No más de ti.

cap. 7

Nijimi.

A penas logramos concretar el ritual, nos transportamos a un lugar que parecía a primera vista desolado... Tome la mano de Sarina y comenzamos a caminar las 3, daba algo de miedo, era oscuro y de tonalidades rojas...

Caminando llegamos hasta un castillo, era extraño en su forma, pero se veía que adentro había vida... No sabíamos con que nos encontraríamos, pero de todas formas ingresamos.

Los guardias de seguridad eran unas criaturas translúcidas... Algo deformes y asquerosas, nos permitieron de inmediato el ingreso diciendo "ella las espera".

Al menos yo, supe de inmediato quien era "ella".

Recorrimos infinidad de pasillos tapizados en alfombras rojo vivo y paredes morado uva con detalles de piedras, algunas grietas y antorchas colgadas en ellas.

Al escuchar música viniendo de un salón, corrimos hasta aquel y abrimos la puerta quedando sorprendidas con lo que había detrás de ella.

Asagiri.

Yatsumura quizá me había logrado salvar de un pésimo final... ¿Podría perdonarla?

Aún así, por más que le hablaba y le intentaba decir de mi punto de vista de la situación, ella solo se negaba a aceptarlo y me cambiaba el tema.

Habían otras veces en que se distraía con lo más mínimo y perdíamos el hilo de la conversación, así no podía tratar con ella.

Al menos en este rato, me había podido explicar, que para el mundo de los humanos 1 hora aquí era una semana... No entendía la razón, pero era muy extraño.

Y- ve a vestirte, hay una fiesta debido a que encontré a mi acompañante.

A- tu acompañante...? Quien es?

Y- tengo dos opciones, tú, que eres la primera... O mikari.

A- Quien?.

Pregunté seria, no podía creer que se hubiera buscado a otra y que incluso me pensara como una opción más, si me quiere yo debería de ser la única.

Además por qué Mikari..? Es una mimada.

Y- Mikari. Ahora ve a vestirte.

Preferí no decir nada y solo irme a vestir, al salir del baño, dos chicas me esperaban fuera, Yatsumura... Y Mikari, quien se veía extrañamente feliz...

Yatsumura nos tomo las manos a ambas, más yo me solté, estaba dolida y ofendida.

Llegamos a la fiesta, habían muchos seres extraños y asquerosos, aunque humanos también habían... Lo que me alegraba.

Me alejé de ambas chicas, si ella iba a tener que elegir, no quería que fuera a mí, porque de por sí no tendría que elegir si en verdad me amara.

Justamente ví el karaoke y me subí al escenario, me parecía una buena idea cantarle mis sentimientos y tenía la canción perfecta para poder hacerlo...

Una vez la música comenzó a sonar, cerré mis ojos dejándome llevar por el sonido y la letra, mis sentimientos salían a flor de piel...

Yatsumura seguía en mi corazón y no podría olvidarla con facilidad, lo que me alegraba era que la melodía no era para nada triste, por lo que... Bueno quizá algunas lagrimitas traicioneras escaparon, pero no me puse a llorar en medio de la fiesta.