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Liar 

Eres como el sonido de las olas del mar 

Eres como un atardecer en la playa que me tranquiliza y me enseña a amar

Eres todo eso que le da calma a mi corazón

Todo aquello en lo que no dejo de pensar.

-Aarón

-Aarón

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Habían pasado días desde lo que sucedió con el profesor silva, pero aun así no lograba quitarme ese sentimiento de que algo malo estaba por pasar y los mayores lo sabían, díganme loca, pero soy muy intuitiva con estas cosas.

Durante todo este tiempo Sam comenzó a pasar más tiempo conmigo, lo que claramente no ayudaba al enamoramiento que le tengo, él simplemente pasaba todo su tiempo libre conmigo e incluso se escabullía en las noches para asegurarse de que pudiera dormir bien.

Suspire alejando todos mis pensamientos y lleve mi vista hacia enfrente donde estaba la señorita Dowling y mi amiga.

—Así que es la pera perfecta, ¿verdad?— Terra comenzó yo solo fruncí el entrecejo -entonces sabes cómo cuando siempre quieres comer una pera, es sólida como una roca, así que esperas, y esperas, y todavía es una piedra. Y luego la tocas un segundo más tarde ya es una papilla podrida

Me dirigí a la fila de atrás, ya que no quedaban más asientos con las chicas, por eso no me gustan los grupos impares. No me preocupé tanto por el ejercicio porque era muy sencillo, mi hermano y yo fuimos educados en casa y aprendimos más de lo necesario para poder usar nuestra magia.

—Tu magia te conecta con los seres vivos. Siente cómo se comunican contigo las señales de la naturaleza.

Terra se acercó a su maceta intentando canalizar su magia, lo cual logró haciendo crecer a una pequeña florecilla.

—Feromonas, vibraciones, puedes dar vida, aunque puede dar demasiado— la maestra miró a la castaña y está solo se encogió de hombros con una mirada apenada

—Es su encanto— la miró con una sonrisa orgullosa y la profesora se voltea a mirarme

—Lo cual percibes porque puedes porque eres un faro de energía

La señorita D se acerca a mí mientras coloco mis manos con delicadeza sobre la pequeña mariposa herida.

—Capaz de dar o quitar— cierro mis ojos y me concentró en cederle mi energía a la pequeña en mis dedos

Para cuando abro mis ojos y manos, la pequeña mariposa está curada, esta se posa en mi dedo antes de salir volando por la ventana.

—Algo simple pero magnífico

Gotta Be YouDonde viven las historias. Descúbrelo ahora