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—Leah, tú seguramente sabes lo que nos va a decir Sirius. No seas cruel y habla ya, la intriga me mata —dijo James zarandeando a su hermana.
—No tengo idea, James —dijo Leah.
—Apuesto a que es una idiotez, cariño —comentó Lily sin despegar la mirada de su libro —; Black nunca dice nada coherente.
—Tienes razón, pero... —concordó James antes de ser interrumpido por su hermana.
—No es ninguna idiotez. Es algo importante en su vida, por favor, no lo arruines.
—Si, Lily, no seas tan cruel. Sirius nunca te ha hecho nada —dijo Marlene metiéndose a la conversación.
—Como sea, dudo que lo que Black nos quiera decir sea de mi importancia —dijo mojando levemente su dedo con la lengua y pasando de página.
Cuenta hasta diez, cuenta hasta diez...
—Evans, cariño, el mundo no gira alrededor tuyo —Leah le sonrió falsamente a punto de perder la paciencia.
Lily abrió su boca para decir andá a saber qué, pero antes de eso James habló.
Lo último que quería era que sus pelirrojas favoritas se pelearan por un tema que no iba al caso, mucho menos a minutos de que su mejor amigo diera ese tal anuncio.
—¿Entonces sabes de qué se trata? —James retomó el comienzo de la charla.
—Si, pero no te diré —dijo Leah.
—Miren, ahí viene Sirius —dijo Marlene.
La pelirroja giró su cabeza.
Evidentemente Sirius estaba ingresando al Gran Comedor, así que Leah se levantó de su asiento y se dirigió hacia él.
—¿Estás listo? —le preguntó.
—Un poco nervioso, pero sí —dijo el toqueteándose las manos con evidente ansiedad. *
—Ve ahora, antes de que te arrepientas —le dijo Leah dándole un beso en la mejilla —. Yo estaré por allí, junto a McKinnon, Evans y James. Suerte.
La pelirroja dió media vuelta y volvió a su asiento.
—Su atención, por favor —dijo Sirius subiéndose a la mesa de Gryffindor, llamando la atención de casi todos —. Gracias... Ahora que me escuchan, hay algo que quiero decir.
Antes de anunciar el secreto, las miradas de Sirius y Leah se cruzaron, a lo que ella aprovechó a dedicarle una sonrisa para que se sienta un poco más seguro.
—Quería anunciarles algo que tengo guardado hace mucho tiempo, y que quizás no les importe un carajo, pero qué más da, la vida es una y quería dejárselo claro a todos —dijo antes de que quizás se arrepintiera —. Soy bisexual. Eso era, me gustan los chicos, quizás más que las mujeres.
Se formó un incómodo silencio en todo el comedor, pero al menos no comenzaron a criticar o algo así, como Leah temía.
—No sabía que eras marica, quién lo diría. Y nosotros cambiándonos de ropa frente a ti, qué puto asco —dijo un tipo que Leah no conocía, pero que si sabía que iba a su mismo año.
Si, quizás había hablado demasiado temprano acerca de que no habían criticado.
Por lo menos habían sido comentarios aislados, no más de cinco.
—¡Y un carajo! —Leah se asustó al oír un golpe a su lado.
Era Marlene, y tenía una sonrisa en el rostro.
—Ya que estamos hablando de gays, me gustaría dejar claro que a mi también me gustan las mujeres —anunció ella.
¿Qué?
De todas las mujeres de Hogwarts, Leah jamás hubiese imaginado que Marlene fuera lesbiana.
—¡Marlene! —exclamó Lily como si su amiga hubiese dicho algo que le asustaba.
—Nunca lo dije por miedo a mi familia, pero ellos ya no están en este mundo, ¿Verdad? —Marlene no iba a negar que no sonaba cruel y un poco triste, pero era verdad.
—Admiro tu valentía, Marlene —dijo Leah también levantándose y dándole un abrazo.
Podía ser que no eran amigas, pero seguramente lo necesitaba en ese momento.
—Gracias, Leah.
—¡Hey, McKinnon! —le gritó alguien desde la mesa de Slytherin — ¿No te gustaría tener sexo con mi novia? ¡Cumplirías mi fantasía!
Que. Puto. Asco. Le. Daban. Algunos. Hombres.
—¡Ella es lesbiana, y eso no te da derecho a pedirle que cumpla tus jodidos fetiches, Nott! —la defendió Leah.
Lamentablemente no fue el único comentario sexual o discriminativo. No tuvo que pensarlo dos veces para agarrar la mano de la rubia y sacarla del Gran Comedor, hasta llegar a un lugar en el que no hubiera nadie cerca.
—¿Sabes qué, Marlene? —dijo Leah —. A mí también me gustan las mujeres.
* Por las dudas, me gustaría aclarar que diciendo ansiedad me refiero al sentimiento, no al transtorno en si. Pero en caso de que crean que está mal, háganmelo saber.
** Si encuentran agujeros en la trama, pido perdón. No recuerdo mucho lo que escribí (fue hace más de 6 meses la última actualización, lo siento) y tengo miedo de encontrarme con mucho cringe.
