capítulo ocho

100 15 0
                                    

Y el tiempo comenzó a pasar, nosotros a crecer y también a cambiar.

Pero éramos los mismos el uno con el otro.

Tu creciste bien, en tus brazos se formaron músculos por el ejercicio, tenías abdominales y piernas muy trabajadas para nuestra edad. Teníamos dieciséis años. Pero seguíamos siendo niños, sin embargo comencé a comprender mis sentimientos por tí.

Y mientras tú te la pasabas entrenando, comiendo, jugando en la consola que mis tíos me regalaron una navidad porque tú aún no tenías una. Yo te acompañaba, y te veía.

Admirar, es el término correcto.

Heather  - J.JKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora