fear to love ---> Chris Evans ONE SHOTS

TRES

Chris miró a Dodger acostado entre ambos, y volvió su mirada hacia ella quien tomaba otro sorbo de coca-cola, se apuró de masticar y al tragar volvió a hablar 

— Es extraño — admitió — te mudaste hace un tiempo y nunca te he visto socializando con los vecinos — agregó y ella relajó su rostro 

— Oh es eso — rió — si te soy sincera sólo hablo con la señora Miller, siempre voy a su casa a tomar té, y bueno ahora contigo. — admitió no creyéndolo tan importante 

— ¿En serio? — rió, no creía que Amanda fuera una persona asocial o introvertida, de hecho aparentaba ser todo lo contrario, y en realidad lo era

— De verdad — afirmó — lo que pasa es que noté que algunas personas de aquí se creen mejor que otros y eso me irrita, entonces prefiero simplemente no convivir con ellos si no es obligatorio. Pero no soy problematica ¿Ok? — advirtió señalándolo divertida con su dedo indice  provocando la breve risilla de actor 

— Pensé que eras la vecina problemática — bromeó y ella abrió la boca haciéndose la ofendida

— Oye claro que no —  pausó luego de una risa. Secó las palmas de sus manos con sus jeans y habló nuevamente —  ¿Quieres comer el postre? — preguntó para cambiar de tema
— ¿Hay postre? Amanda no te hubieras molestado tanto — respondió apenado por sus hospitalidades 

— Para nada, yo había preparado el postre antes de que Dodger entrará ilegalmente a la casa — tranquilizó y se levantó para cortar unos dos trozos de pastel y ambos comenzaron a comerlo

— Sabes cocinar muy bien — Alagó saboreando el pastel de vainilla, ella sonrió

— Gracias, hace tiempo vi clases, y quedé fascinada 

— Yo estoy aprendiendo lentamente — hizo una mueca, él sabía cocinar, no era un experto haciendo platillos, y mucho menos le quedaban tan buenos como a ella, pero si se defendía en el campo de la cocina, lo suficiente como para alimentarse a si mismo. El celular sonó en la mesa y ella lo tomó entre sus manos y hizo una seña hacia Chris diciendo que tenía que contestar

— bonne nuit M. Agreste. — saludó al hombre con una sonrisa —  Oh on peut se retrouver lundi à 10h00 sans aucun problème — sonrió y él hombre le habló sobre unos documentos que estaban en la compañía de Nueva York así que hizo una seña hacia el actor avisándole que saldría un momento, él asintió y vió como se desaparecía por el patio hablando en un idioma que reconoció como francés. Luego de unos minutos ella regresó — Lo siento, era un problema con un cliente — se disculpó con una sonrisa — no puedo descansar ni los sábados — suspiró recostándose en la silla 

— Dímelo a mi — murmuró con gracia y ella sonrió, pero cambió de tema rapidamente, no quería hablar ni pensar en su horario en  ese momento — ¿Cuantos idiomas sabes? — preguntó con curiosidad

— Bueno el español porque es mi idioma nativo; inglés, obviamente, el italiano lo aprendí en un cuando estaba adolescente, y en la universidad, portugués, francés, y alemán — él se impresionó por lo dicho

—Wow, ¿Como no te vuelves loca con tantos idiomas? — preguntó y ella sonrió sin mostrar los dientes, era una pregunta muy común para ella

— si me vuelvo loca, a veces sueño en francés, y pienso en español, habló inglés, y leo en alemán —  bromeó con un poco de verdad en sus palabras — quería aprender Mandarín, pero me rendí apenas vi el abecedario, es muy meticuloso

— Eso es impresionante, eres muy inteligente — ella se sonrojó por lo dicho, era un orgullo ara ella ser reconocida con ello y no con otra cosa superficial 
— Gracias. Siempre es la universidad utilizaba eso en contra de mis hermanos, los insultaba en otro idioma — recordó riendo 

— oh ¿Tienes hermanos? — preguntó acomodándose en la silla, un poco hacia adelante sosteniendo su cabeza con su mano, y su codo apoyado en la mesa 

— Si, tengo cuatro, y soy la mejor junto a mi mellizo... Pero sigo siendo menor por 12 minutos
— ¿Eres la unica mujer? — ella asintió con una mueca y él rió 

— Aunque no era para nada femenina, recuerdo que creamos un juego llamado "el toro" y yo me subía a sus espaldas y los nalgeaba con un palo — ambos soltaron una carcajada, Chris llevó su mano izquierdo a su pectoral derecho riendo sin parar imaginando la situación — Y uno de ellos me decía "Yaaa" y yo "Los toros no hablan cállate" — ambos estallaron en carcajadas  estruendosas que se prolongaron un poco, las risas cesaron y  ella limpió las lágrimas que salían de sus ojos recordando la cara de su hermano 

— ¡Si eres problemática! — la acusó. Cuando se calmaron fue su turno de preguntar 

— ¿Y tu? ¿Tienes hermanos? — preguntó, aunque era fan de Marvel no sabía mucho, por no decir nada de la vida del él 

— Si, tengo tres, dos hermanas y un Hermano, él y yo le ponemos los pelos de punta a mí madre — rió 

— así soy con Israel, mi mellizo. Siempre le estamos jugando bromas a mamá y papá, también a nuestros hermanos y a nosotros mismos — Chris pareció perderse en sus pensamientos por unos segundos, y una gran curiosidad crecía en su interior  

— Oye, lo siento pero debo preguntarte ¿Cual  es tu vengador favorito? — ella alzó una ceja y sin rodeos contestó 

— Ironman .

— ¿No te gusta el capitán América? — preguntó fingiendo estar ofendido, ella negó 

— De hecho me encanta, pero, no te ofendas pero él es... No lo sé, es muy estúpido — él soltó una carcajada — no me cae mal, en realidad lo amo, pero es muy preocupado, y correcto, en cambio tony es contrario a él, más liberal y eso. Pero la balanza se inclina hacia Stark un poco
— Me siento traicionado — fingió indignación

Luego de eso decidieron ir al sofá donde había mas comodidad y siguieron hablando de varios temas familiares, de trabajo, anécdotas y temas variados hasta que se hicieron las 12:00pm

— creo que se nos hizo tarde — comentó y se levantó del sofá — fue un placer hablar y comer contigo, gracias por todo — agradeció 

— No hay de que, es lo menos que podía hacer por ser el papá y este bebé hermoso — acarició a Dodger quien ladró feliz. Ambos caminaron a la salida 

— Nos vemos otro día, si necesitas algo, estaré siempre al frente — indicó

— Lo mismo digo, espero que no seas el típico vecino que pide una taza de azúcar todos los domingos — rieron brevemente

Se despidieron y ella fue la limpiar los platos sucios y a dormir luego de cerrar las puertas y apagar las luces. 

———————
¡Hola! Espero que les haya gustado el capítulo de hoy
Nos leemos pronto
☘️