Puede que no sea capaz de verte pero se cuan hermosa eres. Puede que no pueda ver tu sonrisa pero se que esta presente, puede que no vea lo que me haces... ¿Pero eso podre verlo?.
Puede que en mis ojos nunca sepas el cuanto te amo
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Se levantó con una sensación rara en el estómago, algo no muy bueno ya que cuando se enfermaba perdía drásticamente su concentración. Lo que lo hacía cometer varios errores en todo los que hacía y por consiguiente perdía un día de trabajó o debía de recurrir a pedirle ayuda a Armin
Se levantó con no muy buenas sensaciones, fue a une mesa con cuidado y en ella buscó dinero. Con las yemas de sus dedos palpo las monedas y contó lo suficientemente para algún remedio. Con cuidado fue a su baño y tomo una ducha, busco algo de su ropa, tomo su bastón y salió de su hogar rumbo a la pueblo, su malestar aún seguía presente por lo que debería de buscar algo rápido para aliviarse
Fue a una tienda de confianza, remedios caseros y demás. Petra Ral era una mujer amable, con gran habilidad para los fármacos y medicinas para el alivio de la gente. No era doctora, pero su especialidad en remedios caseros y efectivos la hacia de confianza. Además de que sus precios eran muy absequibles para todos
Petra- Saludo con entusiasmo- Eren Hola, es una alegría verte. ¿Que te trae por aquí? ¿Te ha pasado algo malo?- Pregunto con un tono preocupado- No es nada Petra. Solamente algo de malestar estomacal. Necesito un poco de esa medicina tuya y me sentiré mejor- Pese a qué no la veía sabía que ella había puesto una sonrisa en su rostro- Bien. Espera un segundo mientras la traigo, 25 monedas
Se fue a un cofre en el cual guardaba de todo, Eren por su parte solamente busco algo de dinero en su bolsa, cuando sintió que ella volvió lo dejo encima de la mesa de madera- En verdad te lo agradezco Petra- La peli roja sonrió agradablemente- No es nada. Espero y te sirva, buen provecho y que te mejores- El agradeció. Se despidió amablemente mientras se iba de la tienda al mismo ritmo en el que acostumbraba a caminar
Se dirigía a su hogar cuando sintío una mano en el hombro- ¿A dónde vas?- Escucho de una voz conocida- Mhm. Solo voy a mi casa Levi. Vengo de comprale una medicina a Petra, ¿Que hay de tí? ¿Ya te harto hacer vigía en el mercado?- Escucho su clásico chasquido de Lengua- Como sea... Dime ¿Algún Idiota que haya intentado aprovecharse de tu cegez?
Eren negó- Nada de nada. Bueno, el Idiota de turno pero nada. No hay necesidad de que me ayudes en eso, puedo manejarlo— Algo de ayuda no te viene mal. El mercado es relativamente tranquilo y no hay nadie a quien realmente vigilar. Golpear a alguien por ser pasado se oye bien- Asíntio con una sonrisa- Lo que quieres es golpear a alguien. Pero al menos aún te quedarás con ganas— No me mal entiendas agradezco que el mercado no necesite tanta atención. Pero te doy un punto, me gustaría golpear a alguien
Eren rió por lo dicho- Bueno espero que encuentres algo que te agrade. Tengo irme, adiós Levi. Que te vaya bien- Se giró y despidió con su mano al Azabache- Oye guárdame una de esas malditas berenjenas frescas maldita sea- Se echó a reír- Está bien. Lo prometo, adiós- Pese a su situación siempre habían unos pocos dispuestos a ayudarlo y de verdad agradecia por ello
Aquella sensación extraña se había pasado al beber un poco del suero preparado por Petra y se alivio por esto, podría volver a su día normalmente. Levantó la cabeza en dirección al cielo, no veía nada pero no sentía el arder de sus ojos m señales de que era un día opaco. Se preparó mentalmente para que puediera llover en la noche, esto siempre resultaba un problema ya que obstruia mucho su percepción y muchas veces debia de pedir la ayuda de Armin o pagarle a alguien para que le ayudará
