Akkun

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Mi nombre es Akutsu Akuru...

Soy estudiante de secundaría y estoy en mi último año escolar.

Me considero el mejor estudiante de toda la secundaria ya que consigo las mejores calificaciones en todas las clases pero nunca eran perfectas para mí ya que suelo cometer algunos errores a elegir respuestas.

Por suerte, muchas universidades me están ofreciendo becas si llego aceptar ir en algunas de ellas pero no he podido decidir ya que aún no tengo una profesión en mente.

Desde niño fui considerado como el niño pródigo o niño genio ya que mi pasión por estudiar me ha destacado demostrando ser más intelectual que cualquier niño que conociera.

Me siento orgulloso de ello aunque mi madre no lo entendía.

Siempre insistió a que fuera a hacer amigos y a divertirme un poco pero siempre me negaba ya que decía que podía divertirme después de terminar los estudios.

Grave error...

Hace 14 años, mi madre y yo fuimos a conocer a las nuevas vecinas, era una niña y su madre quienes se acababan de mudar a nuestro vecindario. Me forzaron a presentarme y a tratar de hacerme amigo de ella.

Era una niña de cabello marrón claro, con grandes ojos del mismo color y con dos pequeñas coletas que le colgaban de la cabeza.

Al principio parecía ser tímida pero en cuestión de segundos se presentó y empezó a actuar de forma extraña.

Flashback

—Soy Hanabatake Yoshiko y tengo 4 años de edad -Se presentó.

—Acabas de cumplir los 5, Yoshiko. Ya no tienes 4 años. -Dijo la madre.

—¿En serio?. Entonces... ¿Ya no tengo 4 años?.

—No querida.

—¡Genial!. -Exclamó la pequeña con entusiasmo a saber que ya no tenía 4 años.

—(Es rara). -Pensé.

—¿Cómo te llamas? -Preguntó la niña.

—Mi nombre es Atsuku Akuru. -Respondí serio.

—Ay que nombre tan raro y confuso, te llamaré Akkun.

—No me gustan los apodos. -Confesé.

—Akkun será entonces. -Con una sonrisa en el rostro decidida a darme un apodo.

—Yoshiko ¿Te gustaría jugar con tu nuevo amigo?. -Preguntó la madre.

—¡Sí, jugar jugar jugar! -Vociferó la mocosa con total felicidad alzando un puño al aire. —¡Akkun, vayamos a jugar!.

 —¡Akkun, vayamos a jugar!

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Para la tonta que siempre amé - Aho GirlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora