El tormento de Lali Esposito *Terminada* *En Correción*

Capitulo final

Siento mi cuerpo cansado, tengo tanta sed, no sé cuántas horas llevamos de viaje, observó a las chicas a mi alrededor y una de ella no se mueve.

—¿Por qué no hacen algo?

—No puedo, hace rato que no tengo signos vitales.

—No, no puede ser.

—Creeme que es así, no había comido bien y estaba muy golpeada era nueva.

—¿Cuántos años tenía?

—15, es de las que venderán.

—¿Qué pasa con las que no?

—Cuando no hagamos falta terminaremos como ella, ¿Es la primera vez que te trasladan?.

—Si, siempre fue mi tía quien estuvo a cargo de mi.

—Eres la chica que compró el millonario.

Iba a responder pero el auto se detiene, puedo escuchar cuando las puertas se abren, es de noche ya que no hace mucha luz, me quedo sentada dónde estoy, los hombres entran y ponen unas bandeja de aluminio en cada jaula con agua y otra con un poquito de comida.

No dicen nada, tocan a la chica que lleva muerta un buen rato, la cargan y otra de las chicas que estaba a su lado sostiene a uno de las piernas, mientras otra trata de correr, pero su compañero le golpea la cara, las toman por el cabello y tiran de él.

—¿Qué harán con ellas?— Pregunto.

—Mejor come, el jefe no estará contento al saber que hubieron tres muertos hoy, valen dinero.

Es lo único que dicen y se llevan a las chicas, sin decir nada más cierran las puertas...

Narra Peter

La conversación con Rochi me dejó más lleno de duda que dé respuesta, mi hermana se iba de viaje por unos días, así que llevo los niños con mi mamá.

Necesitaba buscar respuesta y si ella estaba en peligro no podía quedarme con los brazos cruzados, empacó algunas cosas y llamó a un taxi, subo las cosas y los cargos, están dormidos, el viaje fue más largo de lo que pensé, al llegar a casa de mi mamá, mi corazón se llena de Miles de emociones con todo lo que pasó antes.

—Decidiste traer a mis nietos.

—Solo necesito que los cuides un tiempo, vendré pronto.

—¿Y la madre?

—Si no puedes entenderé.

—Son mis nietos.

No nos decidimos nada más, entró las cosas y luego a los niños, le doy un beso de buenas noches, cuando estoy caminando a la entrada de la casa siento que alguien me llama, volteó y veo a mi hermano, me lanza algo y al atacar puede observar que era una de las llaves de su carro.

—Las necesitarás.

Dice antes de subirse a unos de sus autos y arrancar, hago lo mismo que él y me dirijo al club.

Las luces estaban apagadas, pero igualmente estacionó y entró, pero no había nada, era como si nunca hubiera existido nada allí.

—Lali —Gritó al llamarla, pero no había nadie, o eso creía, hasta que veo a una chica caminar hacia mi, cabello rubio, estaba muy golpeada, da tan solo unos pasos y cae en el piso.

Corrí hacia ella para ayudarla, tenía el pulso debió así que la cargo hasta el auto, antes de abrir la puerta alguien más lo hace, puede observar a mi hermano quitar el cabello del rostro de la chica y sus ojos se llenan de lágrimas.