El fin de semana pasa volando y sin darme cuenta ya volvemos a ser lunes.-Buenos díaaas - me dicen los becarios entrando al despacho.
-Buenos días chicos - sonrío - ¿Qué tal lo pasasteis el viernes?
-Suuuper bien - dice Dídac - ¿cuándo dices que és la próxima?
-Este viernes no, el siguiente - le informo.
-¡Qué ganas!
-Ésta vez intentaré venir - dice Ángel.
-Sí, estuviste un poco perdido... - bromeo.
-Ya, lo siento, mi novia me trae un poco loco - se ríe al admitirlo.
-¿Y tú María, qué tal lo pasaste?
-Pues mucho mejor de lo que pensaba, aunque no acaba de ser mi rollo... pero para salir dos días al mes no me voy a morir tampoco.
-Bien, bien, me alegro de que lo pasarais bien - sonrío. - Ahora, desgraciadamente, nos toca trabajar.
Los cuatro hacemos un puchero.
-A ver, María y Ángel, hoy os voy a mandar un montón de trabajo, pero no os agobiéis porque no tenéis que entregarmelo hoy, lo vais haciendo con la calma durante estos días y cuando acabéis me lo entregais ¿vale?
-De acuerdo.
-Pues mirad, estos son los presupuestos de las empresas de Aragón - les entrego una carpeta bastante gorda en la que he estado trabajando los últimos meses - y éste es el presupuesto que tendrían que cumplir - les entrego otra carpeta, no tan gorda - están desordenados, así que os recomiendo que antes de empezar los ordenéis y os será más sencillo. Lo que tenéis que hacer es, cogéis ésta libreta y hacéis los cálculos para comprobar que realmente las empresas cumplen con su presupuesto.
-Uffff, vale - dice Ángel.
-Se que es mucha faena, pero tomáoslo con calma - sonrío amablemente - Em... como es mucho papeleo ¿os parece bien iros a la sala de reuniones?
-Siii, mejor - dice María - así tenemos toda la mesa para nosotros.
-Genial, si tenéis alguna duda, ya sabéis - les guiño un ojo.
Los chicos se van y me quedo a solas con Dídac.
-A ver en qué me puedes ayudar hoy... - cojo todos los papeles y los analizo atentamente - mira, éstos son los teléfonos de las oficinas de Valencia - le paso una copia de los teléfonos - tienes que llamar a cada una de ellas, les dices que llamas en mi nombre y les pides si te pueden pasar los presupuestos de su empresa de éste último año y que te lo envíen a este correo - se lo apunto en un papelito.
-Pero si aquí hay más de cien teléfonos - dice mirando la lista con la boca abierta.
-Lo sé, es un rollo, pero nos lo vamos a dividir. ¿Te parece si yo hago lo primera mitad y tu la otra?
-De acuerdo - se lo mira - entonces empiezo por los de la cuarta página, ¿no?
-Sí, genial.
-¿Me quedo aquí o si los dos estamos hablando nos vamos a molestar?
-Hmmm, mira si quieres ponte en esos sillones así estamos separados pero estarás más cómodo - le señalo los sillones que están al otro lado de mi despacho.
-De acuerdo.
La mañana pasa volando a pesar de que sea un trabajo muy rutinario. No me doy cuenta de que ya es hora de irse hasta que entran Ángel y María.
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Los secretos de la jefa
Non-FictionÉsta no es la típica historia de un empresario multimillonario súper joven que se siente atraído por su aún más joven e inocente secretaria. Esas historias no son más que pura ficción. Si estáis cansadas y cansados de ver siempre el mismo concepto d...