-Hm, bueno... eso fue todo- Dije levantándome de mi asiento y estirándome -¿Nos vamos?-
Joel asiente.
-Si, vamos- Dice guardando sus cosas.
Ambos salimos de mi oficina.
-Adiós Zoe, nos vemos el lunes-
-Adiós Señorita-
Bajamos hasta el último piso y luego fuimos a mi auto.
-¿Quieres comer algo? A mi se me antojó una pizza- Dije.
-Suena bien, pero ¿Podemos ir a uno cerca que nunca he probado?- Dice.
Sonreí y lo tomé por las mejillas para luego rozar nuestras narices.
-Claro que si- Dije y lo besé en los labios para luego acomodarnos de nuevo en nuestros asientos y arranqué el auto.
Joel se había sonrojado y eso me encantaba.
Él me indica dónde es el lugar donde quiere ir y al llegar, estacione el auto y nos bajamos.
Entramos al lugar donde nos atendieron enseguida y pedimos los sabores de la pizza.
No tardaron mucho en traerla y nosotros en comerla.
-Oye, aún es temprano así que... después de comer vayamos a hacer algo- Dije.
-¿Cómo qué?- Pregunta.
Me encogí de hombros.
-Ir a algún lugar, no lo sé- Dije.
-Está bien- Dice sonriendo.
Correspondí a sus sonrisa y nos dispusimos a terminar de comer mientras hablábamos y reíamos juntos.
-Listo, vamos- Dije luego de pagar y nos levantamos para luego salir.
Subimos al auto de nuevo y arranqué.
Paseamos por la ciudad buscando que podíamos hacer pero él me detiene.
-Allí, podemos ir allí- Dice apuntando al frente.
-¿Un... Ar..cade?- Murmuré viendo un letrero -¿Qué hay allí?-
-Juegos, siempre iba de niño y... me gustaría que tú experimentaras eso-
Le sonreí agradecida.
Estacionados y fuimos adentro, él compró unas fichas y fuimos a un juego que me había llamado la atención.
Era uno de lucha.
Las primeras veces, Joel me ganó... hm.
-De nuevo- Dije gruñendo.
-¿Segura? Ya vamos cinco parti... -
-Joel, de nuevo- Dije.
Él asiente.
Volvimos a jugar pero perdí de nuevo y volví a gruñir.
ESTÁS LEYENDO
SOY TU ALPHA
Hombres LoboDesde que sus padres murieron Izaro tuvo que madurar de una forma que ningún Lican ni humano había madurado antes... Lo cual la estresaba y cansaba, hasta que llegó él y se lo facilitó. Pero no del todo ya que con su llegada se complicaron varias co...