☘World Omegaverse☘Anime☘

❌Toji Fushiguro ❌

❌Alerta de spoilers del manga de jujutsu kaisen❌

Anime/manga: jujutsu kaisen

❌ Secuestro❌

❌ Posiblemente dependencia y síndrome de Estocolmo(? ❌

Toji era sin duda alguien quien no tenía un ritual pero había sido bendecido con un "poder" divino, incluso después de huir, y llevarse a su hijo con el, dejando a su esposa.

Era un alfa fuerte sin duda, conocido y que muchos contrataban para hacer trabajos sucios, no era alguien con dinero después de irse del clan zenin y de haber adoptado el apellido de su esposa.

Que a pesar de estar casado con ella nunca la había marcado, ni había pasado por su cabeza hacerlo, megumi solo fue el resultado de un celo son descontrol.

Cuando te vió, su lobo interior aulló, queriendo marcarte enseguida como te vió.
Pero eras una mocosa. ¿Como diablos se iba a fijar en alguien tan pequeña como tu?

Te vió más seguido por aquel lugar donde el caminaba de noche.

Un día sin más que perder se te acerco, te quedaste en shock, era un alfa atractivo y con una presencia fuerte. Incluso movió tu animal interior que igual aullo al verlo.

Lo ultimo que recordaste es que acerco sus manos a tu boca y te demayaste.

Cuando te despertaste estabas en lo que parecía un sótano, incluso cuando tú sentías miedo tu lobo interior estaba tranquilo se sentía agusto, diciendo "mi alfa está aquí, estoy segura"

No es que te sorprendiera, pero muchas personas no encontraban a su alma gemela, lo que venías siendo del pelinegro, la mayoría se casaba, marcaba con alguien quien quisieran, que no era su alma gemela.

El sonido de la puerta de sorprendió, era un niño pequeño pelinegro, sin dida se parecía a lo que venía siendo tu secuestrador.

-¿Tienes hambre? - parecía de uno 6 o 5 años.

Estabas dispuesta a decir que no, pero tu estómago hablo antes que tu.

- ahí tienes tu respuesta- el niño rio, que te pareció tan tierno.

Saco una manzana de uno de sus bolsos y se acerco para darte, no era mucho pero el niño sin duda se esforzó, ya que se estaba escabullendo de su papá, había seguido el olor dulce que emanabas.

-muchas gracias... ¿Cual es tu nombre? - hablaste.

- megumi, megumi fushiguro- y justo después de decir eso el salio corriendo como un cachorro pequeño.

A los minutos se oyeron otras pisadas, mas pesadas y tus pelos se pusieron de punta, tu lobo aullaba de alegría y excitación, empezabas a acelerarte, aunque tu celo no estaba en estapa de aparecer.

- ¿Megumi estuvo aquí?, No tiene sentido preguntar si su olor esta aquí.-

Te quedaste callada.

- Oye tu, T/N- te sobresaltaste, el no tenía por que saber tu nombre, sin embargo salió de sus labios.

-¿Si?- preguntaste dudosa.

Este solo sonrió y se acerco a ti, para soltar sus feromonas, no era excitante, era asfixiante la cantidad que soltaba.

Empezabas a toser. Este solo te agarro del pelo.

-Eres tan debil- y te tiro al suelo, no era para nada suave, aunque suponiendo su cuerpo no es como que le resultara.

Tu lobo aullaba desesperado, y tu estabas caliente, sus feromonas causaron que se te adelantara el celo, y el estaba reaccionando ante el llamado de tu lobo.

Estaba cayendo en sus instintos mas primitivos.

Te beso con fuerza, aun sin querer reaccionaste al beso y le seguiste.

Te amarro de las manos y de los pies. Luchaste por ello, pero no hubo mucho que hacer.

Sus manos quitaron cada prenda de ropa que tenías, aunque al parecer parecía mas rasgada; beso y mordió cada parte que pudiera de tu cuerpo, tus sollozos en parte era inaudible por los pequeños gemidos, que aunque no quisieras eran de placer por tu lobo.

Te penetro sin delicadeza, tus ojos se abrieron a tope, era tan grande y tu solo encorvaste la espalda, era tu primera vez y sin embargo no era doloroso.

Gemias y le llamabas, alfa, ni siquiera sabías su nombre, pero el echo de que simplemente le dijeras alfa le hacía soltar gruñidos que respondía a tus aullidos de placer.

Llorabas, te satisfacía y aún así sentías un poco de tristeza, no siempre las almas gemelas eran felices y linda como te lo pintaban en cuentos.

Se anudo en tu interior, y ahí si lloraste, dolía demaciado, se inchaba, no estabas acostumbrada y no querías, entonces te mordió y dolía mucho mas ahora, tanto que te desmayaste de dolor.

Para cuando volviste a despertar, estabas en un sillón, tu cuerpo dolía y aunque no quisieras estar ahí algo te impedía irte y era que ahora estabas marcada.

El omega no podía estar lejos del alfa que lo había marcado.

Incluso pasando el tiempo, toji no era ni cerca de ser bondadoso, pero llego un momento en el que si.

Y de ellos te agarraste, estaba mal si. Tu familia te estaba buscado, lo sabías por que apareciste en la tele con un anuncio de "se busca"

Pero tus instintos primitivos dominaron, se hicieron dependiente de aquel que arrebato tu libertad. El vínculo no se podía romper a menos de que uno de los dos muriera.

-Me voy. Tengo un pedido-

Ronroneaste insatisfecha. Cuando esté salía por "trabajo" tu lobo se sentía triste, te restregaste a su pecho y este paso mano por tu pelo.

En algún momento en menos de dos meses habías caído rendida, sabías que en un principio estaba mal, pero después lo dejaste pasar.

Y este a pesar de luego ser brusco te cuidaba mucho, eras SU omega, y tenías un bebé en vientre.

Aparte cuidabas de megumi, aunque este pareciera que no le interesaba lo hacía.

Para cuando se fue, jugaste con megumi, y de repente sentiste un jalón tan duro, alguien estaba jalando el lazo que los unía, no, nadie lo estaba jalando, se estaba rompiendo.

Toji había muerto, tu lobo lloro y aullo demasiado, megumi te cuido y se quedo a tu lado.

Incluso este iba a la escuela, ya no tenías nada que te reteniera, entonces ¿Por que seguías?

- Hey, tu y el niño vendran conmigo, toji, tu padre esta muerto- le hablo al niño, y este primero te volteo a ver.

-Que desconsiderado-

Y este te volteo a ver, una omega tan bonita, tierna.

- ¿es tu madre?- pregunto el peliblanco

- Si-

-Los dos irán conmigo-

Solo miraste triste tu vientre. De verdad te habías enamorado de toji, te detuvo para tenerte para el y ahora el te había abandonado.

Lo siento mi omega, se escuchó el susurro en el aire

Solo lloraste ante la perdida de tu alfa.

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Toji mi varón