APRIL
Miraba repetidamente entre el vestido que Hanna me había traído y ella.
La mujer había perdido la maldita cabeza. El vestido era demasiado corto y estaba segura que cuando me lo pusiera iba a quedar extremadamente corto.
No quería despreciara ya que era mi única amiga aquí, bueno aparte de mi jefa, aunque creo que ella no cuenta técnicamente. No saldríamos a tomar algo en realidad.
—Gracias. Espero no romperlo, es muy pequeño —dije mientras tomaba el vestido de sus manos y entraba a unos de los cubículos del baño de las oficinas.
—No lo harás —gritó con entusiasmo—. ¡Te va a quedar muy bien!
A pesar de que no estaba segura de mi atuendo pensé que nadie me conocía en la ciudad y al terminar el trabajo regresaría a casa y nadie sabría lo ocurrido.
Me puse el vestido como pude. El material se asemejaba al cuero y era difícil respirar con él. Cuando intenté bajar un poco el dobladillo mis pechos casi se salen así que decidí dejarlo corto.
Salí del baño completamente vestida. Había traído unos tacones altos que hicieran juego con el vestido.
—No estoy segura de esto —murmuré.
—¡Te ves preciosa! Estoy realmente celosa. Amo como se ven tus piernas.
No estaba acostumbrada a ese tipo de comentarios así que sentía como mi cara se volvía de un tono mientras intentaba bajar un poco el dobladillo.
—No lo sé ¿No te parece demasiado para una noche de tragos con los compañeros del trabajo?
Sonrió, moviendo la cabeza.
—Oh no. Esto es perfecto. Estás impresionante. Apuesto que todo el mundo querrá bailar contigo.
Hice una mueca.
—No bailo muy bien.
Al finalizar la frase me di cuenta que estaba siendo muy deprimente. Debía seguir el consejo de mi padre y Brooke, tenía que divertirme y eso implicaba dejar mis complejos a un lado.
—Te prometo que nos vamos a divertir —Me aseguró, y regresó al espero para terminar de maquillarse—. Es una gran forma de conocer personas y hacer amigos.
Suspiré. A pesar de no estar muy convencida quería hacerlo. Comencé a maquillarme aunque no iba tan cargada como Hanna pero agregué un poco de sobra oscura que resaltara mis ojos y un lápiz labial rojo para que hiciera contraste con el negro del vestido
—Te vas a divertir —dijo una vez más mientras salíamos del baño.
Esperaba que tuviera razón.
Guardamos nuestras cosas en su oficina y salimos en dirección a los ascensores. Pasamos frente a la oficina de Brooke y todo estaba apagado y la puerta cerrada, supuse que ya se había ido al igual que todos en el edificio. Había pasado todo el día preguntándome si iría al bar, aunque sabía que no sería así. Tampoco quería que me viera con esta ropa, no era apropiado.
Al bajar tomamos un taxi y nos dirigimos directamente al local. Ella parecía conocer a todos allí ya que mientras entrábamos saludó a todos.
—Chicos, ella es April. Es nueva —Me presentó ante un gran grupo de hombre y mujeres y ellos saludaron.
Fuimos a la barra por unas bebidas y compartíamos con los demás chicos del trabajo cuando un hombre desconocido me tomó por la cintura y me arrastró a la pista de baile.
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Enamorada de mi jefa
RomanceApril Cambar, una chica de 24 años residente de Marblehead, Ohio, consigue el trabajo de sus sueños en Nueva York y emprende lo que sería su primer viaje fuera de casa. Tras un primer día algo accidentado conoce a Brooke Penz, una hermosa chica de o...