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- Por fin llegamos .- Dijo uno de los héroes.

Todos estaban parados en frente de la puerta del laboratorio, el cuál era muy grande, se quedaron callados unos segundos, pensando en todo lo que paso unas horas atrás. Hasta que uno de ellos decidió reaccionar y hablar para romper ese silencio que reinaba en aquel lugar.

- Pues bueno, voy a sacar la credencial, así pasamos todos .- Habló Fargan para buscar la tarjeta, aunque no la encontraba...

- ¿Que sucede, Fargan? Queremos pasar tío .- Dijo Luzu.

- N-no lo encuentro... .- Respondió el anterior nombrado para seguir buscando.

- Si la llegaste a perder, o se te cayo en el camino, estas jodidisimo .- Dijo esta vez Auron.

- Tiene razón ¿Mira si se te cayo por el camino y alguien la encuentra y agarra? ¡Va a saber toda tu información personal! .- Lo regañó Vegetta.

- Tampoco es como si me importará que vieran mi información personal .- Contesto neutral el chico.

- ¿Me dan permiso de pegarle? .- Preguntó Alex.

- Ci .-

- Oh, esperen... .- Interrumpió el búho, y se quedó callado unos 5 segundos -¡Aquí esta! .- Dijo mientras mostraba la tarjeta.

- ¿Todo este tiempo estuvo en los bolsillos de tu campera? .-

- Al parecer si, pero mejor entremos, seguro los científicos nos están esperando .- Contestó para escanear la tarjeta y insertar la huella de su dedo pulgar, después de unos segundos marcó que era correcto, y se abrió la puerta.

Los héroes entraron al gran laboratorio, y se quedaron unos minutos embobados viendo y analizando el lugar. Casi todo el lugar era blanco, y algunos muebles eran de un color negro, también había mucha iluminación, había muchas botellas de pociones, tubos de laboratorio, papeles, las cosas eran muy variables.

- ¿Ustedes son los que tenían que traer a los aldeanos? .- Preguntó una científica.

- Oh, si, somos nosotros .- Contestó Rubius.

- Bien, entonces siganme .- Ordenó la chica, y todos obedecieron.

Menos uno, que se quedó en un trance mirando al suelo, después de unos segundos se dio cuenta que sus amigos ya se estaban yendo.

- ¡Oye espérenme, no se vayan sin mi! .- Gritó Rubius para salir corriendo tras sus amigos con el aldeano en brazos.

Después de un rato de correr llegó a donde se encontraban sus amigos, estos lo miraron un tanto confundidos, y Auron no pudo evitar soltar una risita, se dio cuenta de que todos lo miraron a el y se puso un tanto nervioso.

- Lo siento .- Se disculpo el de mechón aclarándose la garganta.

- Bien, puedes dejar a ese chico en la camilla .- Sugirió la científica, el oso hizo caso y lo dejo en la camilla que estaba en esa sala - Gracias por traerlos, sin duda nosotros no lo hubiéramos podido traer a ellos .- Agradeció la chica.

- ¿Y que harán con ellos? .- Preguntó Luzu curioso.

- Oh, pues, primero les haremos algunas pruebas y análisis, si se siguen comportando así tendremos que matarlos .- Contestó neutral.

- Ya veo .-

- Pues, creo que ya hicimos mucho, mejor nos retiramos .- Habló Vegetta y se fue con sus compañeros a fuera de la sala.

Estuvieron charlando en voz bajita, para no distraer a las personan que trabajaban allí, mientras se dirigían a la salida de ese gran laboratorio. Cuando llegaron a la puerta, esta vez Willy decidió abrir la puerta con su tarjeta.

°Los 9 heroés y una Princesa°  ( Karmaland y Tú) CANCELADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora