EXTRA #1

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8 años después

Jung Yoonoh a sus 35 años sabía exactamente de qué se trataba la vida, pero agradecía infinitamente haber tenido a grandes apoyos a su lado para emprender un camino que siempre había soñado. Estaba feliz y desde hace años estaba seguro de que nada podría bajarlo de aquella felicidad que se había impregnado en su sistema, su esposo y sus tesoros se lo habían dejado bastante en claro.

Estirándose lo suficiente en la silla giratoria que estaba en su oficina, soltó un gemido por el dolor y el crujido que hicieron sus huesos, no sabía exactamente cuanto tiempo llevaba en aquella posición, pero estaba casi seguro de que era mucho tiempo, probablemente horas en el que se había pasado diseñando el próximo edificio que se construiría en la ciudad.

Y justo cuando se dispuso a levantarse para estirar las piernas y relajarse un momento, la puerta principal de la casa sonó y eso fue suficiente para que una sonrisa se apoderara de sus labios.

—¡Papá! —la voz chillona de una niña llegó a sus oídos y antes de que pudiera salir de su oficina ella ya se encontraba abriendo la puerta para poder verlo. —¡Papi!

Sonrió enormemente y Yoonoh se sintió cálido de verla allí con los brazos abiertos y la mochila siendo casi más grande que ella mientras dos moñitos amenazaban con soltarse de sus coletas. Yoonoh amaba a su princesita con toda su vida.

—Hola, mi amor —él dijo tomándola en sus brazos y alzándola mientras llenaba su rostro en besos. —¿Cómo estás?

—¡Bien! —ella gritó abrazándolo por el cuello, no era ningún secreto de que era su padre favorito y Taeyong lo tenía bastante claro. —Papá estaba regañando a mi hermano, creo que se portó mal con él.

—¿Uh? —Yoonoh alzó las cejas y con su niña en sus brazos caminó hacia donde provenía la voz de Taeyong regañando a su otro hijo.

—Pásame tu celular y cuando pienses sobre ello ven a hablarme, Yeongmin —finalizó su esposo y Yoonoh se mantuvo en silencio sin desautorizarlo porque si lo estaba regañando era por algo que había cometido. El mayor de sus hijos bufó dejando en celular en la palma extendida y sin siquiera saludar a su otro padre se dirigió a su habitación.

—Hola, cielo —Yoonoh atrajo con su brazo libre el cuerpo de su esposo y depositó un pequeño beso en su cabellera, viendo como éste suspiraba y se apoyaba en él, mientras que Koemi jugaba con su cabello. —¿Qué sucedió esta vez?

—Está tan rebelde —musitó con los labios apretados mientras los tres se dirigían al sofá, Koemi sin siquiera despegarse de su padre. —Quería salir con sus amigos el sábado por la noche, pero le dije que no porque íbamos a salir a cenar los cuatro por nuestro aniversario y se enojó, comenzó a gritarme y yo le dije que estaba castigado y luego no me habló en todo el camino.

—¿Quieres que vaya a hablar con él? —Yoonoh preguntó acariciando su cintura con suavidad porque lo tenía abrazado y Taeyong negó con la cabeza lentamente.

—No, siempre es lo mismo, se enoja y luego vuelve aquí llorando porque no puede estar enojado conmigo —respondió dejando caer su mirada en su hija. —Cariño, ¿ya le contaste a papá Yoonoh que tendrás una presentación la próxima semana?

—¡Ah, no! —Koemi negó con la cabeza frenéticamente mientras ponía ambas manos en las mejillas de su padre favorito, apretándolas para llamar totalmente su atención. —La próxima semana tendré que bailar con mi salón, ¿irán, verdad?

—Claro que sí, mi vida —contestó de inmediato y ella sonrió enormemente dejando ver el agujero al no tener los par de dientes delanteros, pero luego hizo una mueca que preocupó a ambos padres. —¿Todo bien, Koem?

Caótico ↬ Johnten ; Norenmin ; Luwoo [NCT]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora