pero no logre hacerle ningún rasguño. probé otra vez pero fué en vano porque la silla a más de no hacerle nada al cristal se me partió en las manos de un golpe seco. Como deduje que la silla era muy poca masa de contacto comenzé a usar más cosas como la mesa y la cama. yo no paraba de intentar resquebrajar aquel impoluto cristal, hasta que al final concentre toda mi fuerza en un solo golpe destructivo, que partió el cristal en miles de pedazos que dieron así paso a una lluvia de colores relucientes, que brillaban con la luz al caer. una vez salí de aquella sala me topé con esas extrañas criaturas, que por su aspecto y sonido no parecían muy amigables. Uno de esos seres intento morderme el brazo pero lo esquive con agilidad y velocidad. Desde que aquella criatura intento morderme he estado evitando el encuentro con otros como el. Me metí por sitios que nunca había visto, habitaciones oscuras llenas de sangre por el suelo y las paredes, seguí caminando hasta que encontré una sala enorme llena de esas criaturas por el suelo y personas muertas con armas en las manos... Decidí coger el arma que me pareció mas fuerte contra aquellas criaturas; un cuchillo, ya que lo demás solo eran palos y pistolas sin gatillo. Me encontré a una criatura y probé aquel cuchillo con los bordes prácticamente afilados. Esa criatura era muy fuerte ya que conseguí asestarle 3 hendiduras con el arma y aun así la criatura seguía de pie... Mire fijamente a la criatura, sus ojos desprendían odio y soledad. De repente la cabeza de aquella criatura exploto rociándome de sus jugos cerebrales. Miré a todos lados y supe por el silbido que alguien había usado un arma de larga distancia, pero no sabia de donde provenía aquel disparo. Hasta que una voz me grito diciendome: -Oye tu! que te crees que estas haciendo? -yo confuso por no saber que decir solte sin pensarlo: -El empezó...! -Ese humano me miró con alegria. -Era broma muchacho.- me dijo esbozado una sonrisa. Me dijo que le acompañara si queria vivir.
ESTÁS LEYENDO
Los 5 lados del pentagono
Science Fiction-¿Miedo?... ¿Temor?... Sinónimos muy parecidos, aunque al mismo tiempo no reflejan lo mismo. ¿Realmente crees que estarías preparado para un Apocalípsis? ¿Que sucederá en esta fantástica aventura de un chico que solo quiere descubrir su pasado?
