[Yewook] Ni he Wo ~ A Song of Love ~

Capítulo 6

Invitado por un paisaje completamente luminoso me dirijo hacia un mundo que aún no he visto.

Pretendo ser fuerte y me lastimo; como si mi corazón fuera transparente.

Las gotas de lluvia que comienzan a caer distorsionan el reflejo de la débil imagen que permanece en mis ojos.

Bajo este cielo, sin importar donde me encuentre, debería poder alcanzar ese sentimiento que nunca he visto

Estaba parado frente al espejo, observando su reflejo una vez más. Toda la tarde había intentado encontrar algo adecuado para usar en la fiesta para, después de mucho, optar por un pantalón oscuro y una camisa que hiciera juego con este. Sus cabellos solo los peinó hacia un lado dejando que caigan ligeramente sobre sus ojos.

Suspiró intentando tranquilizarse; la ropa estaba bien pero no su corazón. Este parecía que estallaría de los nervios en cualquier momento por lo cual pegó un ligero brinco cuando oyó que llamaban a la puerta. Dándose una última mirada, bajó a atender.

El mayor había dicho que pasaría por él casi cerca a la medianoche y ahí estaba. Recostado sobre el capó de su auto y fumando, lo esperaba en silencio. Se acercó lentamente hasta él intentando esbozar una sonrisa; sin embargo, el alma se le cayó a los pies cuando reparó en el atuendo de su hyung. Yesung llevaba un chaleco negro encima de una camisa oscura que dejaba ver gran parte de su pecho, unos pantalones negros ajustados, los ojos delineados y el cabello algo despeinado que no hacía más que incrementar su atractivo. Se sintió como un niño vestido para una matiné al lado del mayor.

-Creo que... debería ir a cambiarme –susurró a la vez que agachaba la cabeza.

-¿Por qué? – preguntó el mayor a la vez que se aproximaba

-Es que. . . – pronunció mientras mantenía la vista en la ropa del más alto. Se sentía ridículo y avergonzado frente al otro.

-A mí me gusta cómo te ves – dijo Yesung mientras reducía aún más la distancia entre ambos.

-Pero. . . – balbuceó torpemente. Esa cercanía lo ponía muy nervioso pero el mayor cortó sus palabras cuando lo envolvió en un abrazo, el rostro del otro se encontraba cerca el suyo

-No te importa ir así, ¿verdad? A mí realmente me gusta.

-No. . . – dijo torpemente y Yesung lo miró tiernamente para luego depositar un beso sobre su frente.

-Entonces, vamos a divertirnos. . .

Subió al auto cuando el mayor le abrió la puerta y vio como Yesung arrancaba el vehículo después de unos momentos. El auto era muy bonito y moderno; su color negro encajaba muy bien con la personalidad del más alto y mientras más lo observaba se le hacía muy raro que no lo llevara a la escuela; la mayoría de sus compañeros lo hacían a menos que recién se lo haya comprado.

Distinguía las calles pasar ante sus ojos cuando se percató que iban a una velocidad moderada, tal vez muy despacio. Volvió su rostro para ver a su hyung; este tenía la vista fija en el camino y ambas manos sobre el volante. Sin embargo, esa expresión demasiado seria y la excesiva tensión de sus manos, le hacían saber que algo no andaba bien.

-Yesung hyung. . . – llamó

-Dime – oyó que le respondía a regañadientes, sin siquiera mirarlo

-¿Sucede algo malo?

-No

Esa respuesta cortante le hizo sentirse un poco triste. ¿No había estado algo romántico cuando fue a recogerlo? ¿Entonces? ¿Qué pasaba? Cuando de pronto recordó la historia que Yesung le contara hace ya unas semanas.