La cocina 1/2

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Todos disfrutan de la fiesta,  la comida y la compañía, nadie se ha percatado de nuestro cruce de miradas, tratando de aguantar el deseo que tenemos el uno del otro. Yo no soporto más tenerte tan cerca y mejor me levanto, y me meto a la cocina.

Has hecho lo que quería, me seguiste, aquí no hay nadie.

Yo solo me recargo en la pared, esperando que te acerques, pero no lo haces, solo me observas desde el marco de la puerta.

-no me acercaré si es lo que quieres-

_eso es exactamente lo que quiero, prometo no moverme_

-no me entiendes, yo quiero moverte-

_¿entonces solo me observarás?_

-probablamente-

Con mi mano derecha acaricio mi cuello y bajo hasta mi clavicula, solo uso un dedo para bajar por el espacio entre mis pechos hasta mi pantalón, procedo a desabotonarlo,  meto mi mano y me acaricio encima de mi ropa interior, el roce de la tela es excitante, siento como mi humedad empieza a mojar la tela; abro un poco las piernas y me mantengo recargada en la pared, me deslizo un poco hacia abajo;  con mis dedos hago a un lado la tela y acaricio esparciendo la humedad, lubricando cada espacio de mis labios, sintiendo como me excito cada vez más.

No has dejado de mirar, creo que te gusta lo que estás viendo.

Introduzco un dedo y empiezo a estimular, el placer que siento es delicioso, masturbarme mientras me vez es muy excitante.

Se me ha escapado un gemido. Y te acercaste rápido, me has puesto una mano en la boca.

-cállate, no quiero que nos escuchen-

Te pegas a mi aplastándome contra la pared.

-¿cuantos dedos estás usando?-

_uno_ logró decir aún con tu mano en mi boca; por alguna razón esto me ha excitado más, estoy más mojada, siento el fluido llenar mis dedos.

-mete dos y luego tres-  con tu mano libre tomas mi muñeca y la bajas y subes, así que hago lo que me pediste, meto dos dedos, otro gemido se escapa suave y aprietas más tu mano en mi boca; no me detengo, sigo metiendo dos y luego otro más, estoy tan mojada, mis dedos están llenos de mis fluidos.

Con tu mano en mi muñeca, sacas mi mano de mi pantalón y metes mis dedos empapados en tu boca, lo saboreas, pasas tu lengua por mis dedos.

Has quitado tu mano de mi boca, la bajas y empiezas a masajear mis pechos, mis pezones se empiezan a poner duros,  bajas la mano y la metes por debajo de mi blusa, levantas la copa del sostén y acaricias directo en la piel.

Tengo la boca abierta y seca, la respiración entrecortada, no quiero dejar de mirarte.

Sueltas mi mano, y bajas la tuya, acaricias encima de la tela, me encanta esa sensación, pero yo quiero que me penetres con tus dedos hasta que mis piernas queden temblando.

Sacas tu mano debajo de mi blusa y la subes hasta el cuello, por favor que nadie venga a la cocina, no quiero interrumpir esto.

_si harás algo, házmelo ya por favor_

-¿quieres que meta mis dedos?-

_si, eso quiero_

-si te escuchan no me voy a detener- saber que nos pueden escuchar me pone mas, esa sensación de temor a que nos descubran...

Placeres efímeros 1: Voces del placer (+21) TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora