No quiero irme de tu lado (BL)

// Capítulo 10 // Momento incómodo //

-Alex-

Día lunes por la mañana y ya estaba llegando a la escuela, al bajar del coche y entrar al edificio luego de despedirme de mi madre pude ver que Ikuto estaba bajando del coche de su padre también, al parecer habíamos llegado al mismo tiempo, cosa que me alegro, por lo que rápidamente me acerqué a él para entrar juntos.

Antes de que me viese pude notar algo diferente en él, y era que no traía lentes, una idea de que se veía lindo apareció en mi mente junto con un enorme sonrojo y vergüenza, agité la cabeza de lado a lado cuando Ikuto me llamó sacudiendo la mano a lo lejos, yo aún avergonzado me acerqué a él sonriendo.

–Ikuto... hola–lo saludé tratando de ocultar mi nerviosismo, él me saludó igual sonriendo

–llegamos al mismo tiempo por lo que veo–comentó alegre

–si jaja–reí volviéndome a sonrojar al verlo directo a los ojos y nuevamente las mariposas comenzaron a revolotear en mi estomago

–entremos entonces–asentí comenzando a caminar junto a él para entrar

La verdad no presté mucha atención a las clases, no podía evitar distraerme y voltear en otra dirección, aquella donde se encontraba el chico de de cabello lacio y teñido en las puntas que el día de hoy podía apreciar a la perfección sus ojos rasgados y cafés al no llevar puestos sus anteojos.

Aquellos ojos que viéndolos bien me parecían muy lindos, diferentes sobre todo, pues no es común que en México, ni en esta parte del mundo, alguien tenga los ojos rasgados, lo hacían único a mi parecer.

Otra cosa que me llamó la atención eran sus uñas, las llevaba pintadas de negro, seguramente con el esmalte que se había comprado en la plaza, no sabía que le gustara pintárselas, pero se le ve bien, además no tiene nada de malo que un chico se las pinte, aunque muchos lo creen.

El estilo de Ikuto me gustaba, usaba piercings, uñas negras, cabello teñido, ropa negra, una mezcla entre gótico y punk, es un estilo que dudo mucho que se vería bien en mi, pero en él... lo hace ver muy guapo... aunque sin importar lo que lleve se verá guapo para mi, vaya... si que parece que estoy enamorado.

Es que es inevitable... por más que lo intente... no puedo dejar de pensar cosas así con respecto a Ikuto, es vergonzoso, pero en parte me gusta, jamás me había pasado esto con nadie, solo con él, por eso Ikuto es especial, supe que lo era desde que lo vi el día que llegó.

Tal vez deba de aceptar de una vez por todas que si me gusta Ikuto, incluso más que eso, pero si lo hago... ¿qué sigue después? ¿confesárselo? ¿qué pasará después de eso? no creo que yo le guste, y si se lo confesara temo perder su amistad, es muy valioso para mi.

Quizá mi miedo a perderlo hace que siga negando lo que siento, acompañado de mis dudas y el miedo a salir del closet, esto es peor que una sopa de letras, o un rompecabezas, la mía ya está muy rota con este tema, maldito cerebro.

–¡Alex, despierta!–la voz de Ikuto hizo que saliera de mis revueltos pensamientos–el receso ya empezó, salgamos–de tan metido que estaba en ellos ni me había dado cuenta de que la campana ya había sonado

–s-si lo siento...–me disculpé avergonzado mientras acomodaba mis cosas

–vamos–asentí y me levanté de la silla tomando mi lonchera para salir junto con Ikuto, ambos fuimos a sentarnos a unas jardineras para desayunar–¿en que tanto pensabas?

–¿ah? en nada...–negué con la cabeza, obviamente no podía decirle lo que me tenía tan pensativo, era algo muy vergonzoso y además tenía que ver con él