Pizza (Jenlisa G!P)

Capítulo 17: Lia tiene un recital de balet

—¡¡UYYYY TUUTUIIIII!! ¡¡PAGALE CUARTO!! _gritó una voz conocida logrando que Jennie y yo nos separáramos del beso.

Y la culpable de aquello era nada más y nada menos que Sunhee. ¡¿Esa mujer estaba en todos lados o qué?!

—Sumie... _dije recuperando el aliento.—¿Qué haces aquí?

—La verdadera pregunta es: ¿Qué hacen ustedes aquí? _se cruzó de brazos viniendo hasta nosotras con una sonrisa pícara.

—Sabes perfectamente lo que estaba pasando Sunhee. _contesté con una risa abrazando a Jennie que estaba más roja que un tomate.

—Claro que lo sé, solo quiero que ustedes me lo confirmen.

—Nos estábamos besando, Sumie. _sorprendentemente fue Jennie la que contestó.

—¿Quieren las llaves del baño o...?

—¡Sunhee! _le regañé y ella solo empezó a reír.

—Ya tranquila, Manoban. ¿Sabes dónde están Rosie y Jisoo? _cambió de tema pero aún seguía sonriendo pícaramente.

—Nos están esperando en el Lamborghini. _contesté entrelazando la mano de Jennie con la mía.

Salimos del gimnasio y Sumie a mi lado no paraba de hacer señas obscenas sin que Jennie se diera cuenta.

—Somi me está esperando en el parque para ir a la peluquería, Lisa. _dijo Jennie separándose de mi con una sonrisa.

—De acuerdo, ve con ella. _dije seguramente con una mirada de idiota.

—Mañana Lia tiene una presentación de Balet en su colegio, te espero a ti y a todos allí ¿de acuerdo?

—De acuerdo.

Jennie se despidió de mí con otro beso y nos dio la espalda a Sumie y a mi quienes miramos un mismo lugar.

—Tiene un GRAN... _paró lo que iba a decir gracias a mi mirada.—Un gran cabello. Pero no te enojes.

Sumie me abrazó por los hombros y fuimos hasta mi Lamborghini, mientras ella le coqueteaba a la secretaria que iba hasta su auto yo logré ver como Jisoo y Rosé se comían la boca.

—¡SUNHEE, EL SEÑOR PELÓN LE ESTÁ COQUETEANDO A LA SECRETARIA! _grité señalando hacia el otro lado del edificio.

—¡¿QUÉ?! _gritó corriendo hacía donde señalé.

Si corría hasta ellas Sumie ya habría vuelto y las descubriría, así que mejor les lancé mi bota derecha que le dió a Jisoo en una pierna y con eso al fin se separaron. Les hice un montón de señas sobre que Sumie estaba por allí y las descubriría, pero no entendieron hasta que volvió a aparecer algo confundida. Rosé empujó a Jisoo contra la puerta y eso logró que se diera un gran porrazo en la cabeza.

—Los besos con Jennie te afectaron el cerebro, la secretaria no está por ningún lado. _dijo Sumie algo molesta conmigo.

—Creo que tienes razón. _me encogí de hombros con inocencia.

—Vamos con mi hija y Jisoo. _volvió a abrazarme por los hombros y caminamos hasta las chicas.

—¿Un camión te pasó por encima o qué Kim? _se burló Sumie al ver como a Jisoo le salía sangre de la sien. Rosé intentaba ayudarla.

—No es gracioso mamá. En serio se lastimó. _dijo Rosie con preocupación.

—Descuida cariño. Después de tomar un trago se le quitará. _Sumie le ayudó a quitar la sangre y nos indicó a donde debíamos ir.