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Decir que no le gustaba ese lado protector de Jungkook seria una falacia.

Desde aquel día que su madre visitó la universidad, Taehyung había recibido una ola de chicos que le impedían el paso en los pasillos, lo atosigaban por montones esperando a que sus regalos fueran aceptados.

La tentación estuvo a punto de llevarlo a aceptar un par de obsequios, pero justo cuando estaba por hacerlo un Jungkook salvaje entraba en acción.

Así es, salvaje.

El pequeño chico no tan pequeño se escabullia en medio de toda esa gente solo para tomarlo de la mano, dar una mirada furiosa a todos y salvar a Taehyung.

Taehyung se dejaba hacer, sus manos entrelazadas a las de Jungkook le brindaba una calidez, lo hacía sentir seguro, a pesar que Taehyung era mayor Jungkook es quien se comportaba como el hyung.

Los comportamientos de Jungkook habían desencadenado una ola de rumores, desde que era una especie de guardaespaldas a que estaba en una relación con Taehyung. Lo cual Jungkook nego en múltiples ocasiones, lastimando sin querer a Taehyung, cada vez que decía que su relación era amistad y nada más. La parte razonable de Taehyung entendia que solo eran amigos, su corazón es quien no entendía y le dolía escuchar esa palabra.

Porque quizás esa atracción que sentía hacia Jungkook se estaba transformando en algo más.

—Otro día aguantando a tanta gente a mi alrededor—suspiró rendido, estaba en la entrada de la universidad reuniendo el suficiente valor para tolerar a tanta gente con un montón de cosas que darle.

Cuando reunió el suficiente valor para dar un paso, una mano se enredó con la suya.

Ahí estaba de nuevo Jungkook a su lado.

Con esa bonita sonrisa que lo único que lograba era que deseara dar muchos besitos por toda su carita preciosa.

—Osito, estas listo para otro día aburrido de clases, lleno de gente acosadora por la cual no debes preocuparte porque yo estoy a tu lado— su corazón se regocija con solo ver al menor. Le picó la punta de la nariz y le dijo.

—Si es a tu lado, estoy más que listo.

Así tomados de la mano se dirigieron hacia su grupo de amigos que estaban esperando como siempre, no sin antes evadir a una pequeña legión de estudiantesa lo cual era raro porque siempre eran por montones.

—¿Por qué hay menos estudiantes molestandome?— Fue lo primero que pregunto.

—Diría que te gusta recibir atención—Yoongi dejo de beber su americano, Taehyung tenía razón en cuanto a los estudiantes, esta vez eran menos rodeandolo.

—Mientras no se pasen y me obsequian cosas que Jungkook no me deja aceptar, no veo problema alguno.—Si no fuera por Jungkook tuviera una habitación llena de regalos.

—Escuche que Bogum estará de regreso, sabes que él es el rey de este lugar— el rubio lo había escuchado por los pasillo de la universidad. No es que le gustara el chisme, como dijo solo lo escucho de casualidad.

—¿Park Bogum? ¿El hermano de SeokJoon?—Jimin asintió—Hoseok se había olvidado de la existencia de Bogum, pues al chico sus padres lo habían enviado a estudiar al extranjero.

Taehyung estaba en silencio, Bogum era un gran amigo con quién pasaba mucho tiempo juntos, estuvo a su lado cuando sucedió el problema con las estudiantes de primero. Su tipo de relación era un poco diferente a la que tenía con Jimin, Hoseok y Yoongi.

En la adolescencia se sintió un poco atraído hacia Bogum, no negaba que el chico se había vuelto demasiado atractivo, además sus personalidades eran similares, quizás sus sentimientos hubieran sido declarados en un acto de impulsividad pero aquello no pudo hacerlo, porque Bogum había ido al extranjero a estudiar, nunca supo por qué Bogum lo dejo solo de la noche a la mañana, nunca se despidió, solo dejo de llegar un día a la universidad.

DON'T FORGET ME |TAEKOOK| Donde viven las historias. Descúbrelo ahora