"Mi vida es codiciada muchos quieren mi cabeza, la verdad no me preocupa si la muerte se atraviesa, con tal de estar contigo juro resucitaría, para estar a tu lado lo que te resta de vida."
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ANTES
𝓣omás POV:
Ya van unos días desde el regreso de Kamille, mis ganas de pedirle que hablemos y regresemos me sobran.
Me he estado acostando con diversas chicas para intentar sacarla de mi cabeza y olvidar ese estúpido pensamiento de su regreso. Pero es que me es imposible olvidarla, ella es la única persona con la que puedo ser yo mismo, es mi complemento. No hay nadie como ella y el echo de que no esté me jode demasiado.
Verla feliz con alguien más me duele, pero de alguna manera lo acepto, me hace bien verla bien, pero me duele que no esté bien conmigo. ¿Eso es egoísta?, no lo sé y no me importa.
Ahora mismo me encontraba con algo de alcohol y unos cuantos porros encima mientras una desconocida me chupaba la pija, lo normal de estos días. No entiendo en qué momento me había echo tan dependiente de Kamille, no sé ni la razón por la cual sigo esperando su llamada. Bajé mi vista hacia la castaña que trabajaba en mi entrepierna, una pequeña risa salió de mi parte por lo patética que me parecía mi situación en este momento.
— No me siento bien sinceramente. — solté, la chica la cual no recuerdo su nombre dejó de hacer lo que estaba haciendo.
— ¿No te gusta o....
— No, no, sos increíble. — La interrumpí, ella sonrió orgullosa. — Sólo que me siento triste.
— ¿Extrañas a Kamille? — la vi sorprendido. ¿Conocía a Kami? — Oh, los re shippeaba, pensé que porque había regresado ya habían hablado. — Dijo en respuesta a mi cara, yo negué ante lo último que dijo. — ¿No han hablado?
— Nop. — dije recalcando la p.
— ¿Quieres hablar con ella? — asentí. — ¿Y por qué no lo haces?
— Me da miedo que ella no quiera hablar. — ella rodó los ojos.
— Sos un idiota, si en verdad la amas deberías de hablarle. — dijo obvia.
— Tienes razón, pero no me insultes. — dije algo indignado y ella carcajeó.
— Anda, guárdate esta cosa y ve por ella. — Dijo levantándose del piso, yo me levanté y terminé cubriendo mi pija con mis bóxers y mi jean.
— Muchas gracias por darme el empujón que necesitaba para ir a buscarla. — ella sonrío ante lo que dije.
— Anda, ve por ella. — sin más, salí de mi departamento, en busca de Kamille.
(...)
"Llego en 5."
Fue el último y único mensaje que me mandó Kamille después de insistirle en vernos. Ahora mismo me encontraba en una cafetería aleatoria que había en el centro, mis manos temblaban y ni siquiera me sentía capaz de pensar en qué decirle; el simple echo de pensar en verla me ponía los pelos de punta como si de un fantasma se tratara... un fantasma que me a seguido día con día desde su partida.
— Hey, hola. — okay, definitivamente no esperaba que ella llegara como si nada a sentarse y saludarme como si no se hubiera ido después de todo lo qué pasó. — ¿hola? — dijo después de mi pequeño shock después de verla.
— Hola. — dije, le di un pequeño análisis, su cabello está más largo y la noto un poco más delgada, incluso creo que se inyectó los labios porque están más grandes, sin duda sigue siendo la mujer más hermosa para mi. — ¿Cómo estás?
— ¿Sinceramente?, mal. — La vi algo desorientado por su respuesta.
— ¿Por qué?, si necesitas algo, aquí estoy, a pesar de todo. — ella asintió.
— ¿Aún me quieres? — me quedé helado ante su tan repentina pregunta.
— ¿Quieres que te sea sincero?
— Sip. — dijo con esa típica sonrisa "inocente"
— Si, te quiero tanto como el primer día o incluso más por el simple echo de tenerte en frente. He estado intentando superarte, aceptar que todo esto terminó, incluso he salido con otras, pero sigo pensando en vos. Ya considero que me hiciste brujería. — ella rió por lo último que dije. — Si te soy sincero Te extraño demasiado.
— ¿Por qué si nos extrañamos no estamos juntos? — okay, esa respuesta no me la esperaba.
— ¿Qué?
— Regresé aquí por nosotros Tomás, porque sé que sos mi mejor opción y yo siempre seré tu mejor opción... a pesar de todo.
— ¿a pesar de todo lo que a pasado quieres seguir con esto?
— Estoy cien por ciento segura de ello. — dijo y tomó mi mano, sentir su calor después de tanto tiempo me hace sentir que todo esto no es real.
— Yo estoy dispuesto, pero si te soy sincero ya no tengo la Confianza de antes. — ella me vio algo triste. — Pero estoy dispuesto a trabajar en ello, a que trabajemos juntos en esto para que finalmente funcionemos. — Ella asintió.
— ¿Estamos juntos otra vez? — dijo entusiasmada.
— Creo que si. — dije y se acercó a mi, para abrazarme y llenar mi cara de pequeños besos, yo reí por su entusiasmo, me hace feliz pensar que ella también me necesitaba, que nos necesitábamos. — Sólo una cosa. — ella dejó de besarme y me vió. — Esta plática ya no se va a repetir Kamille, es la última vez. — Aunque me dolía decirlo, era la verdad, nos dañaríamos más si seguimos como antes.
— Estoy de acuerdo. — Sonrió. — Hagamos que esta última vez dure para siempre. — y entonces, finalmente sucedía lo que esperaba por tantos días.
Nos besamos y este fue diferente a otras veces, incluso se sintió como si fuera nuestro primer beso... y tal vez así sea, tal vez finalmente esto funcione y sea como siempre habíamos querido.
