Las estrellas le habían predicho a Adhara Tonks y Harry Potter que después de la guerra podrían vivir en paz.
•continuación de star (h. potter)
•prohibida su copia y/o adaptación
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Un par de mariposas revolotearon por encima de la joven pareja de adolescentes que carga un bebé en brazos. Teddy Lupin abrió sus ojos, los cuales tomaron un color azul y estiro su puño en dirección a las mariposas, que continuaron su vuelo.
Harry acomodó el gorrito de Teddy y lo cargo con cuidado para ver a su novia, quien se acomodó la mochila.
—No, Teddy —le dijo al ver como intentaba quitárselo. Adhara soltó una risita—. Venga amigo, tienes que verte decente por que vas a conocer a los Weasley por primera vez —le habló como si el bebé pudiese entenderle.
Teddy le ignoró. Tiro del pequeño gorrito que cayó al suelo y miro con una sonrisa a Harry mientras que un poco de baba sale de su boca.
—Bien, no te lo pongas —dijo mientras lo atraía con su varita.
—Déjalo Haz, quizá pronto podrás ponerle todos los gorros que quieras —le animó Adhara tomando su brazo para caminar a la entrada de la madriguera.
A tan solo un mes de nacido, Teddy Lupin se encuentra listo para conocer a la familia Weasley, quien estaba ansiosa por ver y darle demasiado amor al único hijo de Nymphadora y Remus Lupin.
Antes de tocar la puerta, Harry limpió la baba del bebé, quien tiene sus puños en el afelpado oso de su mameluco mientras ve a su padrino con una sonrisa. Adhara tocó dos veces la puerta y acarició el cabello de Teddy que paso a tomar un color lila.
Ambos se miraron, intentando recordar, que en la familia Weasley haría falta Fred.
—¡Adhara! ¡Harry! —Ron sonrió al ver a sus mejores amigos—. ¡Y oh cielos! —sus ojos se abrieron al ver al bebé que carga Harry.
Con cuidado tomó el pequeño puño de Teddy, quien pego su cabeza al pecho de su tío, mientras él decía—. Hola tío Ron —dijo fingiendo una voz de bebé, que provoco que Adhara y Ron rieran.
—Miraló, esta tan grande y gordito —dijo sin derjar de ver al bebé—. Pasen, pasen —indicó, permitiendoles entrar mientras continuaba viendo al bebé.
Su sonrisa, se volvió un poco nostalgica.
—Te lo dije Ad, creo que le estamos dando mucha comida —le codeo Harry, ganandose una mirada indignada por parte de Adhara.
—Oh cállate, que tu insistes en que deberíamos darle galletas de chocolate cuando ni siquiera puede comer eso —Ron comenzó a reír al verlos discutir por aquel tema tan peculiar.
—¿Ya cumplió el mes? —curioseo Ron sin poder evitar estirar su mano y acariciar el cabello lila del bebé.
Ante aquel acto, el cabello tomo un color rosa chillón que hizo a Ron sonreír aun más.