Elizabeth Abaddon es muchas cosas: Sangre Pura, Slytherin, Malfoy, hermana de una mortífaga e hija de un hombre lobo que mató a su esposa.
Pero ella no es seguidora de Voldemort.
Francamente, puede chuparle su polla imaginaria inexistente.
Y tamb...
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•*'¨'*•.¸¸.•*'¨'*•.¸¸.•*'¨'*•.¸¸.•*'¨'*•.¸¸.• C h a p t e r s e v e n You're my best friend •*'¨'*•.¸¸.•*'¨'*•.¸¸.•*'¨'*•.¸¸.•*'¨'*•.¸¸.•
ABADDONSEDESPERTÓMUYTEMPRANO pero tiene un terrible dolor de cabeza. Presiona sus dedos contra sus sienes donde siente más dolor, un latido que la hace sentir como si alguien literalmente estuviera golpeando un hierro con un martillo dentro de su cabeza. Ella gime, se frota los ojos y mira a su alrededor.
¿Dónde diablos ha puesto su varita?
¿Por qué James y Sirius han decidido hacer la fiesta en un día escolar? Como, sí, era el cumpleaños de Sirius, pero podrían haber esperado el fin de semana. Abaddon los culpa por tener resaca, aunque sabe que no es del todo culpa suya. En primer lugar, no debería haber bebido tanto.
Sin embargo, Abaddon no bebe mucho alcohol y cuando lo hace, es como dirían algunos: todoonada. Además, le gustaba que por una noche podía ahogar sus malditos problemas. Como si su hermana fuera una maníaca o que la Sala de los Menesteres ya no es un secreto conocido por pocas personas.
Abaddon se da cuenta de que AJ no está en su dormitorio -está durmiendo en la sala común de Slytherin, acostada junto a un Slytherin desnudo que también se emborrachó anoche. Son las cinco de la mañana- muytemprano. Abaddon vuelve a gemir; ella no puede volver a dormir.
Abaddon busca a tientas alrededor de su cama su varita. ¿Quizás lo puso en algún lugar aquí? Tiene sueño y sus ojos están cerrados por el dolor que está soportando su cabeza. Pasan unos minutos hasta que finalmente logra agarrar un palo de madera de acebo cargado por la fibra del corazón de un dragón: suvarita.
Cuando se ve obligada a recordar un hechizo que la librará de la resaca es aún peor. La sola idea de pensar hace que su cabeza llore de dolor aún más.
Pero ella lo logra, por supuesto.
Suspirando de alivio, Abaddon agradece a su varita por su ayuda y se levanta. Las siguientes acciones que realiza son básicas: hace su cama, se ducha, se cepilla los dientes y el cabello, se maquilla, se viste.
Cuando terminó, necesita tomar un respiro. No exactamente. Abaddon necesita aire fresco, pero luego ve su paquete de cigarrillos y decide que será mucho mejor que salir a la calle sin ninguna razón además de necesitar un poco de aire.
Abaddon desliza el paquete de cigarrillos en su túnica y sale. Ve a AJ con el chico de Slytherin al salir y niega con la cabeza. Deberían ser alrededor de las seis y el desayuno no se servirá hasta las siete, por lo que es perfecto para salir a fumar.
El castillo es enorme y salir tarda unos minutos, pero pronto está afuera, apoyada contra una pared del castillo y encendiendo un cigarrillo.
Lo triste de estar tan enojada ayer es que recuerda la mayor parte de lo que pasó. Abaddon recuerda toda la bebida y el baile, pero recuerda haber besado a Isaac y luego a Remus también. Abaddon recuerda que dejó la fiesta agitada por el único Sirius Black.
