Capítulo 4: El psicólogo

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Cuando el mango de la espada de esa horrible criatura me tocó la espalda, se me puso borrosa la vista, i en ese preciso instante, desperté. Estaba en la casa en donde me encontré el matrimonio unos días atrás, completamente sudado y confuso, me levanté poco a poco, con un dolor de cabeza terrible. Al llegar al salón, la mujer me preguntó como estaba y vio que tenía un chichón bastante grande en la parte trasera de la cabeza. Decidimos ir al hospital, con la mujer por si acaso me daba un bajón por el camino. Al llegar al hospital, me vino el recuerdo de la pesadilla como si fuerza un "flashback" y me desmayé. Al volver en si de nuevo estaba en una camilla como la del sueño pero sin atar esta vez, estaba rodeado por la mujer, un médico y un psicólogo. El psicológico pidió a la mujer y al médico que nos dejaran a solas. Le pregunté por el sueño que tuve, me contestó una cosa que me dejó atónito. Lo que me contestó fue :"Sólo alguien que comparta la misma sangre que la bruja,podia ver Silent Hill en el mundo de las pesadillas y su controlador". Me puse a pensar por un momento, y me vino a la cabeza una conexión masiva. Lo de la orden de arresto,  el golpe en la cabeza... Debí ver Silent Hill en el mundo de las pesadillas, y le cabeza de pirámide debía ser el señor de aquella dimensión. Si sólo alguien que comparta la misma sangre puede verlo y yo lo he visto, Sarah comparte mi misma sangre, así que deben creer que Sarah es la bruja de Silent Hill. ¡No desapareció, las secuestraron! Tengo que averiguar que les hacen las brujas aquí, y rápido antes de que sea algo malo,como me temo... El psicológico, que antes era historiador del pueblo, me dijo que en un hostal cercano había una habitación que se supone que desapareció, y podía contener en una caja con un libro de la brujería y sus actos correctivos, y me dirijí con el psicológico,que por cierto se llamaba Harry,al hostal. Cuando llegamos fuimos al segundo piso, donde se suponía que había la habitación misteriosa. Encontramos entre la 245 y la 247 al final del pasillo un cuadro de quema de bruja, lo rajamos con un cuchillo y ahí estaba, la habitación 246, la habitación desaparecida desde hacía más de 50 años. Entramos, buscamos la caja, y cuando Harry la encontró bajo la cama me llamó y la colocamos encima del escritorio que había. Con el cuchillo que teníamos a mano forzamos la cerradura, abrimos el polvoriento libro, y lo empezamos a leer entre Harry y yo...

Silent Hill: Memorias DestrozadasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora