Incognito #1

Sin Miedo (3)

Hilsman miró a Cale, que de repente se estaba presentando, confundido. Sin embargo, alguien lo agarró del hombro y lo empujó hacia atrás.

"Quieto".

"¿Disculpa? ¡Ay, sí señor!"

Fue Eruhaben.

Raon estaba al lado de Eruhaben y levantaba la cabeza con sus patas cortas mientras observaba a Cale.

'Nuestro humano está en un estado extraño'.

Todo tipo de poderes diferentes de la naturaleza rodeaban a Cale en este momento mientras el poder de la tierra salía de entre las grietas de la roca.

Eruhaben también se dio cuenta de esto y retrocedió.

Los Poderes Antiguos tenían que ganarse por su cuenta. Otros no pudieron intervenir para ayudar. Podían hacer guardia para proteger a la persona, pero Eruhaben no pensó que un Dragón debería rebajarse al nivel de proteger a un humano.

"¡Goldie! ¡Protejámoslo!"

Por supuesto, siempre hubo algunas excepciones.

Eruhaben ignoró a Raon, quien suspiró antes de llevar a Hilsman a hacer guardia alrededor de Cale con él.

La roca continuó agrietándose mientras lo hacían.

Crrraaaaaack-

La roca que se estaba agrietando por sí sola se veía extraña.

Una voz sorprendida estaba hablando con Cale dentro de su cabeza mientras eso estaba sucediendo afuera.

-... Hay un humano que se ganó los cuatro poderes.

La voz estaba llena de sorpresa e incredulidad, sin embargo, Cale solo se concentró en la roca que se agrietaba.

Esta fue una entrada.

Podía ver la oscuridad a través de las grietas de la roca.

La oscuridad se dirigía hacia abajo y conducía a un área subterránea.

Aunque podría haber sido difícil dar un paso hacia esa oscuridad total, Cale no dudó en entrar.

- Toma la pertenencia de mis amigos.

- Te has ganado el derecho a hacer eso.

No había razón para dudar cuando el dueño de la casa le dio permiso.

Cale desapareció en la oscuridad.

Raon murmuró mientras veía a Cale entrar.

"Goldie, ¿deberíamos seguirlo? Nuestro humano débil es extremadamente débil".

"Aigoo, ¿qué hice para merecer esto?"

Eruhaben dejó escapar un suspiro antes de empujar a Raon al suelo. Raon empezó a agitarse.

"¡Para! ¡Cómo te atreves a hacerle eso a un gran y poderoso Dragón!"

"Niño, también soy un Dragón. Sé un buen chico y espera aquí".

Raon hizo un puchero y luchó para soltarse del agarre de Eruhaben. Luego observó con calma la cueva que apareció una vez que la roca se agrietó.

Cale había desaparecido en la oscuridad y ya no era visible.

Sin embargo, Cale no tenía ningún problema para ir en la dirección correcta mientras estaba en la oscuridad.

"La tierra me está mostrando el camino".

Fue una experiencia interesante.

Un idioma desconocido le mostraba a Cale el camino cada vez que daba un paso adelante. Esto le permitió no tener miedo mientras seguía caminando.