Capítulo 7-

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- ¿Crees que podamos hablar?

- Si claro- el miedo me invadió

- Pero no aquí, ¿puedes ir a mi casa?

- ¿Hoy? No puedo. ¿Qué te parece el miércoles?

- De acuerdo- me dio un beso en la frente y se fue

¿Me debería preocupar? James es tan extraño que no que esperar, aunque me debo andar con cuidado pues según esto ya hay rumores de que él está engañando a Melanie conmigo y no quiero crearme una fama así, no estoy segura si ese rumor es verdad pero prefiero andarme con cuidado. Me dirijo al gimnasio para ver los últimos detalles del baile; se adelantó la fecha pues la escuela va a ser sede de los torneos lo que resta del año, fue un trabajo arduo y estresante, pero cuento con un comité colaborativo y accesible y pudimos sacer todo esto adelante.

Empiezo a ver todo en la lista y ya está cubierto la mayoría de las cosas, solo tenemos que empezar a pensar en un plan B, lo cual significa que tenemos que tener un respaldo por si algo llega a fallar ese mismo día del baile. Después de varias horas de arreglar hasta el más mínimo detalle podemos descansar y ahí es donde pienso que es la primera y última vez que postulo para el comité, lo hice por ser mi primer año y querer tomar mis créditos extra desde ahorita, pero no puedo continuar con algo que verdaderamente me estresa y me quita el tiempo de hacer algo más de provecho, no se hacer ejercicio, incluso poder tomar ese taller de artes que tanto he deseado.

- ¿Cansada?

- Hey... ¿Cómo estás? Desde la competencia que no te veo

- Ya sé, me tuve que poner al corriente con unas materias

- ¿Qué te trae por el gimnasio? Tú deberías estar en el agua

- Por más que gustaría, no se puede. Lo de hoy es el básquetbol y el soccer

- Entiendo...

- ¿Vamos a comer? Esto del baile te deja destrozada ¿verdad?

- ¿Tanto se me nota?

- Deberías tomarte tu tiempo para relajarte, si te hubieras visto ese día de la fiesta, tan contenta y bailadora, parece que veo a dos Sasha's diferentes. Lo que me lleva a mi siguiente pregunta ¿Ya tienes con quien ir al baile?

- No. Yo solo organizo, no voy a los bailes.

- ¿Y eso? ¿No te suena ilógico?

- No, para nada ¿Por qué a ti si te suena de esa manera?

- Haces todo pero a la vez nada. Deberías tener una lista larga de invitaciones

- Jajajajajajajajajajajajaja.

- ¿Qué fue tan gracioso?- alzó una ceja

- Yo no soy esa chica a la que los chicos invitan a un baile... y antes de que digas algo más, también he intentado yo invitarlos, pero igual me rechazan- alcé los hombros

- ¿A qué te refieres de no ser esa chica?

- ¿Te parece si platicamos esto en otro lugar?

¡Oh no! Ahí va un viaje al pasado. Sentados en el restaurante empezamos a comer y platicar, más que nada sobre ese tema que trato de evitar a toda costa, para resumir le conté a Kendall la humillación (o más bien las humillaciones) que sufrí en la secundaria, donde todos los chicos me despreciaron por ser la nerd, por no ser tan rubia, blanca y hermosa como las demás chicas. Podría seguir hablando de esto, pero me afecta tanto que hice todo lo posible por no llorar, pero fracasé, solo dejé un billete en la mesa y me fui corriendo de ahí.

Almost is never enoughWhere stories live. Discover now