Aquí comienza nuestra historía, donde en un reíno muy lejanó, se encontreba un campo desierto, en ese mismo campo, encontramos a nuestro protagonista.
Un niño que trabajaba actualmente en un pequeño puesto en medio de la nada. Esté usaba su extraño talento para favorecer a sus clientes, ofreciendo la muerte a cualquiera que lo deseará.
Era un día tranquilo, el clima no podía ser más perfecto y el silencío inundaba los pastizales.
En el pequeño puesto se encontraba Acacia, sentado sobre una vieja silla con una pata estropeada, esté mismo pareciera que se caería en cualquier momento.
El aburrimiento llenaba la cabeza de nuestro individuo, llavandolo a las nubes de ida y vuelta.
al volver a la tierra se pegó un gran susto al encontrar a alguién frente a él.-¿Que diablos estás haciendo ahí dormido?- repetía la contraría.
Cuando Acacia recobró la conciencia se dío cuenta que era la señora de la cabaña de enfrente, jamás pudo recordar su nombre completamente pero aparentemente erán vecinos cercanos.
-Buenos días señora, estoy trabajando a está hora- decía Acaria incorporandose.
-¡¿Nada de juegos, sabé lo que hiso su gato anoche!?
Hubo una reacción de miedo de parte de Acacia, la señora había dado un golpe con su puño a la repisa del pequeño puesto.
-¡Ensucio todas mis sabanas blancas con pelos, ahora son totalmente negras!- grito enfurecida, también escupiendole en la cara a Acacia
Al escuchar el escandalo de la señora, el individuo limpiandose la cara con la manga de su brazo, sonrié algo forzado debido a los nervios de no saber que hacer o decír.
-Bueno, es un gato, realmente no tiene dueño así que no debería regañarme a mi- insinuo Acacia lavantando los hombros en señal de su confución.
La mujer al escucharlo, cambía su expreción de enojo a una de indignación, dandose la vuelta refunfuñando y marchandoce sin decir ninguná otra palabra.
-¿Otra vez Garmy? Está es la septima- decía rascandose la nuca
-Esa bruja jamás me cayo bien- de las sombras que ofrecía el techo del puesto aparecío un gato negro de ojos azules, de esté mismo chorreaba un liquido oscuro y espeso
-Deberían comersela toda su familia de cerdos escandalosos- diciendo estó, el gato se apoyo sobre el hombro de Acacia, descansando su cuerpo humedo.
-Garmy, estoy cansado de esté trabajo- decía bostezando
El gato al escuchar estás palabras, armó una sonrisa en su rostro de punta a punta mostrando sus filosos dientes.
-Está bien querido, entonces renuncía y volvamos a casa- insistío el felino
-No, no volveré ahí..- al terminar de hablar, comenzo a pensar donde podría instalarse por un tiempo ya que solo tenía su puesto de madera y clavos.
-Entonces, vete al diablo- indignado, desaparece del hombro del muchacho
-¡Ya se, iremós al Reino! Está tan cerca, jamás eh ído- insinuo el indibiduo con una gran sonrisa plantada en la cara
Después de insistirle al felino y terminando aceptando la propuesta, Acacia empaco sus cosas y se dirigío camino al Reino en busca de un hogar.
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𝐇𝐨𝐫𝐧𝐬
AdventureAcacia es un chico huerfano quién fue convocado por los espiritus para combertirse en la nueva parca. Todo esto comienza en la edad media, en donde reinaban reyes y encerraban princesas, aquí es donde nuestro protagonista llamado Acaria, apodado Shi...