Narra Zeldris
Estarosa: Vamos Zeldris en serio, simplemente podemos mandar a algunos demonios de bajo rango para que lo vigilen, no tienes que ir necesariamente tu mismo a verlo -me dijo tratando de convencerme de no ir al lugar que se supone que es el refugio de Meliodas, nos encontrábamos en mi habitación a solas mientras los mandamientos conquistaban otros sitios de Britania.
Zeldris: Los demonios de bajo rango son malos para ocultarse por completo y eso haría que Meliodas se de cuenta que lo encontramos para empezar a mudarse a otro sitio. Ya de por si fue difícil encontrarlo la primera vez, no quiero arriesgarme -dije asegurándome que mi espada no se mueva de manera violenta una vez este en ese lugar.
Estarosa: Eso lo se Zel, pero igualmente ¿Para que querríamos traer a Meliodas aquí junto a sus aliados? -pregunto mientras me observaba serio cruzado de brazos.
Ante su pregunta termine de alistar mi espada y me voltee a verle luciendo bastante serio y seguro.
Zeldris: En la primera Guerra Santa Meliodas fue un gran aliado contra las Diosas y logramos miles de cosas gracias a él. Ahora que tenemos la oportunidad de tenerlo de vuelta me parece lógico pensar que si lo convencemos lo suficiente podríamos tenerle a él junto a sus amigos de nuestro lado -ante lo que decía mi hermano empezó a verse sorprendido, mientras yo caminaba hacía el balcón de mi habitación.
Zeldris: Además de los beneficios que podemos ganar en la guerra piensa en esto hermano...-hice una pausa mientras me paraba en el barandal y le daba la espalda-...Si lo conseguimos traer de vuelta...podríamos recuperar a nuestro hermano mayor, aquel que por más frío que fuera igual se preocupaba por nosotros.
Y con eso dicho me lance para después sacar mis alas y volar hasta el bosque más cercano. Según los espías que había mandado, Meliodas se encontraba en el corazón del bosque, específicamente en una zona donde ningún ser vivo podría vivir fácilmente, pero al conocer bien a mi hermano sabía de sobra que eso no sería ni un entrenamiento de supervivencia.
Al entrar al bosque oculte mi presencia y apague lo que más pude mi poder para ser indetectable, tuve que bajar y empezar a caminar hacía mi destino para que él no me viera llegar volando. Estuve caminando por unas horas hasta que por fin pude distinguir en la lejanía un enorme árbol el cual era símbolo de que estabas ya en lo más profundo del bosque.
Zeldris: Así que es verdad que aquí te estabas ocultando Meliodas -susurre para mi mismo viendo a mi hermano saliendo de un hoyo que estaba en el árbol.
Pude ver que estaba hablando "solo", supuse que estaba hablando con la marioneta a modo telepático. Le vi agarrando un par de frutas y un par de verduras, supongo que para "cocinarse" su almuerzo.
Tuve que dejar de observarlo para ir a otro sitio para comer algo, sabía que si me quedaba más tiempo él sentiría mi mirada y no es algo que quiera la verdad.
Después de horas de estar observando su rutina vi que estaba a nada de ir a un lugar por lo que me oculte mejor entre la sombra y el árbol ya que vi como Meliodas empezaba a mirar a todos lados.
Zeldris: Perfecto noto que estaba siendo observado, tendré que decirle a los demonios de bajo rango que dejemos un rato a Meliodas para que complete su venganza o lo que sea que este planeando -pensé viendo como emprendía vuelo hacía algún sitio.
Al verlo más alejado emprendí mi camino hacia Camelot, decidí ir despacio para pensar en algunas cosas.
¿Cómo es posible que con una carta y verle tan roto haya hecho que mi odio por su traición desaparezca como si de humo se tratase? Mis mejillas agarraron un calor y color bastante notable cuando note que también empecé a cambiar en tan poco tiempo y que los mandamientos hayan visto todos esos cambios en mi me daban bastante pena y vergüenza.

ESTÁS LEYENDO
Traición //Yaoi
FanfictionSi en el equipo, familia o amistades no existe la confianza ¿De qué sirve el tiempo que pasamos juntos? No se de que sirve o que ganan con aceptar estar conmigo si siempre tuvieron la máscara de la mentira sobre ellos. Dicen que las mentiras duelen...