━━━━━━━━╰ ☆ ╮━━━━━━━━JiMin llegó a la habitación del hotel y se dejó caer en la cama preso del cansancio. De repente se vio siendo un niño. Estaba en el jardín de su casa, oliendo el rosal que acababa de plantar el jardinero y apareció por allí Yoonie, transportando un bote de cristal con algo dentro.
-¡Mira Minnie, es la mariposa tigre! -Le dijo agitando el tarro.
La pequeña mariposa amarilla y de rayas negras, batió con energía las alas.
-Oh, es preciosa. ¿Y qué nombre le pondremos?
-Ninguno, solo la atrapé para que la vieras, pero pienso ponerla en libertad -Le dejó claro.
El niño lo miró desilusionado pero accedió a regañadientes. Sabía que cuando Yoonie se obstinaba con algo no había nada que lo hiciera cambiar de opinión. Soltaron a la mariposa mientras la contemplaban volando libre bajo el sol y echaron una carrera de vuelta a la casa . La señora SooJin había preparado granizado de limón y tortitas de arándanos.
El sueño siguió su curso y JiMin se vio en su cama con dosel de corazones que le habían regalado por su cumpleaños. En cuanto la señora SooJin le dio las buenas noches y salió de su cuarto, el niño sacó el wilkie talque que tenía escondido bajo las mantas y lo encendió.
-Aquí Chimmy llamando Cooky -Susurró en medio de la oscuridad. Pero nadie contestó -Aquí TaTa llamando a Shooky
-Insistió más fuerte.-Es Shooky -Suspiró YoonGi al otro lado del aparato.
-Lo que sea ¿Se puede saber por qué no contestabas?
-¿Cómo quieres que te conteste si no dices bien mi nombre? -Le reprochó.
El castañito entornó los ojos en blanco.
-Yoonie eres increíblemente odioso ¿Lo sabías?
-Y tú eres incapaz de recordar un simple nombre -Volvió a replicar.
-Bueno, da igual. Tu madre acaba de salir de mi habitación, ya podemos hablar sin problemas.
-¡Espera, espera, ahora viene a la mía!
-Susurró antes de esconder el walkie.En ese momento se escuchó el ruido de una puerta abrirse y unos pasos de tacones acercándose deprisa.
-Yoonie, hijo, ¿Todavía sigues despierto? Sabes que mañana tienes clases.
-Ya lo sé, mamá.
-¿Quieres que te lea un cuento?
-No, ya me lo leo yo solo -Se apresuró a contestar en cuanto escuchó las risitas de su amigo desde el aparato.
-Esta bien, luego apaga la luz.
-Sí mamá.
En cuanto se vio de nuevo a solas, sacó el walkie de su escondite.
-¡Uff, por los pelos!
Y los dos niños se echaron a reír.
JiMin se vio en otra imagen junto a Yoonie. Estaban haciendo los deberes en el salón mientras la señora SooJin limpiaba la cubertería de plata.
-Yoonie, hijo, échale una mano -Le pidió al ver que el castañito mordía frustrado la punta del lápiz.
-Minnie, mira, es muy fácil -Le animó con una sonrisa cálida -Solo tienes que sumar estos números y dividir el resultado con este otro para que te de la solución del problema
-Le explicó, señalando su cuaderno.-Odio las matemáticas -Se quejó el niño.
-Las matemáticas son fundamentales para nuestro desarrollo intelectual y para que pensemos de una manera ordenada y lógica.
-Lis mitimiticas sin fundimintilis piri nuistri disirrilli intilictual -Repitió JiMin, burlándose de su tono repelente -¿¡Pero tú te escuchas!?
La señora SooJin se echó a reír. La verdad es que su muchachito era muy listo para su edad. No había duda de que llegaría lejos. Quién sabe, quizás incluso se graduara en la universidad. Dios sabe que ella haría todo lo posible por que así fuera.
El castañito observó el orgullo con que la señora SooJin contemplaba a su hijo y sintió otra punzada de celos.
JiMin también se vio tumbado en la hierba, observando un insecto que trepaba por su dedo índice. A su lado se encontraba Yoonie con un libro, por supuesto.
-¿Qué haces? -Le preguntó.
Se sentía molesto porque su amigo no hacía otra cosa que leer y no estaba acostumbrado a que lo ignorase. Pero si había algo capaz de arrebatarle su atención, eran precisamente los libros.
-Estudiar para el examen del viernes -Le contestó sin levantar la mirada del cuaderno.
JiMin puso los ojos en blanco y se dejó caer en la hierba.
-Yoonie, ya has repasado esos apuntes mil veces. Sabes que aprobarás sin problemas.
-Sí, pero también quiero asegurarme de que sacaré buena nota.
-Algún día se te secará el cerebro de tanto estudiar -Replicó irritado.
Yoonnie se encogió de hombros.
-La verdad es que no solo lo hago para sacar buena nota. Mi madre ha dicho que me compraría las zapatillas de deporte si aprobaba -Confesó entusiasmado.
-¿Las que se iluminan cuando pisas?
Yoonnie asintió sonriente.
-¡Bah! -Se burló JiMin -Yo tuve diez pares de zapatillas como esas, pero ya pasaron de moda. Ahora las que se llevan son las que anuncia Michael Jordan en la tele.
-Y, pero esas valen muy caras y mi madre jamás podrá comprármelas -Musitó avergonzado.
-¿En serio? Pues mis padres ya me las compraron ayer -Comentó JiMin con malicia.
El castañito observó que los ojos de su amigo dejaban entrever una profunda tristeza, y se regodeó para sus adentros. Estaba harto de que tuviera tanta suerte. A él nadie le regalaba nada por sacar buenas notas o por hacer algo bien. Sus padres ni siquiera le preguntaban cómo había pasado el día en el colegio. Simplemente abría la boca y todo lo que pedía se lo daban.
Pero no fue la única vez que Jimin decidió humillarlo. A medida que se hizo mayor, se interesó por la moda , los chicos, las fiestas , y se distanció de su mejor amigo. Lo vio como objeto de sus bromas y empezó a burlarse de sus orejas, de sus dientes de conejo, de su cuerpecillo enclenque. Y Yoonie aguantaba cada uno de sus desprecios esperando que algún día volviera a ser el dulce Minnie.
Pero el chico no se cansaba de ser cruel y seguía avergonzándole delante de los demás a la mínima oportunidad que se le presentaba. Hasta que llegó aquel día en que ocurrió lo de ChanYeol y vio al muchacho desesperado y con la cara ensangrentada.
«Di la verdad, Minnie. No me hagas esto. ¡Di la verdad!» le suplicó entre lágrimas.
Pero tuvo miedo y guardó silencio.
JiMin se despertó sobresaltado y lloroso. ¿Pero qué había hecho? Todo lo que quería era echar el tiempo atrás y abofetear a ese mocoso estúpido que fue... Quería volver al día en que estaban tumbados en la hierba y cambiar todo desde aquella conversación.
Pero lamentablemente no tenía el poder de dominar las agujas del reloj y en lugar de eso hizo otra cosa...
©KookTaeBabies
ESTÁS LEYENDO
𝐋𝐨𝐯𝐞 𝐃𝐞𝐛𝐢𝐭 - 윤민
Fanfiction❝ JiMin tenía una deuda y YoonGi se la hizo pagar ❞ Inefable portada y banner confeccionados por © yoonzomi.