One-Shots Volkacio 🌙

Dados.

Antes de empezar quiero aclarar que en este one-shot, Horacio y Gustabo aún son alumnos, es decir no han "traicionado" al CNP. Sin más que añadir, les dejo el cap, no olviden votar si les gusta :P

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—¡Que sí, que sí! ¡Confía en mí! Sabe de puta madre, yo lo probé una vez en una fiesta.— Insistía Gustabo a Emilio, señalando el vaso frente a ellos, cuyo contenido era una extraña mezcla de whisky, cerveza, refresco de uva, sal y un jugo de naranja que cargaba el rubio encima. La bebida no tenía en lo absoluto buena pinta, y era más obvio que el sabor tampoco.

—¡Pruébelo usted, si es tan bueno, cabrón!— Le devolvió Emilio.

—No, no. ¡Yo soy rial food!— Exclamó lo último, era evidente que se le había pasado un poco los tragos, pero eso aplicaba para los tres hombres sentados en la barra, después de todo llevaban desde las cinco de la tarde en ese bar, prácticamente vacío.

—¡¿Y eso que tiene que ver?!

—Venga, Emilio. Ya tómatelo, no seas cobarde.—Habló por fin el de cresta con una leve sonrisa, que había estado observando la escena, divertido.

El mexicano tomó el vaso de vidrio y bebió un gran sorbo de golpe, casi acabándose el contenido de este, no permitiría bajo ninguna circunstancia que le llamasen cobarde.

—¡No mame! ¡Que puto asco!—Gritó apenas terminó de tragar la asquerosa mezcla, con una mueca de desagrado y asco absoluto, causando que ambos hombres a su lado estallaran en carcajadas.

En el momento que el rubio pudo controlar su risa, pudo escuchar la campana de la puerta, que indicaba que alguien entraba al local, inconscientemente giró la cabeza para observar de quién se trataba. Y su sorpresa fue grande al ver entrar al lugar al propio comisario Volkov, y sentarse en una mesa no tan lejana a donde ellos se encontraban. Alzó una ceja, divertido, no desaprovecharía esa oportunidad para molestar al que consideraba su hermano.

Ajeno a las bromas que decía Horacio a Emilio, codeó al de cresta en el costado para llamar su atención, este inmediatamente volvió a ver a su hermano, interrogante.

—Mira, ahí está tu amor.— Señaló en voz baja y con una maliciosa sonrisa, aún sin dejar mirar al ruso.

Horacio siguió la mirada de Gustabo, encontrándose con, efectivamente, aquel comisario de cabellos grises, que se encontraba pidiendo, como no,
un vodka.

Horacio no pudo evitar sonreír al verlo, como siempre.

—Como te tiene, el ruso de los cojones.—Habló Gustabo con burla, al notar como su hermano miraba al peligris, embobado. "Ew..." Pensó.

El de cresta volvió inmediatamente a la realidad, dirigiendo su mirada a su bebida, que de repente parecía lo más interesante del mundo, algo avergonzado, haciendo soltar una pequeña risa a hermano.

El de cresta cambió inmediatamente el tema, siendo seguido por Emilio, retomando una conversación totalmente diferente y alejada del ruso, Gustabo giró los ojos y decidió dejarlo pasar, por está vez, y uniéndose a la charla.

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—¡Y el viejo de los cojones nos persiguió por toda la puta comisaría!—Exclamó Gustabo, totalmente indignado— ¡Oye, que yo no no quería lanzarle esa rata al Brown, pero entré en pánico! Además, entre ratas se entienden—Luego rió con fuerza, ya ni sabía que decía, después de todo, era el más borracho de los tres— A Horacio lo alcanzó, le dió una buena paliza, ¿A qué sí, Horacio?—Con una sonrisa, buscó la comprobación de el menor, pero cuando giró su mirada hasta él, lo encontró concentrado en otra cosa, más en concreto, en el comisario. Rodó los ojos.