¿Hay Un Dragón? (4)

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El punto más alto del Territorio Henituse.

Basen todavía estaba en la habitación más alta de la torre del castillo.

"¡Hyu-hyung-nim!"

El grito de Basen resonó. Se sostenía de los rieles con una mano como si estuviera a punto de saltar de la torre para correr hacia Cale.

Estaba mirando el origen del destello de luz.

Basen Henituse escuchó un ruido justo cuando volvía a mirar.

Craaaaaaack.

La gran espada que había recibido un crujido antes del ataque.

Esa espada se quebró lentamente por completo antes de desaparecer en el aire. Algunos de los Wyverns que tocaron las motas de la espada que desaparecía se convirtieron instantáneamente en cenizas.

Sin embargo, algo más llamó su atención antes de que pudiera sentir miedo por lo que acababa de ver.

Vio el escudo.

El escudo extremadamente pequeño no se rompió. Sin embargo, hubo una grieta donde la espada lo había golpeado, como si fuera a romperse instantáneamente. De hecho, el escudo tenía grietas por todas partes.

Parecía listo para romperse en cualquier momento.

Luego vio a su hyung-nim, Cale Henituse.

Beeeeeep- Beeeeeeep-

La sala de comunicación de información. Llegaron todo

tipo de llamadas de emergencia.

Hubo especialmente muchas llamadas de toda la región noreste.

Muchos dispositivos de comunicación por video estaban conectados actualmente al Territorio Henituse.

Habían visto el campo de batalla a través de la pantalla.

Sin embargo, Basen no pudo escuchar ninguno de esos ruidos fuertes. Todo lo que podía ver era a su hyung-nim que apenas lograba ponerse de pie.

También pudo ver la sangre negra que Cale estaba tosiendo. Basen, de diecisiete años, sintió el dolor de la guerra por primera vez en su vida.

Fue en ese momento.

- Basen Henituse.

Escuchó la voz del Príncipe Heredero Alberu.

No lo había escuchado correctamente la primera vez, sin embargo, la voz significativamente seca rápidamente devolvió a Basen a sus sentidos.

- ¿Qué te ordenó tu hyung-nim?

Basen levantó la cabeza.

Recordó lo que su Cale le había dicho.

Volvió la cabeza y miró alrededor de la sala de comunicación de información. Este era actualmente el centro de información de todo el Reino de Roan. La información era el factor más importante en una guerra.

- Si no quieres avergonzarte, no, si no quieres arrepentirte en el futuro, no olvides tu tarea.

Aunque Alberu le decía esto a Basen, también se lo decía a sí mismo.

El rostro de Alberu que se veía a través de la pantalla estaba inyectado en sangre mientras se concentraba en lo que estaba sucediendo en el Territorio Henituse.

Le dijo una cosa más a Basen.

- La Primera Brigada de los Caballeros Reales y la Brigada de Magos se dirigen actualmente hacia el Territorio Henituse.

Incognito #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora