Fueron unidos por un libro.

Capitulo-6

Narra Giuselli:

En mi cumpleaños noté que Javier llevaba el collar de el cartel de los Lorenzo.  Mi marido también se dio cuenta por lo que hablamos el día siguiente sobre ello.

Azael: Llegue, tengo información.- nos entregó papeles como cada vez que hackea el sistema de seguridad y hay víctimas-

Fuimos a casa de Javier...

Toque la puerta y salió Bárbara.

Giuselli: Hola hermosura .- salude sonriendo abrazándola como normalmente-¿Esta el engendró de Javier?- ella negó y se hecho a reír por cómo le dije

Bárbara: Pero llegará pronto, ya debe venir en camino.- nos dejó pasar mientras esperábamos que llegara el engendro, hablamos de su luna de miel

En cuanto Javier llegó nos saludo y pedí hablar con el.  Fuimos a su despacho..

Giuselli: Eres un Lorenzo.- señalé su collar y el asintió-

Javier: Y tu la diabla.- me sonrió- ¿Que sucede?

Giuselli: Quiero asociarme a ustedes, así tendríamos más beneficios.- dije sería-

Javier: Yo no soy el líder, pero puedo conseguirte el número.

Giuselli: Ya lo tengo.  Se que es tu padre.

Javier: Estas de suerte, mi padre llega mañana estará una semana en la ciudad.- asentí- Yo hablaré con el, le diré que quieres ser socia.  Te llamo mañana.

Giuselli: También quiero hacer negocios contigo.  Necesito un lugar donde guardar dinero.- el asintió- Estará bajo tu nombre pero será mío, no se si me entiendas.

Javier: Un edificio, bajo un edificio, el dinero irá abajo, bajo tierra.- dijo pensando- Solo tú podrás entrar, si alguien intenta hacerlo el edificio caerá y tu dinero estará a salvo.  Claro eso sería si alguien descubre que hay dinero bajo el.

Giuselli: ¿Seguro que solo yo podré entrar?- el asintió- Confiaré en ti.- le sonreí-

Horas antes...

Llegue a casa y en el carro estaban los hombres, a nueve tiramos al río y a Joseph nos lo llevamos.

Mi diablo lo dejo amarrado en las cadenas acostado encima de una mesa. 

La Diabla: sabes me volví, lo que soy hoy en día, gracias a los mal nacidos como tú, y es por eso que me encanta torturarlos a los cabrones de ustedes. Una satisfacción indescriptible para que vean lo que ellas debieron sentir con los hijo de puta como tú. Además creo que ella se arto de ti y tus abusos.- dije y tome dos cuchillos enterrándolos en sus ante brazos, el cuchillo tras paso enterrándose en la madera de la mesa- Sabes, me han dicho que dijiste que mi amiga era mala en la cama.

Joseph: Sácame de aquí.- miro a mi esposo y este sonrió saliendo-

Hice lo mismo con sus pies para que no se moviera, tome una cierra y el lloraba.

La Diabla: Ahora te iras al infierno Joseph.- corte su pierna y la sangre salpico por todos lados y el gritaba- Cuando te decía no me pegues te detuviste.  Sabes porque según tu era mala en el sexo, porque le pegabas, no estaba cómoda, le pegabas a matar no era que le pegabas para que se excitara.  Le pegabas con odio.- dije cortando su muñeca-

La sangre salpicaba por todo el lugar, no me molestaba al contrario lo disfruté ya que el maltrato a mi amiga.  Tome una pistola de clavos y le dispare en un hombro, solo se escuchaban sus gritos en el lugar.  Cambie de método y tome los cuchillos, comencé a cortar la pierna la cual corte con la cierra, corte hacia arriba como si estuviera fileteando un pescado.  El se removía.