- Adiós Fla - despido a mi amigo en la puerta
- Adiós Eva, nos vemos.
Cierro la puerta una vez Flavio esta fuera, recojo un poco las mantas y ordeno el salón. La verdad es que la película ha estado bastante entretenida. Cojo el móvil para llamar a mis amigos de Galicia.
- Hola galleguitos- digo una vez me cogen la llamada.
Hablo con ellos de un poco de todo, de Madrid, del ambiente, del grupo que he conocido y de Flavio. A ver les he hablado de él porque es un chico con el que he encajado muchísimo, no por otra cosa, le conozco desde ayer. ¿Qué puede que en algún futuro pase algo? Pues puede ser nunca se sabe, pero no sé.
Seguimos hablando hasta que recibo un mensaje de Samantha. De verdad como quiero a esta chica. Me dice de ir a su casa, la digo que sí. Me despido de mis amigos y me preparo para salir.
- ¿Si? - coge el telefonillo una voz masculina. Mierda Eva a quién has llamado. - ¿Hola?- Espera. ¿Esta no es la voz del hermano de Sam? Joder.
- Hola, Eva - digo al reaccionar, joder Eva anda que no has tardado en reaccionar.
- Ah vale, anda que no has tardado en responder - de verdad este chico saca lo peor de mí.
- Bueno ¿me abres? - digo cortante y escucho al otro lado que suelta una pequeña risilla.
Y por fin suena el sonido que me indica que la puerta se ha abierto, o mejor dicho que me han abierto la puerta.
Samantha por que no me habrás podido abrir tu, maldigo para mis adentros.
Cuando llegó a la puerta de la casa de Samantha y llamo no me abre Samantha - que era con quien había quedado- si no que me abre Hugo. Otra vez, como el telefonillo.
- ¿Y Samantha? - Vale sí puedo reconocer que ha podido sonar un poco borde mi tono, pero en mi defensa diré que este chico saca lo peor de mi.
- Se ha ido
- ¿¡Cómo!? - Mi cara ahora mismo deberá ser un cuadro, por que Hugo se echa a reír a carcajadas.
- Que se ha ido. Pero tranquila no te alarmes tanto. Que se ha ido a comprar unas cosas.
- Pero, ¿Cuánto tardará más o menos?
- Yo que sé lo que tardará, es Samantha.
- Es que a lo mejor tengo que volver más tarde, o ir con ella.
- No, no. ¿Para que? Para que te pierdas y luego tenga que ir con Samantha a buscarte por haberte dejado ir sola. Ni de coña. Mira si quieres podemos jugar al uno. - No sé si esto último me lo ha dicho enserio o solamente para picarme.
- No soy muy de cartas.
- Bueno pues nada, si quieres algo estoy arriba en mi cuarto.- Me dice ya girándose para subir escaleras arriba.- Bueno espera ven que te meto el wifi.
Le sigo y cuando llegamos a donde parece ser que tiene el router me empieza a dictar números y letras, vamos la contraseña.
Cuando la meto me la acepta y se me concecta a su red.
- Bueno ya está. Me subo a mi cuarto, ¿vale?
- Vale sí
Seguidamente sube las escaleras que antes de meterme la wifi iba a subir. Esta vez las sube y desaparece de mi campo de visión.
- HUGO YA ESTOY EN CASA - se oye desde la puerta la voz de mi amiga, que interrumpe una melodía que sonaba desde la planta de arriba. - HA LLEGADO YA. ¡Ay Eva! que susto - pega un salto al verme en el sofá sentada. - VALE HUGO YA NADA. Ay Eva que me he ido a comprar -dice dejando las bolsas en el suelo- pensando que tardaría menos. He de reconocer que al principio solo iba a comprar 3 cositas para nosotras, pero luego me he ido acordando de cosas y al final pues mira aquí estoy. ¿Te he dejado mucho tiempo con él? - me pregunta, intuyo que se refiere a su hermano.
- Que va. Al principio he pensado la mato, como se la ocurre. Pero luego siempre hace lo mismo se encierra en su habitación. Aún que bueno me ha dado la wifi. Un amable gesto por su parte.
- Bueno tía cada día te vas acostumbrando mejor ¿no? Hoy has llegado bastante pronto por lo que veo.
- Sí. No he tenido que esperar prácticamente nada al autobús.
- ¿Pero echas mucho de menos Galicia?
- Mucho demasiado. Pero también a mi cama. - ambas reímos por mi comentario.
- Pero ¿no tienes cama?
- Me llegan mañana.
- Y has estado durmiendo ¿Dónde en el suelo o que?
- Sí.
- Tía quédate hoy a dormir aquí. Yo te preparo la cama, y además tenemos comida. Mi madre no está en casa y aunque lo estuviera no creo que te pusiese pega ninguna.
- ¿De verdad? Haber que yo tendría que preguntar todavía eh. Que no llevo ni una semana aquí y ya estoy durmiendo fuera.
- No pasa nada. Tu avisa anda. No creo que te digan nada. Además es por una buena causa no tienes cama. - Me guiña el ojo.
- Vale voy.
Marco el numero de mis padres y me coloco el móvil en la oreja. Al rato cuando ya obtengo la respuesta me despido y cuelgo.
- Vale tía me dicen que sí. Que me puedo quedar.
- Vale guay. HUGO. EVA HOY DUERME EN CASA. - Avisa mi amiga a su hermano.
- ¿COMO? ¿¡EVA SE QUEDA A DORMIR!?
- SÍ HUGO SÍ. - De verdad que no puedo evitar soltar una pequeña risa al ver que se comunican a gritos. Aunque sea porque no están en la misma planta.- Vale tía pues ya está mi hermano avisado.
- No creo que le entusiasme mucho la idea.
- Bueno me da igual. Fijo que luego se suelta más. Porque en el fondo es majo aunque no lo parezca.
- Pues ya veremos que pasa esta noche.
¿Qué os parece?
Yo espero que os guste y os esté encantando. ¿Cómo creéis que irá la noche?
Todavía no parecen tener mucho contacto, pero han tenido algo
yo os leo siempre y me hace muchísima ilusion💞
ESTÁS LEYENDO
No sólo has sido una casualidad
RandomEva una chica nueva en una ciudad grande, Madrid. Nuevas amistades en especial Samantha una chica rubia que sabe bien manejar la ciudad, pero su hermano mayor, Hugo... no es tan buena amistad. ¿O no?