Aún estoy a la espera de tus caricias, aún te espero paciente a que vuelvas y me digas que todo pasó, sigo esperando a que vuelvas y me digas que me amas..
Y aunque nunca tuve tus caricias, las sigo esperando, sigo esperando estar en soledad contigo, porqué aunque tu lo hicieras, yo si lo hice, si te amé, te amo y te amaré... ✨
Cualquier cambio para bien o para mal siempre termina beneficiando a la persona que cambia, algunos lo hacen para proteger sus sentimientos, otros para mostrarlos y otros simplemente para ver la vida desde otra perspectiva, El alegré Horacio que la ciudad entera conocía había sido enterrado en el fondo de un cajón lleno de telarañas y polvo y Una versión que no muchos conocían había salido de la oscuridad para tener un poco de luz.
El cambio que el menor había tenido había sido a simple vista para ambos, la seriedad en su rostro, su cambio de humor repentino, sus vestimentas negras que hacían verlo más poderoso y su sonrisa sin piedad a la hora de disparar o golpear a alguien, esa versión de Horacio que hizo que media ciudad lo amara y le tuviera respeto, fuera admirado y puesto en un pedestal de oro.
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Una semana había pasado ya, desde que la carta fue entregada sin recibir una respuesta que le indico a Horacio que Volkov no lo quería ni ver, Una semana llevaba aguantando a la pelirroja en la comisaría hablando maravillas de su nuevo novio, tomando de la mano a Volkov y visitándolo cada que podía, Sus gafas oscuras y semblante serio escondían todas las horas que se desvelaba llorando o maldiciendo.
Desde que se entero que estaba esperando un bebé se volvió más sencible, pero también más hijo de puta, era un genio simplemente escondiendo sus emociones como años atrás, el cambio le sentó bien y por ende eso lo tenia contento.
Unas botas al estilo militar, un par de Joggers, una camisa manga corta y un chaleco negro que cargaba todas sus armas le daban el toque que necesitaba, su cresta a un lado y las gafas negras demostraban que había alguien nuevo en la ciudad y sin duda alguna era la versión de un Conway enfurecido, nadie se atrevía a renegar nada, Conway lo miraba orgulloso al igual que Gustabo, Él Comisario Greco su cuñado alababa todo el tiempo su nueva personalidad haciendo crecer su ego, mientras que un Comisario ruso observaba todo desde lejos, no le dejaban hacercarse al menor y con razón, aunque Horacio se aguantara las lágrimas, no se dejaba llevar por comentarios de sus compañeros en dónde se burlaban de su "Estúpida relación" haciéndolos callar con su presencia o escupiendo frases que le dolían a la gente que trataba de lastimarlo.
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No había lugar en la tierra en dónde al ruso no le preguntaran por Sloan y este comenzaba a aborrecer el nombre de la pelirroja, odiaba las muestras de cariño en público que está le daba y odiaba su olor a perfume barato que olía a Vainilla empalagosa como lo era ella.
Tampoco era un secreto que se había dado cuenta de la nueva personalidad de Horacio, más de una vez cruzo miradas con el Inspector quién le veía con una mirada sin destellos o alguna emoción en ellos, las miradas frías que lanzaba a todo el mundo incluyendo al Comisario, hacían que escalofríos recorrieran su cuerpo y tensaran sus músculos, las cosas habían cambiado tanto en una semana que no podía contar con los dedos las veces que estuvo apunto de acorralar a Horacio para besarlo en los casilleros y reclamarlo como suyo ahí mismo.
Todos los días veía el sobre en el cajón de la mesa de la sala, algunas veces cuando despertaba somnoliento juraba escuchar la voz del menor en la cocina, su risa en la bañera mientras jugaba con las pompas de jabón o el sentimiento de calidez que sentía cuando dormían juntos, lo extrañaba más que a nadie, tal vez podía ser por el espacio que le daba o por qué respetaba sus decisiones o simplemente por qué le seguía amando, pero todo su buen humor se esfumaba cuando aparecía cierta pelirroja que comenzaba a aborrecer, traía gente a su departamento, hacia pública su vida personal y muchas veces se entrometía en dónde no le llamaban, como la vez que entró a la habitación habitación dónde Viktor guardaba todo lo de Horacio recibiendo así un reclamo del ruso.
Nunca le había gustado compartir su espacio personal y quizá por eso extrañaba a Horacio, aunque pensándolo bien, Horacio respeto más de lo que debía, por qué tenía miedo de perder a Viktor y él nunca tuvo miedo de perderlo, pero ahora ¿Le hacía falta?
[💫]
En esa semana ni Greco ni Conway habían compartido una palabra con el ruso a menos que se tratará de trabajo.
Horacio se había retirado ese día pronto, pues había informado que no se sentía bien, su padre al ver que su pequeño estaba decaído y sin ánimos dejó que regresará a su departamento, pero su tranquilidad iba a durar poco, pues a la hora y media que el menor se había retirado estaba en casa con su Esposa y su hijo mayor, preparando la cena en familia como era de costumbre, pero una llamada interrumpió su convivencia, el celular de Gustabo sonó y fue contestado por su padre poniendo la llamada en altavoz al ver que se trataba de su pequeño, pensando que el menor sólo quería hablar con ellos, pero...
Una voz fugaz y quebrada salió del otro lado de la linea, una sola palabra fue dicha para llenar de horror a la familia.
—Ayuda - soltó el menor sin fuerzas, cayendo inconsciente en ese mismo instante.
Ambulancias y sirenas de policía rodearon el portal en dónde el pequeño se hospedaba, el ruso al ver tanto movimiento quizo salir a ver que susedia su mayor sorpresa fue encontrar a Gustabo llorando y Conway gritando y calmando a Gustabo.
—POR FAVOR QUÉDATE CONMIGO, TE NECESITO— Gritaba el rubio mientras sus lágrimas seguían bajando.
Al ver como cargaban a Horacio inconsciente y lo trasladaban a una camilla, que lo llevaba directo al hospital.
El escándalo entre los vecinos despertó a Volkov, quién salió a preguntar que pasaba, llevándose la sorpresa de que a quién trasladaban al hospital era Horacio, al principio se asusto y quizo ir corriendo tras él pero entonces un sentimiento de culpabilidad lo invadió y prefirió quedarse, luego llamaría a su supervisor para saber que pasaba o simplemente lo dejaría pasar.
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Jack y Gustabo estaban a la espera de los resultados de Horacio, con los nervios a flote y el miedo a flor tratando de tranquilizarse, esperando a que alguien viniese a darles noticias del menor, pero Nada, nadie decía nada...
Gustabo movía su pierna en señal de intranquilidad y Jack caminaba de un lugar a otro.
Ambos desesperados, cuando la calma de uno de ellos había llegado, Greco corrió a dónde se encontraban su novio y suegro, Gustabo al verlo se lanzó a sus brazos siendo acogido por el de barba tratando de calmarlo.
[🦋]
Horacio podía escuchar que todos estaban afuera, pero aunque le gustaría negarlo el sólo esperaba que cierto ruso se apareciera, pero eso nunca pasó y se quedó ahí a la espera de la nada.
Capítulo 005- Segunda Edición
Edit/21 enero 2022
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𝑂𝑗𝑜𝑠 𝐷𝑒 𝐴𝑚𝑜𝑟
FanfictionLas cosas no son como parecen, ni mucho menos como las cuentan. 🦋🥃Wattys 2021🥃🦋 II EDICIÓN M-PREG 🪄