If These Walls Could Talk⋆ˢᵃⁿʷᵒᵒ𝄪

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━Quiero que me den un maldito reporte de la situación, ¡ahora mismo!

La puerta siendo azotada, junto a las duras palabras del líder del escuadrón, dejaron a todos de piedra y alerta. Sobre todo, porque sus ojos se veían completamente vacíos, de color azul hielo.

━Nuestros padres están junto a los reyes en el ala principal, ya están enterados de la situación, así que se quedarán allá custodiando a Sus Altezas.

JongHo se apresuró al lado de su hermano y le presionó el pectoral izquierdo mientras le explicaba, justo encima de su corazón. Los demás en la habitación pudieron ver como el aire se deformaba un poco a su alrededor, como si una ola de calor hubiera salido del cuerpo del Choi menor.

━San, tranquilo ━YunHo se acercó lentamente, pero al ver los ojos aún helados del menor sobre sí, dio un paso hacia atrás. JongHo se movió para cubrirlo, aún sin quitar la mano de su hermano ━SeongHwa ya los está rastreando con ayuda de YeonJun, en cualquier momento tendremos el paradero de los chicos.

Pero podía ser muy tarde para ese momento. Es lo que muchos pensaron y nadie se atrevió a decir. Si habían secuestrado tanto a WooYoung como a TaeHyun y aun no pedían un rescate o parecido... no querían suponer cualquier otro escenario

━No me pueden pedir que esté tranquilo cuando el príncipe WooYoung desapareció ━a pesar de lo dicho, se agarró la cabeza como si doliera, al igual que el hombro del bajito en un intento por estabilizarse ━. Lo siento, pero aún quiero ese jodido informe ahora ━dijo a nadie en particular, sus ojos volvieron al color original.

JongHo le ayudó a sentarse, llamando con la mirada a uno de los guardias, quien trajo a tres chicos encadenados, estos vestían las mismas ropas que los demás guardaespaldas del lugar, excepto que San no recordaba haberlos visto antes.

━Los encontramos deambulando cerca de la entrada, cuando les preguntamos por su identificación y su fever ninguno respondió solo intentaron huir ━explicó JongHo, llegando nuevamente al lado del heredero al trono.

El fever es un poder especial, una habilidad que solo pocas personas conocían. Aquellos que descendían de una rama antigua, La Familia Zero. El nombre se debía a que eran los primeros, y al parecer únicos humanos, en mostrar habilidades excepcionales que para los demás llegan a parecer magia. Pero sólo la realeza conocía su existencia, pues bien, todos los que en sus primeros años de vida dejan entrever algún tipo de poder especial, son llevados junto a su familia para que entrenen y sirvan a los reyes y reinas desde hace generaciones, razón por la que todos en esa habitación estaban tan inquietos, todos eran cercanos al príncipe desde pequeños.

Esta es la realidad que los demás habitantes del país desconocían, un secreto tan bien guardado que muy pocos creen que exista, pasando a ser solo "mitos" o simples rumores que los viejos cuentan a sus nietos.

Cada uno de los guardaespaldas reales era poseedor de uno o varios fever, así como un tatuaje que nace en sus pieles al cumplir la mayoría de edad, con patrones que brillan representando aquellos poderes. Los más comunes solían ser rastreo, fuerza, velocidad, control de aire y agua (algunos de ellos resintiendo que se les compare constantemente con Avatar), y solo pocos afortunados nacían con la capacidad de incluso crear materia a partir de la nada misma.

San y JongHo eran los últimos descendientes directos de la rama principal de la Familia Zero, sus poderes eran el hielo y fuego respectivamente. Solo por el hecho de haber nacido de ambos padres fever, sus habilidades, tanto en combate, como en las "especiales", eran las mejores en todo el país.

Y ambos eran capaces de convocar armas sólidas en forma de sus fever. Lo que más les remordía la consciencia era pensar que, aun pudiendo impedirlo, se llevaron dos príncipes justo bajo sus narices.