En el Poder del Mafioso [En Curso]

Capitulo 3

Libertad

Punto de vista de Ashy

Me despierto en una cama muy suave y veo a una señora un poco mayor a mi lado, ella sólo me sonríe, me aclaro la garganta y la saludo
- H. Hola..
- Al fín despiertas eh, pensaba que ya no ibas a despertar por hoy
- ¿Donde estoy? - pregunto ignorando a la señora por completo
- Estas en la casa del Joven Dante, precisamente estas en Italia  
- ¿Dante? Quien es el, perdón fui una mal educada mi nombre es Ashy Williams un gusto - Le pasó la mano sin ninguna sonrisa
- El gusto es mía señorita Williams, yo soy Zulma la Nana de esta casa y acá te traje algo de comer, seguro no has comida nada
- Así es Zulma tengo mucha hambre - agarró la comida que me pasa y la observo
- Perdona la dejaré un momento sola
- No te preocupes - Digo haciéndole señas con la mano, me aseguró de que se haya alejado y salgo de la pieza, pero primero observo mi vestimenta y veo que sólo tengo una camisa grande azul marino que es de hombre y un biquini.
Sigo caminando y bajo las escaleras, veo la puerta que da hacia la salida intento abrirla pero está cerrada ¿qué pensaba?, ¿qué me dejarían ir así como así después que me trajeron acá sin mi consentimiento? , vuelvo hacia atrás y entró en una cocina muy grande, ya no sé en qué parte de la casa me encuentro, es muy grande así que vuelvo a subir las escaleras y se me olvidó donde quedaba mi habitación.
Maldita seas Ashy repito esa palabra en mi mente, pienso como podía salir de aquí y quien es aquel hombre que se llama Dante. Porque me querría aquí, sigo buscando y entro en una pieza que tiene un acceso hacia una ventana pero está cerrada, intento romperla sin éxito alguno, me echo en el suelo y empiezo a llorar y me pregunto ¿Por qué mi vida es tan miserable?. Una madre que no me quiere y un Padre al que ni conozco, mi hermana me odia por ser lista, y para completar un padrastro que me dice a cada segundo que soy inservible. Lloro aun mas por la mala familia que me toco tener. Mi vida no solo esta arruinada sino que yo estoy podrida desde muy adentro, no podía soportar algún daño más de parte de nadie. Oigo pasos y veo una silueta alejarse, me pongo de pie y empiezo a caminar silenciosamente, después de todo sigo queriendo mi libertad. El hombre se detiene en frente de una puerta y me ve de reojo, me sobresalto y me pongo en guardia
-         Que haces fuera de la cama, pensé que te habían roto las costillas
·       Eso fue lo único que dijo y me dejo en las nubes, ¡es muy guapo!
-         ¿Me hablas a mi?. Tu quien eres, y porque debería quedarme en la cama en un lugar que ni conozco – pregunto con calma, tal vez este hombre me podía ayudar a salir de esta casa
-         Tranquila, soy Dante y estás en tu casa
-         ¿Perdona?, yo a usted no lo conozco, pero solo quisiera saber dónde está la salida
-         Deberías descansar y mañana hablaremos de eso
·       Me jalo de mis brazos y me metió en la misma pieza que estaba hace unos minutos. Entonces él es el dueño de la casa, pero su cara me parece un poco conocido
-         Espera no me arrastres, ¡escúchame que partes no entiendes que quiero irme de acá! Te agradezco mucho tu hospitalidad  pero..
-         ¡Basta!, cállate no me hagas perder la paciencia, te lo diré ahora, descansa y hablaremos mañana de esto
·       Me puse nerviosa y libere de sus manos mi brazo
-         ¿Tú eres el dueño de esta casa? *pregunte dudosa por si no me respondía
-         Si.
-         Porque estoy aquí
-         Porque yo así lo decidí
-         Y solo por eso debo de estar acá, tengo familias que han de estar  preocupados por mi allá afuera 
-         ¿Porque te mientes a ti misma?, cualquier vida que tuvieras allá afuera no iba a ser tan especial como el que yo te daré acá, además según mis informantes no tienes novio y esa familia que tú dices ni siquiera se preocupa por ti. ¿quieres que siga hablando?
-         Aun así no tienes el derecho de retenerme aquí, déjame ir por favor
-         No. Ahora descansa que mañana tendremos un largo día juntos 
-         Por favor déjame ir, o te juro que te are la vida imposible
-         No me gustan las amenazas Ashy, estas en mi casa y aras lo que yo te diga o de lo contrario atente a las consecuencias.
-          No,  no lo hagas por favor no me dejes aquí * Salió de la pieza dejándome sola, grito de la desesperación y pienso en cómo voy a salir
Pasan algunas horas y ya son las 20:30 de la noche, entra la Nana con algunas compras y me sonríe
-         Que haces en el suelo mi niña levántate de ahí * se apresura en ayudarme a levantar y me siento en la cama ya empieza a hacer frio*
-         Tu trabajas aquí o te retienen también
-         Jaja no, yo vivo en esta mansión desde que era señorita y bueno acá sigo apoyando al joven Dante
-         Tu sabes porque estoy aquí
-         No, además de que no sé nada,  eres la primera mujer que el joven Dante trae en la casa
-         La primera, ¿Por qué? Acaso no habían venido otras chicas
-         No, el Joven es muy reservado con respecto a su vida personal, además tu eres la primera novia que conozco de el

*Novia, pero si yo no conozco al joven digo en mi mente*

-         No, no, te estás equivocando Sra. Yo no soy novia del joven que usted me habla además esta es la primera vez que lo veo.
-         Hay no tengas vergüenza de decirme esas cosas, ahora ven, estas ropas lo eligió el joven para ti te lo puedes probar a tus gustos, y si no te gustan mañana iremos de compras para que te sientas bien a gusto en esta casa
-         Gracias Zulma los veré mañana, ahora quiero dormir un poco
-         Está bien mi niña descansa, nos vemos mañana

Fingí acostarme en la cama para dormir, y cuando salió de la pieza  me levante y  asegure la puerta, mire en la ventana y solo hay un árbol para bajarme, tengo que irme de aquí, baje por la ventana y me sujete por el árbol llegando sana el suelo.
Había 2 guardias controlando la entrada, me asegure de salir de ahí sin que ellos me vieran y cuando me iba a dar la vuelta para salirme por el portón otros 2 hombres me vieron y encendieron la alarma, empecé a correr sin rumbo, estaba descalza y con solo una camisa y un biquini. Al salir en la vía pública todos me miraban, seguí corriendo y al cabo de unos minutos un auto negro casi me atropella y se detuvo en mi frente, Dante salió del auto y me miro fijamente, no pude descubrir la manera en que me miraba
-         Qué crees que haces, porque saliste de la casa así vestida
-         Te dije que no quería estar ahí a la fuerza y no me hiciste caso
-         Entra en el auto, estas manchando mi reputación
·       Me jaloneo dentro del auto y se subió detrás de mí, transmitía toda su ira en un suspiro y no me volvió a mirar
-         Tu reputación, ¿acaso no te importa lo que yo este sintiendo hacia a ti?
-         Hablaremos en la casa
-         Respóndeme ahora, ¡crees que porque mi familia me trata mal no tengo sentimientos o no tengo derecho a elegir donde quiero estar y donde no!
·       Las lagrimas votaron de mis ojos grises, y me puse más nerviosa al ver que no me contestaba
-         Acaso tratas así a todas las mujeres que te rodean, solo te pido mi libertad y me lo niegas, ni siquiera te tomaste la molestia en decirme que hago aquí

* mis lagrimas seguían cayéndose sin parar, al llegar solo me baje del auto y entre directo en la sala al ver a la nana grite de rabia, las lagrimas se hicieron más, agarre un florero y lo tire por la pared que se rompió en pedazos en frente de los pies de Dante, no había acabado y volví a tirar otra estatua en el suelo.
-         Te odio Dante...

* murmure por lo bajo subiendo escaleras arriba y me encerré en la pieza llorando, me acosté en la cama más tranquila y maldije toda mi vida antes de dormir*  
A la mañana siguiente desperté y vi a Dante poniéndose un traje ¿Qué paso acá porque él está en mi pieza?, ¿acaso dormí en su pieza? . Abrí los ojos en par y él se dio la vuelta sonriéndome cálidamente 

¿Qué pasó porqué me está sonriendo?