Finally! or not?

1.6K 89 21
                                    


Se encontraba de brazos cruzados viendo como su novia se vestía rápidamente, solo sé colocando el bendito polerón junto a unas calzas cortas, y en ningún minuto la vio buscar ropa interior o sostén. Gruño mientras el mismo se colocaba los pantalones junto al boxer, escuchando nuevamente el timbre del demonio.

-Si hubiéramos apagado las luces estoy diez billones por ciento seguro que te tendría saltando sobre mi.

-¡Pervertido! .-le lanzó la almohada mientras se encaminaba a la escalera-. ¡Ya vengo!

Bufó mientras volvía a sentarse sobre la cama, con su pierna moviéndose inquietamente, no tenía idea quién fue el maldito diablo que lo interrumpió de disfrutar los placeres carnales que le provenía su novia, su hermosa novia que en estos minutos seguramente estaba enojada con él por pensarlo pervertido ¿Podían culparlo? ¡No! Se supone que ese fin de semana seria para que ambos se desquiten.

-¡Mozu! ¿Qué haces aquí?

Escuchó la voz de su novia. No. Peor aún, escucho un nombre que odiaba saliendo de la boca de su novia, oh la maldita rata que los interrumpió no era otro que el tipo mujeriego que planeaba quitarle a su leona ¿Qué diablos hacía allí? ¡¿Y a esa hora de la noche?! Ah no, esta vez iría a dejar en claro que la rubia era suya y solo suya, con ese pensamiento en mente abracho de forma floja sus pantalones y colocaba su camisa desabrochada, sabía que Kohaku estaba con el cabello todo desordenado, la mayor prueba era que él aún conservaba en su muñeca aquel moño que ataba su coleta característica.


-¡¿Qué se supone que haces aquí?! .-kohaku alzó ambas cejas sorprendida de ver a su compañero del club de artes marciales enfrente suyo, de su casa. Eran vecinos pero aún así.

-Buenas noches hermosa Kohaku-chan .-le guiño el ojo mientras se recargaba en el marco de la puerta-. Me enteré que estarías sola este fin de semana y creí que sería buena idea que tuvieras mi compañía, ya sabes para no sentirte sola .-sonrío arrogante mientras se acercaba peligrosamente a la cara de la rubia.

-¿Cómo te enteraste de eso? .-frunció el ceño a sabiendas que el tipo era un maldito acosador cuando se trataba de chicas.

-Oh ya sabes, las vecinas hablan .-río mientras la observaba de arriba a abajo y alzo la ceja al notar que se encontraba con el cabello suelto-. Sabes, te ves sumamente preciosa con el cabello suelto .-acercó la mano para tratar de tomar un mechón del cabello de la rubia pero su mano nunca llegó a su destino gracias al flacucho que tomó a la chica por los hombros para apegarla a él.

-Sisisi, gracias por preocuparte por MI novia Mozu pero como vez no está sola .-bajo el brazo para abrazar a Kohaku por la cintura quien soltó un chillido de asombro, mientras él veía con recelo al castaño enfrente-. De hecho estábamos bastante ocupados, así que si solo tenías preocupación por MI Leona, ya comprobaste que no estará sola este fin de semana así que ya puedes irte .-gruñó pegando más a la chica contra él.

-Oh, Senku .-se quedó viendo al albino de puntas verdes de arriba a abajo, notando como su camisa estaba abierta y parecía que se había puesto los pantalones de forma rápida, luego volvió a dirigir su vista a la chica, dándose cuenta que el conocía el polerón que era del flacucho frente a él, además que su cabello suelto se notaba claramente desordenado, pero aún así sonrío con suficiencia-. Creo que Kohaku-chan la pasaría mejor con mi compañía, ya sabes tenemos más cosas en común, además de que puedo enseñarle otras tantas. 

Ok, le estaba haciendo hervir la sangre, si tan solo tuviera un poco de ácido sulfúrico aquí podría lanzarle directamente a la cara, gruñó tratando de no caer en la provocación pero se dio cuenta que su novia era la que no soporto las palabras que salieron de la boca de la rata esa.

IrritadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora