─Se llama el bosque prohibido por una razón, Alena.
La primera vez que Alena habla con aquel niño de ojos tristes fue en el borde del Bosque Prohibido en su primer año.
El Bosque Prohibido. Un lugar lleno de secretos oscuros y peligrosos. Allí, sin...
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FLASHBACK
POV ALENA
Un poco más de una semana después de lo sucedido en el Bosque Prohibido, era el cumpleaños de Alena.
Se despertó encontrándose con un paquete envuelto a los pies de su cama. No esperaba recibir ningún regalo ese año. Lo agarró y lo giró buscando una nota.
Nada.
Lo desenvolvió con cuidado, era una pequeña caja negra junto con un libro.
Primero abrió la caja. Dentro había un hermoso collar de plata con una joya verde en forma de medio corazón.
Alena se puso el color y lo admiró en el espejo, hasta que se dio cuenta de que era la mitad de la piedra preciosa que le había dado a Draco. Ella sonrió. Una sonrisa pequeña pero era algo que no había hecho en un largo tiempo, no desde que aquel día...
Después agarró el libro, abriendo en la primera página. Allí, cuidadosamente estaba escrito:
Feliz cumpleaños, aquí tienes más basura muggle para que disfrutes.
Alena se rió negando con la cabeza. No sabía qué era más extraño, el hecho de que Draco Malfoy le diera un regalo de cumpleaños o que acababa de reírse.
Ese fue el comienzo de su tradición secreta y notas prohibidas. Cada año, en su cumpleaños, Alena le daba un regalo y él también le daba uno a ella. Sin ninguna nota o firma.
Ninguno, especialmente Draco, reconocería al otro fuera de esto, excepto por los ocasionales gritos de Alena cuando se cansaba de la actitud arrogante del chico hacia los demás.
En su segundo año, en el cumpleaños de Alena, Draco le había un brazalete con dos dijes: un libro y una pluma.
Ella tenía una leve sospecha de que el chico había escuchado su conversación con Hermione, en Hogsmeade, cuando estaba mirando con nostalgia aquel brazalete.
Después de eso, cada año, sus obsequios siempre tenían un dije nuevo junto con un libro.
Para su cumpleaños en su tercer año, él le regaló un dije de su flor favorita. Se preguntaba cómo era posible que él lo supiera. Ese año, en Pociones, habían hecho la poción Amortentia.
En algún momento, Draco también comenzó a darle regalos de Navidad y luego le regalaba libros de vez en cuando, los cuales ella leía y después se los regresaba, con frases resaltadas o notas en los márgenes.
