El arte del surf

Desayuno inesperado

Después de haber pasado la noche durmiendo en el sofá,me despierto cubierto alrededor de los brazos por una manta que tenía desde pequeño, con el sonido de una guitarra de fondo.

Era Clara desde el dormitorio,tocando canciones country que yo jamás había escuchado.

Me levanté y me acerqué a la habitación de puntillas esquivando palomitas del día anterior.

Al llegar al lado de ella observé que llevaba puesto un gorro de lana amarillo.Enfrente de ella tenía unas partituras y una foto de una niña de 8 años.Le dí los buenos días y me fuí a hacer el desayuno para ambos.

Era sábado por la mañana,la vecina del tercero estaba gritando por el patio y a mi se me estaban quemando las tostadas.Antes de que se diera cuenta Clara de que la había fastidiado con el desayuno,le propuse una salida:

     Matt:Clara,que tal si hoy desayunamos chocolate con churros fuera de casa?

     Clara:Me encantaría.Es una de las mejores ideas que has tenido en tu vida <me dijo sonriendo>.

Acto reflejo,cogimos las chaquetas y salimos de casa.

Ya situados en la chocolatería y desayunando,hablamos de un par de cosas.

Una de ellas era la foto que tenía por la mañana guardada:

     Matt: quién era la niña de la foto?

     Clara: era la hija de una compañera del trabajo.Hace 2 jueves le encontraron cáncer en la boca.Al enterarme de ello decidí ayudarle a la madre de cualquier manera y me pidió si iba a poder tocar alguna canción en una fiesta que le harían y,sin ninguna duda,acepté.

     Me quedé sin palabras al oír esa noticia.En aquel momento observé los ojos de mi novia llorosos,apunto de derramar lágrimas y le dí un fuerte abrazo.

Caminando por la calle vimos el parque que me había encontrado la otra vez de cara al trabajo.

Decidimos dar un paseo por allí hasta que de golpe un chucho se nos acercó con una pelota de tennis.La cara del perro transmitía felicidad y ganas de jugar.

Era un Golden Retriever de gran tamaño con un pelaje perfectamente cuidado y unas patas que parecían bastante fuertes.

De golpe se nos acercó una señora de unos 50 años y se nos disculpó.Acto seguido le dijimos que no pasaba nada,que el perro era precioso y si algún día pensabamos tener uno sería de esa raza.

La señora comenzó a sonreir y nos dijo que nos regalaría uno si en alguna ocasión tuviera una camada.

Nos despedimos y nos fuimos a darle de comer gusanitos a los patos.

Todo ese día nos lo ibamos a pasar fuera de casa.

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Muchisimas gracias a todos los que leeis mis historias.Se os quiere a todos :3
Os agradezco muchisimos que comenteis y voteis :)
Subiré capitulos a menudo para que no perdais el hilo de la historia.

Si nos os contesto a algun comentario habladme por privado que aveces no me entero y son muchos :)

☆ Saludos y abrazos ☆