La Vie En Rose

Capitulo cuatro

Camila
Un par de voces se escuchaban alteradas provenientes de una habitación, estaba pasando por el pasillo para ir al gimnasio del hotel cuando me detuve a escuchar.
-Lauren piensa bien las cosas.
-Lucy me iré contigo o sin ti.
-Dinah no te lo dijo por obvias razones.

La puerta que estaba entreabierta se abrió por completo cuando Lauren empujó para salir, quedó asombrada al verme del otro lado escuchando a hurtadillas, el asombro solo duró segundos, pasó a mi lado sin decir una sola palabra.

Lucy salió detrás de ella con las manos en su cintura, nos quedamos viendo como Lauren desaparecía por el pasillo.
-¿Estará bien?
Negó con la cabeza.

-¿Puedo sentarme?-pregunte con la voz algo ronca por el frío.
Los ojos verdes me miraron unos segundos, estaban algo rojos de tanto llorar, y en cualquier momento me temía prometerme que aquello que la agobiara no volviera a ocurrir, para no perder ese brillo en sus ojos.
Asíntio con la cabeza.
Tome asiento junto a ella en la nieve, con mi trasero congelándose. Pero eso no me importaba.
-Se que ocurrió, pero no el "¿Por qué?". Y no quiero que pienses que soy una chismosa, porque no quiero saberlo...Por ahora.-Apreté más la bufanda en mi cuello.-Mira Lauren, no nos conocemos bien. Pero quiero la felicidad de Dinah.
-¿Ella te mando?
Su voz sonó incluso más ronca que la mía. De seguro en la pelea, hubieron gritos, cosa que no me contó la rubia.
-No.
Bajo la mirada hacia la nieve. Pareciendole más interesante que mi compañía. Con su dedo enguantado, hizo garabatos en la nieve.
Suspiré, me iba a dar por vencida e irme. Pero la voz de ella, me detuvo.
-Vendran mis padres a la boda.-Relamio sus labios nerviosa, intenté con todas las fuerzas no mirar ese acto. Pero falle.-Digamos que...Mi relación con ellos, es una fino hilo.
Vendrán a la boda. Y Dinah no me dijo nada.
-Tenía miedo Lauren.-puse mi mano sobre su hombro.-Ella te necesita, nos necesita. Pero no como la fotógrafa, sino como su amiga.
-¿Y quién estará para mi? Cuando yo necesite de alguien.-rio con cinismo.-Dinah estará tan ocupada en su boda, que no querré amargarle su boda, porque yo me desmoronó.
-Esta tu amiga.-Nego levemente con la cabeza.
-Tiene que regresar dentro de una semana, su novia la espera, al igual que el estudio de fotografía.
-Entonces, estoy yo.-le sonreí.
Sus ojos Esmeraldas me miraron con demasiada intensidad.
Es como si estuviera viendo el sol de cerca y me estuviera quemando.
-¿Y Allyson?
-Estará tan ocupada con el primo de Robert que llegara.-Reí.-Le gusta desde hace dos años.
Me puse de pie, extendiendo mi mano hacia la morena. Tomo mi mano para ayudarse a Levantarse.
-¿Que te parece si nos cambiamos de pantalón y vamos a la cafetería?
Fingió estar pensándolo. Ladeó su rostro y me sonrió.
-¿Sabes algo Cami?
-No leo mentes aún Jauregui.
-Me agradas

Espere a Lauren fuera de su habitación. Pero no estaba sola.
Dinah estaba conmigo. Llorando, con la mirada en sus pies.
Cuando la morena salió, se quedó en shock por un momento, le sonreí asegurándole que estaba bien.
Relajo su cuerpo al instante.

Lauren.

Camila esperaba afuera de mi habitación, mientras me cambiaba los jeans. Era demasiado extraño que una chica demasiado guapa no me acompañará adentro, y prefería estar afuera.
Cuando salí y ví que no encontraba sola. Mis defensas se activaron.
Mire a Camila buscando sus ojos, pero de pronto me ví atrapada en su sonrisa. Haciendo que mi cuerpo se tranquilizara.
Entonces comprendí, lo que yo hacía con las modelos. Lo que les causaba con mi encantó.
Eso me estaba provocando Camila.
Pero a diferencia de lo que le provocaba a las modelos, algo carnal, sexual... ella me transmitía otra cosa.
Paz. Pura paz.
-DJ, Lo siento.-murmure.
Dinah soltó berridos, no llanto, berridos. Era tan fuerte y horrible que lastimaba nuestros tímpanos.
Pero era mi amiga que se sentía demasiado mal.
Se lanzó a mis brazos, apretandome en su pecho mientras seguía llorando.
-Yo...Yo también Lau.

Veía desde mi lugar a la castaña con el iPad que mayormente usaba Ally.
De vez en cuando subía la mirada hacia el pilar que tenía a un lado y de nuevo la regresaba a la pantalla.
Sonreí, de seguro estaba viendo cómo decorar aquello.
-Lau, ayúdame.-me llamo Lucy.
Aparte la vista de aquella castaña.
Mire las flores que no hacían una buena combinación con el fondo del hotel.
-Deberiamos cambiarlas de sitio.
Ayude a Lucy a mover del sitio aquellos lujosos jarrones. Poniéndolos a cada costado de la entrada.
Mire hacia el lugar donde minutos antes estaba Camila.
El lugar estaba vacío.

-Mañana tendré mi primera prueba de vestido desde que me lo ajustaron.-Dinah se lanzó hacia el sofá vacío de la cafetería. Por suerte había asentado primero su café en la mesita.
-No soy buena viendo ropa DJ.-me lleve la mano hacia la cabeza, rascándome.-Sabes que soy buena en quitarla.
-Lauren.-me dió un golpe en el hombro al momento que comenzó a reír con demasiada fuerza.
Una señora que estaba a nuestro lado, nos miro con el ceño fruncido y los labios en una fina línea. Cerro el libro de golpe, pude ver la portada; La dama de las camelias.
Sonreí juguetona. Dinah miro hacia donde yo lo hacía.
-Ella muere al final.-le dije.
La señora se levantó de golpe, y se fue refunfuñando de la cafetería.
Dinah siguió riéndose por un largo rato.
-De acuerdo te acompañaré a la prueba de vestido.
-Te agradará Normani.