MINI DESCANSO

182 21 18
                                    


SENTIMIENTOS INTENSOS

CAPITULO 4

MINI DESCANSO 


Para más desgracia, el diseño de la casa de los Nara, aún por construir, estaba atrapado entre los incipientes incisivos del niño.

—¡Suéltalo ahora mismo!— la voz de Neji estaba desesperada

— ¿Cómo? —dijo la señora Anko al otro lado del teléfono—¡Nadie me habla así!

—¡Lo siento! –dijo Neji— No iba dirigido a usted, señora Anko— Boruto descontento al verse privado de su juguete, gateó a toda prisa hacia la mesa en la que Neji había dejado el dibujo, se levantó y extendió la mano, golpeando el teléfono, la comunicación se cortó—¡Maldición!—grito el ojiperla, al borde la desesperación, trató de llamar una y otra vez, pero estaba comunicando.

 Se puso de pie, agarró al pequeño y salió de la oficina —Tenten, llama ahora mismo a la señora Anko y por piedad Insiste hasta que te conteste, dile que voy de camino, sin duda, aquella travesura de Boruto, ahora si iba a costarle tener que cambiar de sitio la ventana y, quizás, algo más.



Sakura miró la larga lista de casas que había preseleccionado para su cliente y dio un sorbo al café, mostrarle todo aquello les llevaría una semana al menos, ella suspiro con pesar ya podía imaginar el dolor de cabeza que se les venia Oyó voces que se aproximaban, la aguda y risueña de la asistente  y otra más profunda y algo nasal que Sakura recordaba haber oído antes por teléfono. Su cliente había llegado puntualmente, asi que se levantó para saludar al recién llegado y se sorprendió al verlo.


 Era mayor de lo que había imaginado y no tenía aspecto de ejecutivo, y eso la sorprendió, por como estaba, parecía más bien una antigua estrella de cine mudo. Sakura trató de disimular su extrañeza, mientras le tendía la mano.

—Buenos días, señor Hatake, soy Sakura Haruno;  encantada de conocerlo— le sonrió e hizo una reverencia.

—Igualmente –respondió él— Es tal y como me la imaginaba por su voz—«Pues usted, no», pensó ella.


—Siento mucho no haber estado disponible ayer. He elaborado una lista de viviendas que se podrían ajustar a sus necesidades, pero necesitaría saber un poco más sobre sus preferencias para reducir el número. No tiene sentido que lo lleve a ver casas que, obviamente, no son de su interés— ella lo miro detenidamente.



—Si usted piensa que me puede gustar, entonces me gustará, señorita Haruno— el le dio una mirada sugerente —¿Puedo tutearte? —sin esperar respuesta, continuó— Tengo tiempo para ver cuantas casas sean necesarias. Al fin y al cabo, viviré en ella mucho tiempo.

—Tenía razón, por supuesto, pero su don de la oportunidad no podía haber sido peor. Quizás, el impresentable de Iruka tuviera razón por una vez: aquel hombre tenía más espíritu de turista que de comprador.


—Por teléfono mencionó que necesitaba una casa con un pequeño despacho, un comedor formal para poder celebrar cenas y al menos tres habitaciones—Él asintió.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Apr 13, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

SENTIMIENTOS INTENSOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora