Capítulo 1

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Resoplé cansada de estar aquí, en esta estúpida reunión con los demás Alphas.

-¡Es como dije! ¡Los cazadores son una amenaza! ¡Hay que matarlos a todos!- Grita uno.

Es el más viejo y más idiota de todos.

-Siguen siendo humanos... no quiero lastimar a un humano... - Dice una Alpha.

Ella era la más buena de todos pero es muy ingenua.

-¡Van a matar a toda tu manada!- Dice otro.

-Pero... pero... -

-¿Tú que opinas?- Me pregunta una Alpha.

Todos los Alphas, que son nueve sin contarme a mi, posan su mirada en mi.

-Ella es muy joven aún. No creo que sepa mucho- Dice uno de los más viejos.

Fruncí el ceño.

-Pobrecita... sus padres tuvieron que dejarle todo el trabajo a ella... - Murmura otra.

Cerré los ojos y me levanté.

-Tienen razón. Soy muy joven, la Alpha más joven entre todas las manadas- Dije y comencé a caminar alrededor de la mesa hasta llegar al que empezó -Pero no deben olvidar que yo fui la que convirtió a mi manada en la más fuerte de todas en tan solo tres años-

Agarré los costados del respaldo de su silla y él no quiso mirarme.

-Yo sola soy más fuerte que algunos dr ustedes... sacos de huesos-

-¡Oye, ten más respeto!- Dice el de a lado.

-¿Respeto?- Murmuré -¿Del mismo que ustedes tienen conmigo?-

Él se queda callado.

-Si... mis padres murieron cuando solo tenía nueve años y tuve que hacerme cargo de mi manada que era la más pequeña y débil del mundo entero... pero eso ustedes ya lo saben... -

Regresé a mi lugar.

-Así que mis decisiones fueron las que nos sacó al frente a mi manada y a mi. Por eso no pueden decir que solo por ser muy joven... no sepa tomar decisiones- Dije al fin -Es todo. No van a matar a los cazadores y no porque sean humanos- Dije esto mirando a la Alpha buena -Sino porque son demasiados y sería suicida pelear contra ellos. Recordemos que tienen armas capaces de hacernos un daño físico muy grave y yo no quiero mandar a matar a mi manada-

Ellos bajan la cabeza entrando en razón.

Nos quedamos en silencio hasta que tocan la puerta.

-Señorita Izaro... el nuevo llegó para su entrevista-

Asentí hacia Samay, mi secretaria.

Humana.

-Gracias Samay, ahora voy- Dije enderezándome.

Ella sale y yo miré a los Alphas.

-Si tu quieres matar a tu manada, hazlo. Pero no cuentas con mi ayuda- Dije -Es todo. Debo irme-

Agarré mi chaqueta de la silla y salí del lugar.

Brais, mi Beta se acerca con un café en manos. En realidad era el Beta de mi padre y yo lo consideraba un tío para mi.

-Uf, actuaste bien- Dice.

El Delta, Enzo, se coloca a mi otro lado y me da una carpeta.

-Tiene razón, lo llevaste muy bien-

Gruñí.

-Odio que hables de mis padres y más que sean tan superficiales- Murmuré y le di un sorbo a mi café.

SOY TU ALPHADonde viven las historias. Descúbrelo ahora