×Nuestros recuerdos× |Michaeng|

39- Continuando

Pov Chaeyoung

Jeongyeon llevaba rara estos últimos días, bueno solo paso un día exacto, hoy era domingo, mi gran cita, pero antes de esta había quedado con mi mejor amiga para conversar sobre que rayos pasaba por su mente y el porqué estaba tan distraída.

Cada vez que la miraba parecía estar en otro planeta, en un tipo de viaje astral, hasta pensé que se había metido en drogas, el tan solo pensar eso me valió muchos golpes ya que jeong se ofendió por aquello.

—deberías estar alistandote psicologicamente, no queriendo sacarme información — se quejo mi mayor cruzando sus brazos.

—entonces si tienes un tipo de información — sonreí al oír el error que había cometido jeong.

—tal vez, nunca lo negué genia—suspiro y dirigió su mirada al techo evitando a toda costa la mía.

—porque no confías? Es algo tuyo o de otra persona? — pregunté sospechando de varias cosas.

—otra persona, por lo que no es mi deber hablar— la mire con una mueca insegura de sí seguir insistiendo o no.

—nayeon?—la coreana me miró durante unos segundos y luego volvió a evitarme, según mi experiencia y el conocer a Jeongyeon, eso significaba un si— que pasó con ella? Te hizo algo? Te molestó?

—para nada— rio viendo mi enojo— en serio no te puedo tomar en serio enojada, eres tierna — la mire seriamente, odiaba ser llamada de esa manera.

—yoo, no te golpeó solo por respeto a mi puño— dije sarcástica — que paso con Im?

—no es mala— mencionó desinteresada— no como crees.

—recapitulemos — me senté mejor para recordar cada uno de los daños que me había causado la coreana— desde fingir la muerte de mi novia hasta querer sacarme para siempre de la mente de la mente de la misma.

—osea hizo mal — admitió rapidamente— pero hable con ella, todo tiene una causa.

—de seguro que la quería un montón y que quería lo mejor para ella— volví a ser sarcástica.

— hablará contigo, eso espero, te contará todo.

—no pienso verla— dije cortante.

—por eso estaba tan distraída y preocupada— suspiro mientras se apartaba completamente de mi, de la nada su seriedad se elevo— no quería que te cerraras a escucharla, creeme que tienes que darle una oportunidad, ella reconoce que hizo todo mal, pero estaba presionada, solo escuchala por favor.

—y si te miente de todo? — era una gran opción, no sabía con exactitud qué le había dicho, pero Im nayeon sabía cómo controlar a las personas y en especial como mentirles.

—confío en ella, si yo lo hago, tú también puedes no? — lo pensé unos segundos, mi respuesta era negativa pero ver el rostro de mi mejor amiga hizo que mi pensamiento se viera afectado.

—lo intentaré — la mayor sonrió feliz con mi respuesta— estas segura que me hablara?

—no es seguro, pero espero que pueda, ella realmente quiere, lo se.

Uno de los miedos, nuevos, que me sembraba Im, era el daño que le podía causar a Jeongyeon, literalmente la coreana tenía a sus pies a mi mejor amiga, claro que no se si sería tan cruel de hacerle algo, pero viendo su pasado, realmente no lo dudaría mucho.

Así que en caso de que suceda lo peor, soo y yo planeamos un tipo de venganza contra esta, aparte de ayudar a Jeongyeon a superar a la idiota de Im.

Aún nada era seguro pero siempre era bueno tener planes de repuesto, es un movimiento un tanto inteligente si lo pensamos bien.

Igualmente, trataría de evitar cualquier daño, intentaría estar detrás de ambas viendo que nada se salga de control, o que se den mal entendidos.

—entonces— me levante de mi cama para ir a mi armario— que me coloco?

—a dónde irán? — preguntó curiosa, había planeado tanto esto que se me pasaban millones de lugares, hasta ahora no me decidía por uno en concreto.

—no lo sé... — dije dudosa— pero, el día del accidente, nosotras íbamos a ir en la noche a una montaña que daba a la ciudad.

—planeas ir por el lugar donde pasó tu mayor desgracia? — sonaba mal si lo decía así...

—no, osea si pero no— me excuse— solo quiero continuar las cosas, o mas bien empezarlas por donde terminaron, pero no habrá accidentes ni nada, iremos seguras.

—confío en eso, te volviste más responsable después de todo— me dio la razón — es una bonita idea, ir a donde planeaban hace años.

—exacto, solo me faltan comprar un par de cosas para comer ahí, será un tipo de picnic nocturno.

—iluminadas por la luz de la luna — asentí emocionada, tal y como pensaba — que cursi eres Son, ni yo llego a tanto— de burló de inmediato, solo y ella tenían una costumbre por hacer eso y mucho más.

—yah, así me quiere mina, la hago feliz— conteste con seguridad— no me avergüenzo.

—cursi gobernada — volvió a molestar.

—cursi lo soporto, gobernada nunca— le tire una almohada para que se callara y quitara esas ideas de su cabeza, aunque no eran mentiras....

Prefería negarmelo.

—ponte esto— se paro y tomo una polera ploma con un pantalón negro, algo demasiado simple.

—solo esto? —mire dudosa.

—bueno, entonces, este polo negro con esta casaca que parece cara pero te costó menos que un dulce y este pantalón.

—este tampoco me gusta— me queje nuevamente.

—que exigente, tu ropa no es la mejor que digamos.

—solo buscame algo con que vestirme y que no parezca como me visto siempre, quiero que me vea presentable — le ordene rápidamente.

—esta blusa celeste con el short blanco, cabello suelto y listo, es simple pero bonito y sobretodo, diferente y presentable — mire aquel oufit creado en segundos y me sentí conforme, me gustó bastante para mi sorpresa.

—trabajas bien bajo presion—la elogie.

—callate, me pagarás por eso, al menos un poco no? Algo de la tienda....

—siempre pides algo a cambio, pero esta bien, lo vale— cedí ante su petición rápidamente.

Estuvimos el resto de tiempo intentando encontrarme el peinado perfecto, como dijimos al inicio, lo mejor era solo tener el pelo suelto.

Mina aun no llegaba, estaba con sooyoung, según yo arreglandose, llegaría en unos minutos, los cuales aproveche para ir a comprar lo necesario y ponerlo en una mochila negra la cual pondría en mi moto.

Luego de varios minutos esperando, la puerta de mi cuarto se abrió, dejándome ver la hermosa figura de myoui mina, ropa casual pero que le quedaba hermosa, como siempre lógicamente.

—te ves perfecta — suspiré al ver su sonrisa aparecer.

Sería la noche perfecta.