En lo que me he convertido

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    Mediados del 2023

    -¡Les presento al nuevo Capitán América!

    Y ese hombre salió desde dentro del edificio, campante,  con un detallado traje blanco rojo y azul, en casco y saludando a la gente.

    No puede resistirlo más y apagué el televisor.

    Actualidad

    -¿Estás bien?- le pregunto a Esperanza, pues con el estruendo y el susto había caído al suelo y yo la estoy ayudando a levantarse. Ella asiente con la cabeza y se vuelve a sentar -Quédate aquí-le ordeno.

    La cafetería está hecha un desastre, todos estaban conmocionados por el movimiento del suelo y el horrible sonido, platos y utensilios han caído y provocado desorden, la gente corre a ver que pasó, algunos gritan o está en el suelo tratando de refugiarse y deseando que no vuelva a pasar. Yo me dirijo al frente a ver que lo provoco.

    En la calle también hay desorden, más gritos y desesperación, cuando las personas y el humo se dispersaron veo fuego, fue una explosión. Entonces veo una sombra en el cielo, volteo para arriba una sombra salta por encima de la calle.

    Lo que hago a continuación es puro instinto, tomo mi bolso de la mesa y saco mi pistola de mano, Esperanza me mira con terror pero sólo la ignoro.

    -¡Todos adentro del local, al fondo, aléjense de las ventanas!- grito, no espero que me hagan caso y salgo a la calle.

     Esquivo algunas de las personas que van corriendo en dirección contraría a mí, huyen del epicentro; el evento electoral, se acercan las elecciones a alcalde y uno de los postulantes estaba trabajando en su campaña cuando la bomba explotó. No lo puedo creer, terroristas.

    El postulante ya había salido gracias a su equipo de seguridad, creo que hay algunos heridos en el suelo, los escombros impedían el paso. La sombra volvió a pasar por el cielo, ahora una risa la acompaña, y ¿tiene forma de orejas de conejo? A la mierda.

    Le apunto y disparo, maldición, es rápido, esquiva las balas, pero al cavo de los minutos se fue y no volvió a salir, se fue. Eso fue como estar en un sueño, después de  que la adrenalina bajo me di cuenta de donde había estado y lo que había hecho. Mi respiración está algo agitada, no por el cansancio, sino por la emoción.

    Miré a mi alrededor, es la paz luego de la tormenta, las personas asustadas, tumulto en la calle, las sirenas sonando a lo lejos; fui consciente de la arma en mis manos, trato de calmarme y vuelvo al local.

    2018

    Si antes estábamos de derrotados, ahora estábamos deshechos, él había destruido las gemas, con dos chasquidos de dedos y desapareció vidas enteras, más que eso, desapareció familias, sistemas, gobiernos, y al final hasta la más mínima esperanza que nos esperaba.

    -Habrá un ceremonia en honor a los caídos.

    -No sé si quiera ir- le digo a Steve.

    El había entrado a mi habitación, la puerta estaba abierta, yo estaba sentada viendo por la ventana, mi mirada estaba perdida y mi mente peor que eso.

    -Creo que no quiero ir, no me siento de humor- no lo miro y él se acerca.

    -Lo sé, pero será bueno, para nosotros.

    -No, no lo sé- digo que yo no puedo hacerme la fuerte por más tiempo, mi voz se quebró y mis lágrimas bajaron, no pude resistirlo.

    Me quebré ahí, frente a él, tantos años de conocerlo y hacerme la fuerte, todo este tiempo y no había dejado que nadie me viera así de débil.

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