𝗣𝗔𝗟𝗘𝗧𝔸𝗦 ── lanki;;♥︎

─ ❛ prólogo ❜ (🌴)

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─  ¡Langa!¡Tu novio volvió a reprobar su exámen! ─ Se escuchó gritar del profesor de caligrafía, quien tomaba y tiraba suavemente de la oreja del pelirojo. El chico sólo se quejaba y manoteaba de forma débil en sus intentos de que lo soltara. Dió su intento de patada hacia la pierna contraria, fallando y terminando de caer de espaldas sobre el suelo. ─  Encárgate de él, ya tengo mucho con hacer que Miya estudie. Tampoco soy su niñera, te lo dejo. ─ El pelirosa abrió de forma elegante su abanico que siempre cargaba, dió media vuelta sobre sus talones y emprendió su camino hacia el restaurante de su novio. Habían quedado con verse ahí a la noche para comer y ayudar a Miya con sus tareas.

─ Reki.. Que habíamos dicho de- ─ No llegó a terminar su oración gracias a que su novio comenzó a hablar por encima.

─ ¡Perdón!¡Es que estaba viendo los videos explicativos pero- pero se me cayó el celular y se puso un vídeo de skate! Y bueno.. Jeje ─ Soltó una pequeña risa nerviosa, pasando lentamente su manos hasta posarlas sobre su nuca, sobándola y esperando el regaño del canadiense. Langa era muy estricto cuando hablaban sobre su salud física, mental y calificaciones; era casi como una madre. Lo bueno, es que siempre encontraba una forma para hacer que Reki no se aburra o se disgustara. La última vez, Reki se había enfermado y no le gustaba tomar su remedio. Así que Langa lo mezclaba con otras cosas para que no tenga el sabor del medicamento, y cuando Reki lo tomaba, le daba unas galletas con diseños de patinetas como premio. Langa podría ser estricto con Reki, pero no sacaba su lado amable y cursi.

─ Reki.. Sabes que apartir de ahora vas a venir a estudiar conmigo, ¿Verdad? ─ Arqueó una de sus cejas en espera de su respuesta. Claramente no había creído nada de lo que había dicho, pero bueno, no era momento de éso. Ahora tendría que activar su imaginación y hacer alguna forma para animar a su novio a estudiar. Empezó a recordar los gustos de Reki, analizandolos de a poco. Y ahí lo recordó. El dulce favorito de Reki eran las paletas. 
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