Elizabeth Abaddon es muchas cosas: Sangre Pura, Slytherin, Malfoy, hermana de una mortífaga e hija de un hombre lobo que mató a su esposa.
Pero ella no es seguidora de Voldemort.
Francamente, puede chuparle su polla imaginaria inexistente.
Y tamb...
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•*'¨'*•.¸¸.•*'¨'*•.¸¸.•*'¨'*•.¸¸.•*'¨'*•.¸¸.• C h a p t e r t w e l v e Perks of being a moron •*'¨'*•.¸¸.•*'¨'*•.¸¸.•*'¨'*•.¸¸.•*'¨'*•.¸¸.•
ABADDONLE DIJO A REMUS LO QUE SUCEDIÓ, así que, naturalmente, todos sus amigos lo saben. Ahora que lo saben, ver a Abaddon y Sirius interactuar como dos niños pequeños es molesto. No, eso es quedarse corto, es insoportable.
Esos dos están constantemente en sus gargantas, sin saber cómo lidiar con sus propios jodidos sentimientos. Si tan solo miraran; cualquiera podría decir que obviamente se gustan el uno al otro. Pero sus constantes disputas y discusiones sobre nada lo arruinan todo.
"Oye, Betty, ¿lo has visto? Tu hermana finalmente apareció en la primera plana del Profeta", dice Sirius con una sonrisa burlona, arrojando el periódico sobre la mesa. Muestra una imagen en movimiento de Reyah Abaddon, buscado, por el asesinato de una familia muggle.
Esa es la primera muerte de Reyah como mortífaga. Abaddon cierra los ojos y respira hondo, tratando de ocultar la decepción que siente. Hasta ahora, Abaddon creía que Reyah todavía se podía redimir, más o menos. Porque aunque es un mortífaga, todavía no ha matado. Ahora es demasiado tarde.
"¿No querrías seguir el ejemplo de tu hermana?" Sirius se burla de la chica, sabiendo lo enojada que estará. Abaddon mira al chico de cabello oscuro, apretando los puños.
"Eres un puto idiota, Black", dice en cambio, moviendo su dedo medio hacia él.
Sirius se ríe, "pero Betty, eso hiere mis sentimientos".
"Tú y tus sentimientos pueden irse a la mierda".
"Preferiría que hicieras eso."
Se escucha una fuerte bofetada al otro lado del Gran Salón. Abaddon finalmente espetó, había abofeteado a Sirius Black en la cara. La chica lo mira, sintiéndose algo mejor después de haber abofeteado al chico. "Creo que tienes suficientes sueños de eso en la almohada", dice, las palabras salen como veneno.
"Ahora vete a la mierda, o voy a maldecir tu maldito trasero y de hecho te arrojaré al Lago Negro para alimentar al Calamar Gigante", agrega Abaddon, cruzando los brazos sobre su pecho. Sirius solo le sonríe a la chica, lamiendo sus labios.
"Ya veo, te gustaría reunirte con papá en Azkaban, ¿eh?" Levanta una ceja a Abaddon, burlonamente. Sirius ignora por completo que Elizabeth Abaddon acaba de abofetearlo.
Abaddon siente que la ira hierve dentro de ella mientras frunce el ceño. Una parte de ella quiere decir bravo, ese es un regreso jodidamente brillante pero la otra parte de ella está insultada, ¿cómo te atreves a hablar así de mi padre? Apretando su mandíbula, alcanza su varita.
"Tú eres el que habla, Black. Estoy seguro de que estarás en Azkaban antes que yo", responde Abaddon, sin dejar que Sirius tenga la ventaja. Esta vez, ella no lo dejará ganar.
